Ragnarok el regreso de Sigrid [Poseidón]

Capítulo 16

Sigrid miraba de manera insistente a su esposo, Poseidón se mantenía en silencio, pensado en su actitud anterior, creyó que ya había superado eso.

- Cielo... - llamo una vez más la pelirroja.

- La pelea está a punto de terminar...- alcanzo a decir, para después romper el abrazo y comenzar a caminar a la sala.

Sigrid no se movió de su lugar, solo se mantuvo observándolo con preocupación, suspiro y comenzó a avanzar, no tenía caso preguntarle algo que no contestaria, pero lo iba a averiguar.

Al llegar a la sala, todos se encontraban viendo la pelea atentos y a la vez asombrados, los dioses avanzaron para poder ver mejor la pantalla, abrieron los ojos con asombro al ver como Qin atravesar el bidente de Hades.

- Después de esto necesitaras un nievo tridente. – le dijo Sigrid a su esposo.

Hades iba a atacar nuevamente, pero antes de que pudiera hacerlo el humano lo atravesó, todos los del estadio y la sala quedaron en silencio, viendo como el cuerpo de Hades caía al suelo, y después se desvanecía.

Los gritos de emoción se escucharon en la arena, mientras que en la sala, todos seguían mudos. Un brillo verde comenzó a emitirse en el centro de la sala, todos voltearon para poder ver la llegada del rey del inframundo, Poseidón avanzo hacia la luz.

- ay... - se escuchó el quejido del peliblanco, el cual ya se encontraba en el suelo sobando su cabeza adolorido.

- Creí que habías dicho que jamás perderías. – Hades abrió los ojos con sorpresa al reconocer la voz, giro con lentitud, y se sorprendió aún más al verlo ahí, frente a él, vivo.

- Poseidón...- susurro con asombro.

- Siempre igual de insensato. – El rubio le ofreció la mano para ayudarlo a levantarse, Hades sonrió ante el gesto de su hermano, recordando aquella vez donde el menor hizo lo mismo, acepto la ayuda y tomo su mano, para después levantarse del suelo.

- ¿Como...? – su pregunta quedo en el aire cuando el rubio se hizo a un lado, Hades lo siguió con la mirada por unos segundos para después mirar nuevamente al frente, sus pupilas se contrajeron al instante y su boca se abrió levemente al ver esos ojos que creyó que jamás volvería a ver.

- Vaya que te destruyo. – comento son cierta burla la pelirroja.

Su labio inferior comenzó a temblar, sus ojos comenzaron a humedecerse, y cuando al fin pudo salir del Shock, corrió hacia ella para abrazarla. Sigrid no tardo en corresponder el abrazo de su amigo, el cual se encontraba llorando, ignorando la presencia de todos los presentes.

- De verdad eres tú...- dijo apenas, con alivio y felicidad en sus palabras. – estas aquí. –

- No te libraras de mi tan fácil. – Hades negó rápidamente ante el comentario.

- No quiero libérame de ti. – aclaro aferrándose más a la chica. - jamás... - lo ultimo lo dijo en un susurro casi inaudible, pero que la pelirroja entendió perfectamente.

- Si que te estas conteniendo. – comento Adán al dios del Mar, el cual hacia su mayor esfuerzo por no lanzarse hacia su hermano y matarlo.

- Cállate. – ordeno.