pocos saben cómo surgió la amistad entre Beelzebub y Sigrid, no era muy común que el pelinegro entablara una amistad, en especial tomando en cuenta su forma de ser.
- ¿Tú eres Beelzebub? – Detuvo su andar, girando levemente la cabeza mirando a la chica por el rabillo de su ojo. – mucho gusto, soy... - no termino.
- Aléjate. – devolvió su mirada al frente y siguió avanzando. Sigrid frunció el ceño por cómo le hablo el peli negro.
- ¡Oye! No es mi culpa que estes pasando un mal día, yo solo me acerque a saludarte tratando de ser amable, no tienes por qué tarar así a las personas que son amables con Tigo. – la miro nuevamente, pero esta vez claramente molesto por lo que dijo la pelirroja, esta ni siquiera se inmuto de la mirada enojada del de ojos rojos, manteniendo su postura y su claro disgusto por el trato reciente hacia ella. – ahora... volvamos a empezar ¿quieres? – propuso. – mucho gusto, me llamo Sigrid. – termino de presentarse. El pelinegro no dijo nada, solo ignoro a la pelirroja y continuo su camino, Sigrid solo lo miro con una mirada cansada. Comenzó a levitar, alcanzado al más alto, levitando sobre su cabeza mirándolo a la cara. – sabes... no quedaría mal un "hola" de tu parte. –
- Deberías irte a casa. – hablo nuevamente, mirándola con el ceño levemente fruncido.
- Mmm...No. – contesto con una sonrisa. – en el fondo no quieres que lo haga. –
- ¿y cómo puedes estar tan segura de eso? –
- Solo lo se. - le dedicó una sonrisa, se incorporó, bajando al suelo nuevamente quedando frente al más alto. – siempre estas triste, eso lo vengo viendo desde hace tiempo. –
- ¿y cómo puedes saber que estoy triste sin siquiera conocerme? – pregunto, claramente irritado.
- El alma no miente sabes. – hablo dedicándole una sonrisa, al contrario. Frunció un poco el ceño, pero ya no hablo. – oye... ¿no quisieras hacer algo divertido? – propuso, Beelzebub devolvió su mirada a ella, iba a negarse ante la propuesta, pero la pelirroja hablo primero. – y no aceptare un no como respuesta. – cerro sus labios levemente abiertos por lo dicho, examino a la chica, seguía mirándolo con una sonrisa amistosa, la cual no mostraba ni una pisca de hipocresía, se preguntaba por qué se había acercado tan repentinamente a él, no lo conocía de nada, y suponía que ya había escuchado los rumores sobre él.
- ¿no has escuchado los rumores? – con tristeza oculta decidió preguntar, desviando la mirada de la chica.
- Si, pero decido ignorarlos, no creo en rumores absurdos. – contesto.
- Esos rumores son ciertos. – confirmo el más alto, ocultando el dolor que sentía revelando eso. – yo... - no termino.
- Tomare el riesgo. – rápidamente miro nuevamente a la pelirroja, sorprendido por lo que había dicho, la analizo, y no mostraba ningún miedo o arrepentimiento por lo que había dicho, estaba totalmente segura de sus palabras. – entonces... ¿vamos? – miro la mano de la chica, todavía sorprendido.
Después de ese día, Sigrid y Beelzebub frecuentaban verse, algunas veces (por no decir mayoría) este ayudaba a la pelirroja con sus planes, y claramente, a meterse en problemas, le daba mucha gracia ver como la pelirroja siempre se metía en problemas y como salía de ellos con frecuencia, y otras veces, solo para platicar, le agradaba su compañía, pues ya no se sentía solo, sabía que tenía a alguien con él, pero también le asustaba, pues el cariño solo aumentaba, y le asustaba despertar y ver su mano atravesando el pecho de la pelirroja.
Su puerta fue tocada, y después pudo ver a la chica entrando a su oficina con un libro en mano.
- Oye, mira lo que... - no termino, pues se había tropezado un una pila de libros, cayendo al suelo, sin poder soportarlo más, el pelinegro comenzó a reír. – ¡no te rías! – reclamo. – no es gracioso. – levantándose, sacudiendo su falda, miro con reproche al pelinegro. Suspiro y sonrió para ella misma, mirando, al contrario, le alegraba al fin verlo reír. – iré por unas galletas. – anuncio retirándose.
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Ragnarok el regreso de Sigrid [Poseidón]
RandomEntre las sombras de la arena del Valhalla, se esconde alguien en especial. La mayoria, la desconocen, otros la dan por muerta. Su nombre, prohibido de mencionar. Un dolor muy grande que dejó con su partida. Pero... Ignoraron algo... ...puede ha...