Wild Blood +18 [Completada]

05

Los luna azul:

Roxana

¡No entiendo nada! ¡Porque debo quedarme aquí! Quiero ver a Ari y saber que está bien... Escucho que abren la puerta, pero yo aún sigo encerrada en el baño.

—Abre la puerta nena, traje tu desayuno.

—¡No quiero nada, solo quiero saber cómo está mi hermana! —digo llevándome las manos a mi cabello.

—Hagamos un trato, si te comes la comida... Llamo a Jungkook para que hables con tu hermana.

—¿Y cómo puedo confiar en ti? —digo levándome y llegando hasta la puerta.

—Pues soy un alfa, nuestra palabra se cumple... Siempre cumplimos.

Abrí la puerta y él me muestra la bandeja con una sonrisa que hasta a mí me hizo sonreír... Decidí tomarla me senté en la cama y comencé a comer mientras era observada por Jimin.

—¿Por qué me miras tanto? —digo aún comiendo.

—No sabes cuánto tiempo he esperado por ti... Quería conocerte... ¿Acaso tú no lo sientes o no lo sentiste la primera vez que nos vimos? —levanta una ceja.

—Pensé que eras hermoso y que te conocía... Aparte tu aroma me encanto es como si hubiera esperado ese olor —digo metiendo otro bocado en mi boca.

—Ese es el llamado... Percibimos olores, pero el de tu pareja es diferente siempre te olerá a cosas que te gustan y que a ella también... —sonríe.

—Tu hueles a durazno y melocotones —sigo tomando café.

—Pues me encantan esas frutas... Tú a mi hueles a vainilla y canela —dijo olfateando.

—Me gustan ambas, me encantan los dulces que los contienen —digo dejando la bandeja en la cama.

—Que bueno que lo hayas comido todo, ahora podrás hablar con Ari —dice sacando su celular y llama.

Llamada

—¡Hyung! ¿Que sucede? —se escuchan gritos al final.

—¿Por qué ese escándalo Jungkook? —siento que Jimin aguanta las ganas de reírse.

—Ari no quiere desayunar... Y me está lanzando cosas.

—Dejemos que se hablen, Roxana quiere saber que su hermana está bien.

Veo que Jimin me pasa el celular y lo coloco en mi oído.

—¡Ari! ¡Por favor! Baja eso... Tu hermana quiere hablarte.

—¿¡Unnie!? —pregunta nerviosa.

—Si soy yo Ari... ¿Cómo estas? ¿No te hizo daño? —veo que Jimin cruza los brazos.

—No, estoy bien... Pero no quiero desayunar quiero irme contigo.

—El pajarito Ari, ¿lo recuerdas? —escuchó un "uhum" de su parte— Pues siempre recuérdalo.

—Creo que ya fue suficiente —dijo Jimin y creo que teme que haga algo.

—Te veré en el espejo, Ari... Te quiero y come, ok.

—También te quiero.

Veo que Jimin toma el celular, pero de manera suave y corta la llamada... Toma la bandeja y sale de la habitación... Pasaron unos minutos desde que Jimin salió y veo que vuelve a entrar... Estaba en una esquina alejada de él.