UNTOUCHABLE | KTH&JJK

12

Setiembre llegó más rápido de lo que esperaba. El frío empezaba a notarse en el ambiente dando un aviso silencioso de que estaban a pocas semanas para llegar al invierno. Por esa razón le había pedido el favor a Deiji de que le diera todas las cobijas y suéteres que sus padres habían desechado porque ya no les gustaba o simplemente estaban muy "dañados" para su gusto.

La omega colocó la última cobija en los brazos del príncipe, siendo con esa seis en total y cuatro suéteres.

-¿No hay más? ¿Estás segura?

-No alteza, eso es todo lo que los líderes sacaron el mes pasado. Lo de meses anteriores ya se llevó a refugios y orfanatos.

Jungkook chasqueo la lengua disconforme.

-De acuerdo, gracias.

-¡E-espere! ¿Puedo preguntarle a dónde lleva todo eso?- cuestionó, su rostro reflejando preocupación-. Si quiere dárselo a personas que lo necesiten puedo pedirle el favor a uno de los guardias, no es necesario que lo haga usted.

Jungkook negó con la cabeza. O sea, sí iba a llevárselo a alguien que lo necesitaba. Pero no se trataba de algún refugio, sino del alfa que tenía escondido en la cabaña hace un mes.

-N-no te preocupes Deiji-ssi, yo puedo.

-Pero príncipe...

-Yo puedo- insistió, empezando su camino hacia la puerta que daba al bosque-. ¡Adiós, y gracias!

Deiji suspiró y negó rendida. Cuando aceptó el trabajo pensó que lidiar con un omega sería fácil. Oh, se había equivocado muchísimo.

Jungkook emprendió el recorrido por el bosque como siempre, con la única diferencia de que tenía una torre de cobijas y suéteres en los brazos que le dificultaba ver el camino con claridad. Sin embargo, y sin saber cómo, llegó a la cabaña sano y salvo. Y lo más importante, sin lesiones.

-¿Príncipe Jeon?

-Hola Taehyung-ssi. Eh...¿Me permites pasar?

Taehyung se hizo a un lado viendo al omega con el ceño fruncido al no entender qué hacía con ese montón de cosas encima.

Jungkook dejó todo sobre el sofá y sacudió sus manos, soltando un suspiro como si hubiera corrido la maratón de su vida. Se encontró con la mirada del alfa, el cual lo observaba interrogante esperando una explicación.

-Esto es para ti.

-¿Para mi?

-¡Por supuesto!- medio gritó-. El invierno está cerca y no quiero que nueras por hipotermia. Suficiente tengo con esconderte, no necesito un cadáver.

Taehyung soltó una risita.

-Podría haber mutado y así mantenerme caliente en mi forma lobuna.

-Exclamó el que tenía miedo de mutar no hace mucho- rodó los ojos, cruzándose de brazos-. Como sea, aquí tienes para que duermas cómodo y no pases frío en las noches. Los suéteres son de mi padre, y como ambos son alfas supongo que el tamaño no será un problema. Está todo limpio, por cierto.

-Muchas gracias príncipe- el alfa hizo una reverencia sin dejar de sonreír. Le parecía tan dulce y lindo cuando el omega se preocupaba por él, pero a la vez trataba de ocultarlo restandole importancia.

-Bueno eso, yo...uhm, ya me voy.

No alcanzó a dar el primer paso cuando la voz del alfa lo detuvo.

-Espere príncipe.

-¿Si?

-Yo...quería preguntarle algo- susurró, sus ojos viendo a cualquier dirección menos al omega.