Planché un poco mi pelo después de ducharme, me arreglé lo justo y me maquillé, no demasiado.
Me tumbé en la cama escuchando Ed Sheeran a esperar a que llegaran estos tres chavales, y mis ojos se fueron cerrando poco a poco sin yo apenas darme cuenta.
Cuando los abrí tenía a Connor a mi lado, en la cama, observándome dormir. Me incorporé para mirarle a los ojos y le pregunté de broma:
-¿Eres un mi espía personal o no tienes nada mejor que hacer que espiarme mientras duermo?
-No tengo nada mejor que hacer.
-Sí que lo tienes, ahora estás en una banda, deberías estar con los chicos abajo.
-¿Debería? Pues prefiero estar contigo.- ¿Qué tenía que hacer ahora? Era demasiado tierno...
Intenté hacer como si no me hubiera derretido por dentro con sus palabras y le dije riendo:
-Anda Romeo, déjate de tantos pajaritos en la cabeza, tenemos que bajar ya.
Y éste se puso encima de mí en la cama impidiéndome bajar de ella y me dijo:
-En serio, sé que tú también prefieres estar conmigo. Sobre todo porque sé cuál es tu punto débil.
-¿A sí? ¿Y cuál es?
-Tu cuello.
-No es ese.
-Helen claro que es ese, ¿quieres comprobarlo?
-Mmm... No me fío de ti, ¿qué vas a hacerme?
-Tengo que hacértelo para que puedas comprobarlo, ¿aceptas? - Y estaba muerta de nervios, su cuerpo estaba sobre el mío, sin aplastarme claro está, pero estaba demasiado cerca, y yo no sabía si aceptar... Entonces se me pasó por la cabeza una famosa frase que dice mucho uno de mis ídolos, Zayn Malik, y la frase es "Just do it", asi que así lo hice. Acepté con la cabeza y mordí mi labio nerviosa.
Connor sonrió y se acercó despacio a mi cuello para comenzar a besarlo despacito por todas las partes.
Me hacía cosquillas por lo que me reí y le dije:
-Connor, ya te lo dije, mi cuello no es mi punto débil.
-Claro que lo es.
-No lo es, únicamente me haces un poco de cosquillas.
-Te aseguro que con tu cuello puedo dejarte completamente relajada y tranquila.
-No puedes, ya te lo he dicho.
-Sí que puedo, ¿me dejas probar otra cosa?
-Bueno... Está bien.
-Si consigo dejarte completamente relajada me debes algo, ¿okay?
-Okay...- Y me arrepentí nada más haber aceptado.
El rubito se acercó de nuevo a mi cuello y empezó besándolo de nuevo, absorbió un poco esa parte y me chupó, mordiéndome lentamente el cuello, chupando y besando después esa zona para que no me doliera la mordida.
Estaba demasiado excitada en este momento, jamás me había hecho un chupetón ningún chico y he de admitir que me encantaba, lo malo sería luego la marca que me dejaría.
Cuando acabó, se separó de mi cuello mirándome a los ojos sonriendo y me preguntó:
-¿Qué? ¿He conseguido relajarte?
-No, lo siento friend, te dije que mi cuello no era mi punto débil.- Mentí, no quería arrastrarme ante él.
Se rió y me respondió:
-Sé que te ha encantado Helen, no mientas.
-No lo hago, y ahora, ¿podemos bajar ya abajo con los otros?
-Está bien...- Respondió a desgana levantándose de encima de mí y por fin bajamos al sótano.
Al bajar me senté en frente de ellos para observarles y antes de comenzar, James preguntó:
-Bueno, ¿qué canción cantamos?
-Yo voto por "Just the way you are", de Bruno Mars.- Respondió Tristan. Connor añadió:
-Pues... A mí me gustaría "Amnesia" de 5SOS.
-Vale, sólo me queda oír la opinión de Brad y Helen, ¿cuál elegís?
-Sad Song.- Respondimos como por arte de magia los dos a la vez y nos miramos a los ojos fijamente.
-Bueno, han ganado, son dos juntos con la misma elección.- Dijo James fatigado y comenzaron a cantar. Me daba vergüenza conectar con Brad la mirada durante esta canción de amor, pero entonces se me pasó por la cabeza de nuevo la frase "Just do it" y cuando le miré me puse a cantar desde mi sitio y nuestra mirada se conectó mientras cantaban una parte de la canción que decía "Without you I,m just a Sad Song"
Su mirada me derretía de tal forma que tuve que dejar de mirarle para mirar a Tristan, quién observaba a la nada pensativo mientras tocaba la batería.
James tocaba el bajo y cantaba únicamente el estribillo de la canción junto a Brad, quién la cantaba entera, era la voz de la banda.
Connor tocaba la guitarra y al igual que mi hermano, cantaba únicamente el estribillo.
Se hizo tarde y los tres chavales se tuvieron que ir, dejándonos a James y a mí solos en casa pues mis padres habían salido.
Preparamos unas palomitas para ver juntos "Titanic" y entonces... ¡Oh no! James había visto mi chupetón. Quitó rabioso la película y me preguntó con un horrible tono que no me gustaba nada:
-¿Quién te lo ha hecho?
-¿El qué?- Pregunté intentando hacerme la tonta, cosa que no funcionó pues éste enfureció más y respondió de mala gana:
-¿El qué va a ser? El chupetón que tienes en el cuello.
-Pues ahora vas a quedarte sin saberlo, como venganza por haber lavado el váter con mi cepillo de dientes esta mañana.
-Pues quito la peli.
-Pues hazlo.- Respondí haciendo como si no me importara en absoluto que la quitara.
Y la quitó... Subí a mi cuarto cabreada y mientras miraba la luna a través de mi ventana puse "Sad Song", queriendo pensar en Brad un poco más.
Entonces me llegó un mensaje al móvil que me hizo sonreír:
"Hasta mañana bonita, te aseguro que averiguaré tu punto débil.
Connor J"
Y así acabó mi día, pensando en Brad y en Connor, gracias a su mensaje, hasta que mis ojos se cerraron.
Mañana sería un nuevo día...
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Deja que tus alas vuelen por ti... (The Vamps) COMPLETADA.
RomanceHelen McVey, una chica de 14 años que jamás ha besado a un chico, al contrario que todas sus amigas. Vive con su hermano, James McVey, un chico rudo de 16 y sus padres, Cristine y John, en Chester, Inglaterra. Por motivos de trabajo de su padre, la...