She's just kidding | FNaF Security Breach.

★ Capítulo catorce.

─ ¡Hermano!─, gritó Ivette preocupada, corrió donde su hermano una vez este se arrodilló extendiendo sus brazos a ella─ ¡C-Creí que algo te había ocurrido! ─ La voz de Ivette era interrumpida por sus sorbidos, al haber llorado una considerada parte del tiempo, sus ojos estaban rojos al igual que su nariz.

─ Tranquila Ive, ya estoy aquí─. La abrazó fuertemente, él también estuvo muy preocupado por ella, ya que no le permitieron salir a ver cómo estaban las cosas, una vez la luz en la bolera desapareció.

En cuanto a el sol, una vez los tres amigos se retiraron de allí, Moon pasó a ser Sun otra vez, su corazón de metal se ablandó al verla tan asustada. Una imagen se hizo presente en su memoria, de cuando su contraparte la atacó.

-Esa misma mirada aterrada...-, pensó, supo que no era un simple incidente, esto era grave.

─ Bonnie-, exclamó con una mirada pensativa, observando a la nada─, quisiera hablar un segundo contigo─. La seriedad de él con cada palabra que pronunciaba, provocaba "escalofríos" en el contrario.

Se alejaron de la pequeña y su hermano, un dato menor que no dejó de ser importante para ellos en todo momento, es la extraña ausencia de la guardia de seguridad.

─ Dime, ¿acaso activaste visión nocturna u otro método parecido?

[...]

Noticias horribles y cada vez esto se va empeorando más.

Primero el incidente con el "Mini DJ" y ahora esto, aunque ya estoy recuperado de su mordida y que no me genere un vaivén es a parte, pero que involucren a mi hermana es otra situación diferente.

Luego de que las cosas se calmaran, entre muchas comillas, llamé por teléfono a Vanessa, necesitaba hablar con ella de lo sucedido, agregando que nunca hizo presencia.

Ivette movía sus pies de adelante hacia atrás, estábamos sentados en las enormes escaleras de la entrada, puesto que el atardecer se hacía presente y mi turno terminaba.

Ella ha estado callada una vez terminó de desahogarse, deseo preguntarle qué ocurrió allí adentro, pero abrumarla ahora no es lo correcto.

"Lo lamento, estoy muy ocupada. Llama más tarde o nunca vuelvas a llamar"., finalizó el buzón de voz, quité el dispositivo de mi oreja, y suspiré tomando mis cabellos y tirandolos hacia atrás.

─ Vámonos Ive, es hora de descansar-, dije vagamente y me levanté tomando la mano de mi hermana.

Caminamos lentamente pero antes de poder siquiera salir, pasos apresurados y una voz femenina se oyeron detrás de mí, exactamente bajando en las escaleras.

─ ¡Hey, Eder! ¡Vuelve aquí!─ La rubia que tanto había invocado apareció, pero no le tomé mayor importancia─ ¡Te digo que me escuches!

─ ¡¿Qué mierda quieres?!─, al llegar al colapso, lo único que vino a mi mente es responder de mala manera, además de voltearme bruscamente asustando hasta a Ivette.

─ ...T-Tu turno aún no termina, Glamrock Bonnie volvió a-. Esa fue la gota que faltaba para explotar.

─ Ivette, espérame en el auto-, pronuncié entregándole las llaves del mismo a mi hermana, sin dejar de mirar con el ceño fruncido a Vanessa.

─ De acuerdo...─, dijo ella, saliendo a paso lento.

El estrés que llevaba acumulando se había escapado de mis manos, sé que estoy haciendo un mal papel de tutor por mi hermana, pero este lugar... esta empresa...

─ Me tienen harto...─, susurré sin que la contraria me oyera-. Te dejaré en claro dos cosas Vanessa, primero, mi hermana fue víctima del horrible manejo que tiene esta empresa, eso no es perdonable a mis ojos. Y segundo, estuviste desaparecida por cuatro horas seguidas, ¡para luego, venir con esta estupidez sin importarte nada de lo que ocurrió!

Su silencio se podía cortar con un hilo, quería responder, lo sé porque conozco esa mirada suya, la que crea cuando está en problemas y lo sabe. Pero aún así, solo se mantuvo con la cabeza observando el suelo.

─ ...Mo-Moveré algunas cosas para que puedas arreglarlo mañana si es necesario. Buenas tardes-, sin observarme, se retiró lentamente hasta donde los elevadores se encontraban. Sonreí para mí, era hora de asustar a alguien.

─ Solo una última cosa, Ness, sé que tramas algo...-, me giré provocando que lo único visible para ella fuera mi espalda, y caminé a pesar de sus gritos suplicando que le confesara a qué me refería.

Las palabras de Eder sirvieron para alimentar más al ser que ya comenzó a crecer dentro de Vanessa mucho tiempo atrás, exitosamente había logrado transferir algunos recuerdos de su mayor, a ella.

Pero la rubia realmente no podía gritar, pedir por ayuda, hacer saber que algo más la tenía atada a ese sufrimiento desenfrenado, quería escapar de la realidad que la aguardaba.

Por otro lado, su contraparte estaba extasiada, sentía que en cualquier momento, su gran ídolo la reconocería, y volvería a tomarla en cuenta.

─ Están perdidos... ya se acaba el tiempo...─, exclamó frente a uno de los espejos, que se encontraban abandonados baños para empleados que había en el centro comercial.

Poco a poco fue retirando la máscara que tenía, revelando a una sonriente chica, con ojos verdes muy brillantes, aunque su sonrisa duró poco al ver el rasgado que tuvo su lindo traje.

─ Conejito, para ti tengo algo preparado...-, terminó por pronunciar.

No seré la mejor dibujante, pero quería traerles algo como agradecimiento por todo su apoyo ♡