UNTOUCHABLE | KTH&JJK

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Jungkook se sentía bastante mal. Después de la conversación/pelea que había tenido con su hyung, sus ánimos habían bajado a cero. Ya no estaba tan seguro de seguir involucrando a Jimin en buscar información sobre Taehyung.

Y es que lo entendía. Lo que al principio comenzó como una búsqueda por pura curiosidad ahora se estaba convirtiendo en algo peligroso. Algo había pasado para que la familia de Taehyung corriera con ese destino.

-Si sigue así podré escuchar sus pensamientos.

Jungkook miró al alfa, quien lo observaba con los ojos levemente entrecerrados.

-Lo siento- se disculpó de inmediato dándose cuenta de que él ambiente estaba pesado por su culpa-. Solo que...la pelea con Jimin hyung y la desaparición de Deiji-ssi andan rondando por mi cabeza.

-No debe agobiarse tanto.

-¿Cómo no hacerlo, Taehyung? He estado pensando que si no hubiese corrido a Deiji-ssi nada de esto estuviera pasando- dijo, pasándose las manos por la cara en un intento de despejarse un poco la mente-. El líder y la luna Park no tardarán en involucrarse, tal vez no le den tanta importancia a la desaparición de una empleada en estos momentos, pero si siguen pasando cosas ellos tomarán cartas en el asunto y querrán hablar con mis padres.

-Príncipe, eso no fue su culpa. No tenía forma de saber lo que iba a pasar.

-Fui inmaduro.

-Claro que no.

-Claro que sí, fue porque tenía ce...- se cayó de inmediato cuando fue consciente de lo que iba a decir-. Olvídalo.

Hundió el rostro en sus manos y cerró los ojos tratando de calmarse. Tampoco lo ayudaba mucho que su lobo estuviera tan inquieto. Agradecía que sus padres estaban lo suficientemente ocupados con él trabajo como para querer molestarlo, y el tema de Choi Eunyeop parecía haber quedado en el olvido.

Se sobresaltó cuando sintió labios en el cuello y manos en la cintura. Sacó su rostro del escondite y miró a Taehyung de soslayo observando como dejaba pequeños besos sobre su piel.

-Tae...

El alfa gruñó bajito.

-Me encanta cuando me llama así- habían sido pocas las veces que Jungkook lo llamaba de esa manera, podía contarlas con los dedos de la mano, y si era sincero le encantaba de sobremanera cada que su nombre abreviado salía de su boca.

-¿Si?

-Mhm, por favor hágalo más seguido.

Jungkook sonrió ladino haciendo su cabeza más hacia un lado para darle espacio al alfa que le dio un mordisquito justo en ese lugar que se suponía nadie debía tocar o siquiera osar hacerlo.

-Solo si dejas de hablarme de usted.

-Pida otra cosa.

-¿Por qué?

-Porque me gusta hablarle de esta manera.

Jungkook frunció el ceño dándose la vuelta para mirarlo correctamente.

-¿Acaso es otro de tus fetiches extraños?

-Yo no tengo tales cosas.

-¿Ah no? Porque según yo a alguien le gusta cuando le digo "tonto".

-Uhm, tal vez esa persona si es tonta- dijo haciéndose el desentendido y acercándose más a Jungkook-. Pero por usted.

El príncipe Jeon rodó los ojos pero una sonrisa adornaba sus labios. Se dejó llevar como una hoja por el viento cuando Taehyung lo puso debajo de su cuerpo, mirándolo como si fuese lo más hermoso del mundo y apreciandolo como un pintor a su reciente obra.