5. Entonces, ¿he cambiado?

107 3 0
                                    

[Paula]

Mi tío salió de la habitación y me quedé pensando; había descubierto después de mucho tiempo que he estado con Javier para darle celos a Lucas, que no funcionó y que para colmo, Javier era un tóxico de mierda. Tenía que hablar con Lucas; salí de mi habitación y bajé las escaleras. Iba con prisa pero Carol me paró.

—¿A dónde vas?---Preguntó.

—No se lo digas ni a Marcos ni a mi madre, ¿vale?

—De acuerdo—Asintió—¿A dónde vas?

—A casa de Martín y de Rebeca, para hablar con Lucas.

Carol me miró y sonrió.

—Corre, no lo pierdas.

Sonreí y salí de casa corriendo, tenía que llegar lo más pronto posible.

[...]

Suspiré y llamé al timbre, estaba nerviosa porque no sabía cómo iba a reaccionar Lucas. Pasaron unos segundos y me abrió Martín.

—¡Paula!---Exclamó y me dejó pasar.

Entramos en el salón y me quité el abrigo.

—Cuánto tiempo, ¿verdad?

Asentí con una sonrisa y observé la chimenea. Había cuadros de Martín, Rebeca y Lucas siendo una familia como la que quería tener Lucas desde pequeño.

—¿Está Lucas?---Pregunté mientras me acercaba a la chimenea a observar una foto.

—No, está con Evelyn en el parque.

¿¡Qué!? ¿¡Toda esa caminata para nada!? ¿Es en serio Lucas? Miré a Martín y sonrió.

—Aunque...—Miró su reloj—...volverá dentro de poco.

Me tranquilicé un poco y me senté a charlar con Martín en el sofá. Pasó un rato y apareció Lucas despidiéndose de Evelyn. Entró en el salón y me miró con ojos como platos.

—Paula...

Lo miré y sonreí.

—Os dejo—Dijo Martín y desapareció por la puerta de la cocina.

Me levanté y me acerqué a él. Hacía tiempo que no me sentía así; triste, arrepentida..., lo abracé y empecé a llorar en su hombro; me devolvió el abrazó y me consoló.

—Lo siento mucho Lucas...—Dije entre sollozos—...He sido una idiota que ha caido en el veneno de Javier Holgado...

Nos sentamos en el sofá y los ojos azules de Lucas recorrieron mi cuerpo.

—No pasa nada, Paula—Me dijo—Todos, alguna vez hemos caído en ese tipo de mentiras.

Lo miré y lo volví a abrazar. Cuando me separé, Lucas entrelazó nuestras manos.

—Entonces, ¿he cambiado?---Pregunté.

Lucas sonrió y asintió.

—Claro que sí, ese tío te estaba convirtiendo en otra.

—Y...¿nos vamos a poder seguir juntando?

—Eso nunca lo dejamos de hacer, Paula, pero...hay una cosa que nunca te he dicho...

Lo miré atentamente y siguió.

—Es que...desde que éramos pequeños tú siempre pensaste que la que me gustaba era Evelyn, ¿no?

Asentí y siguió.

—Pues en realidad nunca me gustó ella.

¿WTF? ¿CÓMO QUE EVELYN NUNCA FUE SU CRUSH? En fin...

—¿Entonces?

No sé porqué tuve que preguntar eso, ¡no te hubieras hecho la idiota Paula y sales corriendo! ¡hubiera sido más fácil joder! A ver, mi subconsciente en ese momento se fue de vacaciones y me dejó ahí sola con cara de gilipollas que no veas; pero buenoooo.

—La que siempre me gustó eras tú, Paula, y hasta ahora, sigo sin poder superarte, me he enamorado de ti hasta las trancas y lo he estado ignorando por años.

DIOS, ¿Ahora entendéis porque me quedé con cara de estúpida? ¿Qué le digo a este pobre muchacho que ha tenido el valor de decirme la verdad? Aunque pensándolo mejor, era mejor decirle la verdad.

—Lucas—Lo llamé y me miró—A ver...a mí también me gustas desde siempre, pero el problema es que si empezamos a salir, la gente creerá que he dejado a Javier por ti y no quiero meterme en ese tipo de líos.

—Y...¿si lo llevamos en secreto?

En ese momento tenía unas ganas tremendas de tirarme por una ventana; Lucas no se iba a rendir fácilmente y me gustaba que hiciera eso. Suspiré y pensé, en realidad, los dos teníamos razón, no podíamos empezar a salir porque los rumores corren a la velocidad de la luz y también podríamos llevarlo en secreto. 

LHM 2: No todo parece ser un sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora