Capítulo diecinueve ∆

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El tiempo no cambia, el cambia eres tú.

La tarde caía y el sol aún se mantenía resistente, un cielo de color entre rojo y naranja, el otoño pronto llegaba, las hojas cambian de color de verdes a café.

Lo miré de perfil, sus pestañas negras como el carbón y el color de sus ojos marrones se parecían como aquellas hojas secas caídas.

-¿Que piensas? - preguntó, lo miré y suspiré
-Pienso en el tiempo, la vida y las personas - dije.

-¿Así? Cuéntame.

-Para ti soy joven, pero la edad no define a una persona, así que en la vida eres, soy, somos solo alguien, alguien desconocido para el tiempo, porque si te pones a pensar tu vida pasa rápido y cuando ves ya han pasado años y tú ni cuenta te diste, el tiempo es tu mayor enemigo, porque una vez que llega algo y no lo aprovechas no puedes volver atrás a tomar esa misma elección y tampoco puedes mirar el futuro porque el tiempo no te lo permite, mientras aspiras para adelante tu presente se está desecalibrando, cada minuto cuenta tu vida, pero tú no puedes.

-¿Por qué lo dices?

- Por que el tiempo es cierto que sigue dando los mismos números todos los días, ve que llega la noche y cambia de día de nuevo, de mes, de año, pero no se apuesto a pensar, el tiempo se repite una y una y otra vez, cuántas veces da vuelta, pero el único que se está cansando es usted, el único que se está haciendo mayor es usted, porque todos los días se repiten las mismas horas, minutos, segundos y, no cambian, pero usted sí cambia, y el único que hace que su vida vaya cambiado es usted, el tiempo no, el tiempo sigue siendo el mismo, el tiempo es invencible contra todo, no hay poder que supere al tiempo.

-¿Que te hizo pensar en eso?

- Lo vuelvo a repetir ¿Cómo es que sabe que no tenemos la misma edad?

-Por las fechas o los años de diferencia ¿No?

- El tiempo es el único que le hace creer eso, las personas tenemos presente eso, pero ignoramos que el tiempo es el único que no parece ser diferente, yo nací en abril, veintres, meintras usted en septiembre veintiuno, usted en 1991 y yo en 2001, okey son números diferentes, pero ¿El tiempo sigue siendo el mismo? Lunes, Martes, Miércoles, Jueves, Viernes, Sábado y Domingo, y luego de repite, al igual que las horas, igual que los días, los meses ¿Entonces porque dice que es mayor que yo? Los días siguen siendo los mismos, el tiempo sigue siendo el mismo, pero solo usted va cambiando desde que nace, hasta hacerse polvo.

Sonrió y negó.

-Deberias de ser filosofa.

-No se burle.

-No me estoy burlando, estoy diciendo la verdad.

- Seguro, bueno ¿Nos vamos? Kathe va a decir que ya no volvimos.

Se puso de pie y me tendió su mano, sin duda la tome y nos dirigimos hacía dentro del edificio.

Al entrar al departamento creo que no fue como muy debido, estaba mi buena amiga pasando su ADN en la boca de su novio.

- Creo que este no fue el momento debido en venir - dijo Leo a mi lado, lo miré.

- Cómo que mejor nos vamos ¿No cree? - asintio y nos despedimos de la bruja de Kathe, y salimos de su departamento.

////////

Escuchamos tocar la puerta, pronto lo miré.

-¿Esperas a alguien? - pregunté, es decir era fin de semana y ya era tarde.

-No, pero voy a ir a ver quién es - dicho esto se puso de pie y se dirigió a la puerta.

Pronto escuché voces tras abrir él la puerta.

No obstante entró una mujer un poco más mayor que nosotros.

- ¿Mamá que haces aquí tan tarde? - preguntó Leo, está lo miró mal.

- ¿Acaso no puedo visitarte? - reclamó la mujer.

Pronto se detuvo y me quedó mirando ella, me puse de pie un poco nerviosa, esa mujer no parece nada agradable de lejos.

- ¿Y quién es ella? - preguntó, ambos nos miramos y luego a ella.

- ¿No me digas... - su rostro cambio, ya no era uno confundido si no molesto, miró a su hijo.

- Leonard no es posible.

- Mamá déjame explicarte, no es lo que parece.

- ¿No? Pues explicame que es esto que veo ¿Entonces?

Pronto se lo llevó para la cocina y me quedé preguntando de que hablaban.

Como muy curiosa me acerqué.

-Mama entiéndelo, yo no puedo estar con Stephanie, el dinero no es todo en la vida.

- Quien no entiende esto eres tú, el dinero y el amor es aparte hijo, aparte ella es una niña, ¿Que van a pensar de ti?

-¿Por qué te importa lo que digan los demás? Es mi vida y no la de ellos.

-Tu padre lo dijo, eres su hijo mayor, el responsable después de él en lo suceda.

- El querer estar con alguien como ella no significa que me esté casando pronto, esto es solo una aventura mamá.

- ¿Una aventura? ¿Te ve ella igual? Sabés que las mujeres somos como el agua dulce, una vez que caiga sobre ti no se despegará fácilmente.

- Solo soy una experiencia para ella, sé que en algún momento encontrará a algún chico que la vaya hacer sentir como se merece y sé que se va a ir, llegará el momento.

-¿Acaso te estás haciendo de menos por una jovencita? Debes saber que lo mejor que puedes hacer es buscarte a una mujer de tu edad y tú mismo nivel, hijo.

-No, no me hago de menos, ni la haré sentir lo mismo, porque ella es una niña a mi lado, son diez años, y la edad no importa, y aunque la quiera no puedo permitir que luego se arrepienta por estar conmigo por obligación y no por amor, ¿Lo entiendes?

- No es suficiente humillación para ti tener que andar con ella, es mejor que tengas presente eso, que tú y ella solo no van a durar, una jovencita como ella solo busca dinero, un lugar donde arrimarse y conseguirlo todo sin que le cueste nada, así que si piensas despues quedarte con ella, tu padre y yo no lo vamos a permitir.

- Madre, ¿No estoy suficiente grande para saberlo? Ya te dije, solo somos una aventura que pronto tendrá un final, siempre tengo presente mis trabajos y lo que debo hacer, ya no soy un niño, el amor y el compromiso son dos cosas diferentes.

-Bueno que pronto terminen, y no la lleves jamás a mi casa, una chica como ella no aceptaré nunca - dijo aquello amargo la mujer.

Me alejé, juraría que quería llorar un río de lágrimas y quería estar bajo las raíces de un árbol plantada.

¿Cómo fui una ilusa? ¿Cómo pude tener una ilusión que la luz no se apagaría y que la oscuridad nunca llegaría? Pero porque seguía yendo tras una nube que sabía que al final se desvanecería.

Mi corazón se quebró una vez más, no sabía que era más grande ser un imbécil o que le hiciera caso a su madre teniendo tal edad.

Dolía, dolía saber que para él solo era una aventura, un juego de niños. Pero lo que el no sabe que la vida es un carrusel sin freno. ¿Pensaba que me iba a enamorar de alguien más estando con él? ¿Que me iba aburrir porqué él era mayor que yo?

Salí de su casa, y caminé por la acera para despejar la mente las lágrimas eran inevitables.

Me alejé y me senté en la acera fría, personas iban en sus mundos y distraídas, muy pocas de hecho, la calle era un poco desolada para decir verdad.

Limpié las lágrimas, aunque seguía llorando, un grupo de chicos pasaron conversando animamente.

🥹Un capítulo dónde dejo mis lamentos exclusivamente para Andrea y molestias por Leo🥲
Gracias, gracias, ya casi llegamos a los 6k, estoy muy feliz con ello, no pensé que cuando empecé fuera a tener tantas lecturas, gracias ❤️

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⏰ Última actualización: Dec 25, 2024 ⏰

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