— ¿Sabes? — Cerré el libro y lo miré curiosa. — Nunca nadie se había interesado en mis gustos como tú o Jisoo claro, las personas a quienes decía gustarles o interesarles nunca se interesaron en saber sobre qué leía o porqué lo hacía, sin embargo, tú, tú me has demostrado lo contrario a lo que ellos hacían, te has preocupado por mí, te has interesado en mis gustos y hasta te has interesado en escucharme hablar sobre ello sin quejarte, a menos que tengas unos auriculares y no me estés escuchando realmente.
Jimin soltó leve risa desviando la mirada, guardó silencio unos segundos y luego me miró.
— Mérida, me gustas, te lo dije, ¿cierto? — asentí. — Bien, entonces te digo que cuando alguien me gusta me interesa todo sobre su vida, lo que hace, lo que le gusta, lo que le hace feliz, lo que le entristece, lo que le hace sentir incómoda y esas cosas. Lo que siente, lo que piensa, lo que esconde, lo que quiere, pero no puede decir, todo. Entonces cómo eres la persona que me gusta, tienes que saber que estaré interesado en ti al 100%, querré conocerte a fondo, completamente todo de ti, tus facetas, tus virtudes, costumbres, todo porque realmente me gustas y me interesas, así como me interesa lo que te gusta. ¿Entiendes ahora? — volví a asentir sonriendo.
— Bien, eso es todo por hoy. — dije haciendo el libro a un lado.
El miró el libro y luego a mí. — Pero ¿Por qué? Quería seguir escuchando más de la historia, está muy buena. — se quejó haciendo pucheros.
— Eres lindo cuando haces pucheros. — le dije una vez que me incliné hacia él sonriéndole. — Pareces un bebé haciendo eso.
Él también hizo lo mismo imitando la posición en la que me encontraba, nuestras narices se rozaron por la cercanía, él también sonrió.
— Sabes qué puedo hacerte uno si quieres. — Tenía esa expresión pícara en su rostro que tanto me gustaba.
«¡Oh, señor Park Jimin!»
— ¿Es permitido besarse con alguien que no es tu novio aquí en Corea del Sur? — fijé mis ojos en sus labios.
— Eso no lo sé, pero en mi caso, sí. ¿Por qué la pregunta? Señorita Mérida.
— Curiosidad nomás.
— ¿No será que usted quiere abusar de mí? — preguntó arqueando una ceja.
— Besar no es abusar, es disfrutar.
«¡Dios, bésame Jimin!»
— ¡Oh! ¿Eso quiere decir que quiere disfrutar conmigo?
— ¿Es tan obvio?
«¡Dios, bésame ya y déjate de rodeos!»
-------- ≪ °✾° ≫ --------
— Todos están muy ocupados. Están muy ansiosos por el concierto de los chicos el sábado. — Kai mirando a los demás moverse de aquí para allá, de allá para acá por los últimos preparativos para el concierto de los chicos.
— Así es. Todos están esperando el concierto con muchas energías, todo tiene que estar bien para ese día. — respondí mirando a todos haciendo lo suyo.
Las semanas habían pasado rápido y el concierto se había acercado, tanto los chicos como los del personal habían estado trabajando en lo que eran los ensayos, tarima y todo lo que estaba relacionado al concierto. Todos estábamos muy emocionados porque el día llegara. Durante esas semanas que pasaron ocurrieron unas que otras cosas que les contaré.
Primero: Jisoo, siguió saliendo con el nuevo del lugar en donde trabaja hasta que decidieron ser novios, lo sé muy rápido ¿cierto? Pero cuando se ama, a veces simplemente no se puede esperar, y hablando de rapideces, locuras, amor y noviazgos, tengo lo segundo y siguiente que decir, y es que Jimin y yo nos hicimos parejas.
ESTÁS LEYENDO
Melodías del corazón || PJM
Fiksi Penggemar¡Sin corregir! Mérida, una talentosa diseñadora, decidió viajar a Corea del Sur para encontrarse con su amiga coreana, sumergirse en la cultura y perfeccionar su dominio del idioma. Mientras exploraba las calles de Seúl, tuvo la oportunidad de cono...