24. Vuelta al ruedo

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¿Estaba triste porque hoy volvía a trabajar? no ¿echaría de menos mis vacaciones? puede pero no ¿estaba emocionada? sí, porque para mi suerte, me encanta mi trabajo. Me vestí y me puse esto:

Desayuné un café y tocaron el timbre

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Desayuné un café y tocaron el timbre. Cuando abrí la puerta, salté a los brazos de Mateo, me agarró por el culo, le besé y por último dejé mi cabeza en su hombro.

-Hola, reina-Dijo Mateo cuando dejé mi cabeza en su hombro.

-Hola.

Mateo me bajó y saludó a María. Volvió a mirarme.

-¿Lista?

Asentí y nos fuimos de casa. Nos despedimos de María mientras cerrábamos la puerta y me monté en su coche.

-¿Dónde te dejo, reina?

-En el hospital de Iván.

Mateo me miró obvio.

-Iván tiene cinco hospitales, reina.

Rodeé los ojos y le dije el nombre del hospital. Mateo me dejó en la puerta y antes de salir del coche me dijo:

-Después, voy a ir a tu casa a comer, ¿te parece bien?

Asentí y nos dimos un último beso.

-Te quiero reina.

-Y yo mi rey.

Lo vi desaparecer por el parking y entré en el hospital después de un suspiro. Sí, Iván tenía cinco hospitales, porque el cabrón sabía negociar bien, uno es suyo de verdad que es donde estoy ahora, otro es de Julia y otro es el mío. Los otros dos, los llevan sus empleados porque cuando Iván y Julia tengan hijos serán suyos. Ahora estoy en el de Iván, porque nos ha citado a las dos. Mi hermana viene un poco más tarde pero bueno. Entro y pregunto en la recepción donde está su oficina. Cuando me dicen la dirección, voy y llamo a la puerta.

-¡Pase!

Dice Iván detrás de la puerta. Entro y miro a Iván recogiendo papeles.

-Oh, Valeria, pensaba que venías con tu hermana.

-No, me ha traído Mateo directamente.

Iván asintió y me dijo que me sentara mientras los dos esperábamos a mi hermana.

1 hora después...

Una hora después, Julia apareció por la puerta y nos dio un beso a cada uno. Se sentó a mi lado e Iván se sentó en frente nuestra.

-¿Para que nos has citado?

Le pregunto.

Iván me miró y sonrió.

-Para deciros que este hospital será vuestro.

-Pero si ya tenemos cada una nuestro hospital.

-No solo será vuestro. Quiero que Maria y Mateo trabajen aquí conmigo. Quiero que este hospital en concreto, que es el más grande y el de más ganancias, sea el conjunto familiar. Será vuestro, mío, de Maria, de Mateo y de nuestros futuros hijos.

Decirlo conmigo: "Iván es gilipollas de nacimiento aunque se le quiere". En fin; mi boca y la boca de Julia llegaban hasta el suelo. Iván puede llegar a ser impredecible a veces, algunas veces te jodía y otras te favorecía, pero hay otras, como ahora, que nada pero absolutamente nada, tiene sentido. Un camino lleva a algo y otro lleva a algo hiper distinto. Pasó un rato y Julia se aclaró un poco.

-Vale-Dijo-El hospital será de todos pero ahora tendremos que saber, que puesto ocuparemos todos.

Iván la miró.

-Mateo será el psicólogo, hacen falta más psicólogos y su apoyo nos valdría de mucho.

Asentí porque me parecía bien.

-¿Y María?

-Mi madre será la limpiadora, estará bien pagada y si necesita ayuda, le ayudaremos entre todos sin excepciones.

Asentimos porque no había otro remedio. En asuntos de su madre, Iván podía ser un poco obligador, obligaba a todo el mundo, a parte de él, ayudarle a su madre si ella lo necesitaba. Por una parte era bonito pero por otra un poco agotador, porque le importaba bastante poco lo que no podías hacer, igualmente le tenías que ayudar.

-¿Y yo?

Le pregunté.

-Tú, Valeria, quiero que sigas con lo que hacías en tu hospital, osea mantener los gastos del hospital al régimen, en eso quiero que estés tú siempre.

Asentí y sonrió. Siempre me gustaron las mates, fui y soy muy buena en matemáticas y pues ahora, era la que se ocupaba de los gastos de los hospitales al régimen porque soy la que mejor la llevo. Iván miró a Julia.

-Cazafantasmas-Julia la miró-Quiero que tú estés en la parte de pediatría y todo el tema de los bebés, de los niños y de los embarazos, ¿de acuerdo?

Julia asintió y Iván miró su reloj.

-Vayamos los tres juntos en mi coche a casa.

Julia y yo asentimos y fuimos a casa en el coche de Iván. Cuando llegamos abracé a Mateo que ya estaba allí hablando con María. Nos sentamos en la mesa todos juntos y hablamos sobre el nuevo plan de Iván. A María y a Mateo les pareció bien su nuevo trabajo.

Y bueno, este ha sido mi día de hoy. Ahora, me he puesto este pijamas:

Me giro y sonrió mientras veo a Mateo admirar mi cuerpo

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Me giro y sonrió mientras veo a Mateo admirar mi cuerpo. No estoy desnuda pero él lo hace igualmente. Me acerco a él y me tira a su pecho y lo abrazo mientras escucho su suave latido del corazón.

-Te quiero-Dije y sentí la sonrisa de mateo contra mi pelo.

Me dio un beso en la cabeza y nos dormimos.

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¡Hola! ¿Cómo lleváis la semana por ahora? Yo la llevo un poquito mal pero me estoy recuperando poco a poco. ¿Qué os han parecido estos dos últimos caps? A mí me han gustado mucho la verdad. Bueno, nos vemos el sábado con más.

---Ene <3

LHM 2: No todo parece ser un sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora