UNTOUCHABLE | KTH&JJK

ESPECIAL 300K

Jungkook sentía que en cualquier momento se iba a desmayar, ni siquiera el sabor dulce del pastel que estaba probando lograba calmar sus nervios.

-¿Qué te parece este?- Jimin preguntó, llevándose otra cucharada a la boca.

-¿Eh?

-No está prestando atención- esta vez fue Yoongi quien habló-. Señora Sung, nos tomaremos un descanso.

La mujer asintió, haciendo una reverencia antes de irse.

-A ver, ¿qué es lo que pasa contigo?- Yoongi lo obligó a sentarse en una de las sillas, poniéndole una mano en el hombro-. Estás distraído desde que llegamos.

-E-es solo que...- el príncipe Jeon entrelazó los dedos de sus manos nervioso-. Ya casi será la boda, solo falta una semana y tengo miedo de que algo salga mal. Yo...he estado teniendo un sueño recurrente, donde estoy a punto de casarme con Taehyung y de repente todo desaparece, hasta él.

Jimin suspiró.

-A ver, es completamente normal que estés teniendo esos sueños, a todas las personas que están a punto de casarse les pasa. Se llama síndrome bride.

Jungkook abrió sus ojitos, impresionado.

-¿De verdad?

-No, me lo acabo de inventar- su amigo le dio un golpe en el hombro a puño cerrado, provocando que se quejara-. Oye, solo quiero que te relajes, nada de eso sucederá ¿está bien? Te casarás con Taehyung, no importa lo que pase.

-Pero y si...

-Y si nada- Yoongi lo interrumpió, poniéndolo de pie nuevamente-. Así que respira hondo, cálmate y sigamos probando los pasteles.

-A propósito, me gustó el sabor del número cinco. Espero sea ese el que elijas.

-No eres el único invitado.

-A quién le importa la opinión de los demás.

Tanto Jungkook como Yoongi rodaron los ojos, yendo hasta la mesa para seguir probando los pasteles. Después de dos horas y discutir los pro y los contras, llegaron al acuerdo que el pastel número tres sería la mejor opción para ese día, pues no era ni tan dulce, ni tan simple; además de que estaba relleno con sirope de frutos rojos.

Cuando por fin llegó a su casa, completamente cansado y asqueado de todo el dulce que comió, lo primero que hizo fue subir a su habitación con toda la intención de tirarse a la cama y dormir siete horas seguidas. Pero sus planes se vieron interrumpidos cuando divisó a su alfa acostado en la cama con Gaeul y Gyul durmiendo encima de él; por más que quería dormir, solo sonrió, dejando su bolso y celular sobre el tocador yéndose hasta el baño para tomar una ducha con agua caliente.

Pasaron alrededor de cinco minutos cuando sintió como la puerta del baño se abría, seguido de la de la ducha donde estaba la bañera. Jungkook no dijo nada al respecto, sabiendo perfectamente de quien se trataba.

-¿Te fue bien hoy con los chicos?

-Tuvimos algunas indiferencias por los pasteles, pero a la final elegimos la mejor opción- le contó, echándose un poco hacia delante para que el alfa pudiera sentarse detrás suyo dejándolo a él entre sus piernas.

-Bueno, eso me alegra.

-¿Ya elegiste tú traje?

-Me encantaría decir que sí.

-Taehyung...

-Pero, no lo elegí yo.

El príncipe Jeon frunció el ceño, volteandose un poco para mirarlo.