Valeria se despertó de ese sueño pero en realidad no todo fue un sueño. Su hermana Julia, le dice que ha estado en coma durante casi un año pero que cuando le cuenta su sueño, le dice que todo eso a pasado. ¿Logrará ser feliz después de casi un año...
Estaba durmiendo tranquilamente cuando mi hermana me despertó.
—Valeria...
—¿Qué?—Pregunté media dormida.
—Despierta, tengo que ir a mi ginecólogo, ¿me vas a acompañar?
—No—Negué con mi cabeza.
—Vale.
Sentí como daba un beso en mi frente y se iba.
Horas después...
Me tengo que levantar. Creo que mi hermana ha vuelto del médico pero no lo sé, y si no ha vuelto, pues me iré yo a pasear por el retiro. Me levanto de mi cama y me visto a regañadientes porque se está muy bien de la cama y no me quiero ir pero lo tengo que hacer. Me pongo esto:
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Y salgo de mi habitación. Bajo las escaleras y me meto en la cocina a prepararme una tostada. Mientras hago la tostada, María baja las escaleras y me saluda.
—Hola, Va—Me dice mientras prepara su café.
—Hola.
Termino de hacer la tostada y la unto con mermelada de fresa, lo cual me hace sentir como una niña. Me como la tostada y antes de salir de casa me despido de María.
—María—Esta me mira—Me voy a pasear.
Asiente y me despido de ella.
—¡Adiós!
—Adiós.
Cierro la puerta y voy paseando. El médico me dijo después de despertar que tenía que pasear para que mi metabolismo no se duerma. Por eso lo hago; y estos días no he paseado mucho pero porque no tenía ganas, y aunque no había notado nada, ya era hora que andase un poquito más. Muchos se preguntan si he llegado a superar a Marcos, bueno, el problema es que desde que me desperté del coma, no he sentido nada igual; ya no veo a Marcos como alguien que me atraiga y me alegro. De todas maneras, nunca he tenido novio y nunca lo tendré. Me siento en un banco y veo al mismo chico que me encontré la última vez que pasee por aquí, ese que me llamó "introvertida". Se sienta a mi lado y me mira.
—Pensaba que te habías muerto.
—¿Por?
—No pasabas por aquí desde hace días.
Me encogí de hombros.
—Pues no; me tendrás que seguir soportando.
Mateo sonrió.
—No me molesta.
Sonreí y observé a mi alrededor, dentro de nada es Noche Buena y ya después Navidad y Nochevieja. Pasaba todo tan rápido...
[Julia]
Estoy saliendo del hospital llorando, tal vez eso solo me pasaría a mí, pero prefería que no fuera la única. El doctor Martínez me ha dicho que es probable que cuando naciera mi bebé, muriera, o durante el embarazo, no es lo que quiero, nadie lo quiere pero pasa. Llego hasta casa y cuando entro abrazo a Iván. Iván se gira entre mis brazos y me tranquiliza.
—Eh, eh, ¿qué pasa?
—Estoy embarazada—Digo entre sollozos.
—¿Por eso lloras?
—No...o sí...
Iván me separa de sus brazos y me sienta a su lado en el sofá, me quita las lágrimas que aún resbalan por mis mejillas y me sigue abrazando contra su pecho.
—Puede que cuando nazca pierda el bebé o durante el embarazo.
—Pero eso siempre está presente.
—Ya, pero normalmente no ocurre.
—¿Tiene más porcentaje?
Iván me estrujó más contra su pecho.
—Bueno, no pasa nada, estoy yo y Valeria y María para apoyarte.
Sonreí aunque me costase.
[Paula]
Entro en mi cuarto y me asusto al ver a mi tío sentado en mi cama.
—Joder que susto.
Mi tío sonríe y me invita a sentarme a su lado. Me siento a su lado y me abraza por los hombros.
—Me alegro que hayas arreglado cosas.
Sonreí; había arreglado bastantes cosas en dos meses. Algo contra mi ventana chocó y sonreí.
—¿Quién es?
—Lucas.
Me separo de mi tío y abro la ventana. Me asomo y lo veo.
—Llegas tarde—Le digo.
—No soy Steve Rogers.
Sonrió y salgo de mi habitación. Salgo de mi casa y me acerco a él. Lo abrazo y sus brazos me reciben con un cálido abrazo. Me da un beso en mi mejilla y me separo de él. Nos miramos, no podemos hacer otra cosa después de no vernos por lo menos en una semana porque Lucas, Martín y Rebecca se fueron de viaje a París. Lucas se acerca más a mi. Sus ojos me vuelven loca; en algún momento donde no me he dado cuenta de nada, Lucas me tiene abrazada en el aire. Me deja en el suelo después de abrazarme y me besa. Nos dejamos de besar y subimos a mi cuarto, mi tío ya se había ido y lo agradezco. Lucas se quita el abrigo y se pone el pijama, me acuesto y él se acuesta a mi lado. Se gira y me abraza. Dios, que bien se siente...
Decir lo que queráis, pero este capitulo tiene de todo. Tenía que poner esa foto en el principio porque me parece muy tierna, soy team Iron Man por si te lo preguntabas.
