Me levante del trono y salí corriendo en dirección a mi habitación cuando me anunciaron que Sunoo ya estaba dando a luz, subí las escaleras lo más rápido que pude hasta llegar al cuarto piso, una vez ahí me dirigí al final de pasillo, apoye mi mano en mi pecho y recupere la respiración antes de llamar a la puerta y entrar, al entrar pude ver a los médicos guardando sus cosas, Sunghoon sentando en la cama a un lado de su hermano y por último Sunoo sosteniendo a nuestro bebé en sus brazos, pase por al lado de los médicos agradeciendoles por la ayuda y me acerque a mi pareja, me agache de rodillas a un lado de la cama y observé al bebé.
-¿Quieres cargarlo? -asentí y el mayor me dió al bebé.
-Es, es precioso -aparte un poco la manta que lo rodeaba y miré su rostro- Se parece a ti
-¿Como lo llamareis? -pregunto mi cuñado mirando al bebé con dulcura.
-Harua, Yang Harua -Sunoo me miro y asentí.
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Después de un montón de emociones el bebé y Sunoo se quedaron completamente dormidos, cuando termine de ordenar la habitación me senté en otro lado de la cama y mire a Sunoo, lo había echo muy bien, levante un poco su camisa mostrando su cicatriz en el estómago por el cual sacaron al bebé, el mayor comenzó a moverse y termino abriendo sus ojos, se levanto un poco y me miro.
-¿Como estás? -lo tome de la mejilla y le di un corto beso en los labios.
-Cansado, pero por lo demás bien, aunque no me gusta como ha quedado -se levanto la camisa y se acarició la cicatriz- ¿Me veo feo verdad? No me mires -puso sus manos en mi cara pero las aparte.
-Estas hermoso igual que nuestro hijo -el mayor y yo miramos hacia la cuna en donde descansaba tranquilamente nuestra bendición- Se parece tanto a ti
-Yo le veo más parecido a ti, pero Hoonie dijo que es una mezcla de ambos, Won -volteo y me miro- ¿El niño que es?, ¿Humano?, ¿Vampiro?, ¿Mitad?
-Mitad, tiene los genes de ambos pero es más vampiro por un pequeño porcentaje, pero no importa, fuera lo que fuera lo amaré igual
-Yo también -nos miramos a los ojos y este rodeo sus brazos en mi cuello- Te amo
-Y yo -unimos nuestros labios en un largo, sincero y bonito beso.
Tuvimos que separarnos cuando los llantos del bebé se hicieron presentes, me levante para levantar al bebé y se lo di a Sunoo, cuando el bebé estuvo en sus brazos se callo, el tacto de su padre lo calmo. La imagen que tenía delante era la más hermosa que había visto en mi vida; las dos personas que más amaba las cuales hicieron un gran cambio en mi vida.
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