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Roxana

—Aaah~ Alfa~ —sus embestidas me dan exactamente donde quiero que llegue, la polla de Jimin es tan gruesa que me llena completa, me hace sentir en las nubes.

Hoy es mi cuarto día de celo y es por una semana, Jimin no se cansa de follarme una y otra vez, me gusta sentirme así de unida a él pero también quiero descansar, él solo deja que comamos y nos bañemos, pero incluso en la ducha él me folla.

Siento como Jimin se vuelve más salvaje al embestirme y soy la primera en llegar a mi orgasmo gritando su nombre, luego él llega terminando dentro de mí, el nudo se forma, estoy en cuatro así que pego mi pecho en la cama recostando la cabeza en la almohada, Jimin deja caricias por mi espalda mientras siento como el nudo palpita en mi interior, lo siento hincharse cada vez que suelta su semilla en mí.

—Se siente tan bien estar así contigo, cómo toda una Omega digna del un Alfa líder —lo dice con su voz sexy que me pone peor.

Él se inclina pegando su pecho a mi espalda.

—¿Te gusta estar así con tu Alfa? —me gruñe en el oído.

—Si, Alfa —gimo cuando se mueve.

—Alfa, le traje la comida, se la dejo aquí —dice Elise detrás de la puerta sin abrirla.

Después que el nudo baja, Jimin camina desnudo por la habitación hasta la puerta y toma la bandeja de comida para los dos, me quedo mirando sus tatuajes.

—¿Te gusta lo que ves? —dice sin mirarme y sonriendo.

—Me encanta y me calienta saber que eres mío —sus ojos se abren y me mira sonrojado, es tan adorable, se rasca la nuca y tose— ¿Te gusta que diga que eres mío?

—S-Si —es tan lindo, no puedo con él. Aún con las piernas algo dormidas y un poco de ardor en mi vagina, me levanto y lo abrazo por detrás.

—Te lo diré cuántas veces quieras, eres mío, Jimin, mi Alfa —él me agarra por la nuca de manera agresiva para besarme con lengua.

—Debemos comer primero, antes de volverte a follarte sin piedad —dice lamiendo sus labios.

No pude evitar reírme, mientras comíamos no podía evitar hacer preguntas.

—Amor, ¿Cuándo notaste que ya te gustaba? Por qué no creo que apenas me viste te gusté —él me mira y sonríe.

—Somos diferentes a los humanos, nosotros si tenemos amor a primera vista, nuestro lobos solo tienen una Luna, podemos tener muchas Omegas pero solo habrá una Luna —toma otro poco de carne y sigue comiendo.

—¿Cómo te sentiste? —él sonríe.

—¿Qué sentiste tú? —intento recordar.

—Tu olor me llamó la atención y era como si te conociera, aunque no creí en nada de lo que me decías pero aún no sabía que sentía, que eran todos esos sentimientos, no tenía ni idea.

—Así me sentí yo, tú olor me dijo que eras tú, mi Luna, mi compañera —me guiña el ojo y yo me sonrojo.

—¿Tuviste otras Omegas antes que yo? —él comienza a toser— Eso contesta mi pregunta, ¿Tienes cachorros? —él vuelve a toser— ¿¡Tienes cachorros!?

—No, amor, no tengo pero si estuve con otras Omegas, sobretodo durante mi celo —hago un puchero pero entonces recuerdo que tampoco era virgen cuando lo conocí así que continúo comiendo.

—¿Tú también estuviste con otros mientras aún no te encontraba, cierto? —yo asiento— Y no sabes la rabia que me da saber que otro hombre y lo peor, un humano te ha tocado, pero aún no sabías de tí ni de mí así que no soy quién para juzgarte.

—Que bueno que lo entiendes amor, no importa quién haya estado antes de nosotros, lo que si debemos cuidar es que no hayan después de nosotros —él asiente.

—Por fin te he encontrado y no pienso soltarte, mi amada Luna —él toma mi mano y deja un beso en el torso de esta.

Y así paso esta semana, todo fue sexo, hasta que por fin terminó mi celo y Jimin tuvo que volver a sus actividades, mientras yo me quedé en casa ya que estoy muy cansada y adolorida, Jimin puede ser muy rudo en el sexo así que estoy completamente molida. En ese momento entra Elisa con el celular de Jimin en sus manos.

—Es la señorita Jeon —tomo rápido el celular.

Llamada

—¿Ari?

—¡Unnie! —puedo sonreír y sentir un alivio muy grande.

—¿Cómo estás? ¿Cómo ha estado todo? —pregunto nerviosa.

—Bien Unnie, Jungkook y yo estamos bien, pero tengo una noticia, recuerdas que te dije que hace días tuve mi celo, ¿Verdad?

—Si, lo recuerdo.

—Pues, estoy embarazada Unnie —me llevo la mano a la boca.

—¿Seré tía?

—Así es, todo está bien hasta ahora, mi salud está bien, pero estoy bajo chequeo constante debido a que soy mitad humana —puedo escuchar el tono de preocupación.

—Tranquila, se que estarás bien, Jungkook no dejará que nada te pase —le reafirmo pero la escucho llorar— ¿Ari, pasa algo?

—Es que Jungkook, está muy cerca de una mujer con la que solía follar y pues tú sabes que para mí es diferente y tengo miedo, a la vez que siento muchos celos porque él no es solo mío, odio porque no dejo de llorar, me pedí a Hoseok qué me dejara llamarte porque eso pasó hace minutos, ellos se quedaron en el estudio de Jungkook hablando o eso espero que estén haciendo —la escucho llorar.

—Estas emocional por lo de tu embarazo, así que trata de no pensar en eso, hazlo por el bebé, sé que es difícil porque también lo viví, Jimin me contó que pasaba su celo con cierta Omega, no la conozco y la verdad es que no quiero ni verla, pero también estuve con alguien así que no hablé más del tema.

—¿Qué debería hacer Unnie?

—Mi pequeña Ari, te puedo aconsejar más ya eres lo bastante adulta para saber que es lo que quieres en tu vida, se que harás las cosas bien, mi consejo es que lo hables con Jungkook, es tu esposo así como me contaste que él sintió celos de Yoongi pues dile que tú también tienes celos de esta chica.

—Eso haré, gracias Unnie, de verdad me hizo bien hablar contigo, saluda a Jimin de mi parte.

—Lo haré, cualquier cosa me dices, llámame, te quiero.

—Yo te quiero más, Unnie.

—Yo te quiero más, Unnie

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Wild Blood +18 [Completada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora