A estas alturas, Jimin sabía que me tenía en la palma de su mano y estaba decidido a joderme la vida.
Se paseaba por toda la casa en bóxers cortos que un heterosexual no usaría definitivamente, pero que en él, lucían realmente caliente. Marcaban su redondo trasero y se ajustaban a sus torneadas piernas acentuando su cintura.
Comenzó a actuar con toda naturalidad, provocándome con cualquier cosa que pudiera.
Supongo que le parecía divertido, Jimin era un descarado de primera y no iba a dejarme las cosas fáciles.Incluso cuando nuestros padres estaban en casa, se burlaba de mi, haciendo que mi tensión sexual me agobiara.
Era ridículo. Estaba teniendo una lucha constante con mi autocontrol todos los días en mi propia casa.
Mientras desayunábamos con nuestros padres, Jimin me lanzaba miradas lascivas y yo trataba de evitarlo.
—Chicos, su madre y yo estábamos pensando en tomar unas vacaciones de verano juntos y celebrar el cumpleaños de Jungkook. Ya que ambos irán a la universidad pronto y tendremos menos tiempo para convivir en familia.—dijo mi padre.
—¿Que les parece Hawaii?—intervino la madre de Jimin.—Estábamos pensando que sería buena idea y puedes traer a Sunha con nosotros, Jungkook.
La expresión de Jimin cambió, la idea no le había parecido nada buena.
—¿Puedo llevar a alguien también?—preguntó y sabía que su madre le diría que si. Esa mujer nunca le decía que no a su hijo.
—Por supuesto, Jimin.—respondió mi padre.
—Es un chico.—aclaró. A estas alturas nuestros padres sabían que Jimin se inclinaba más por los chicos y no tenían problema con eso.
—¿Estás saliendo con alguien, Minie?—preguntó su madre y me mantuvo a la expectativa de lo que respondería.
—Si, se llama Taehyung.—sonrió.—Lo conocí en la academia y hemos estados saliendo un par de meses.
—Entonces puedes traerlo.—sonrió mi padre.—Tenemos que conocer al chico con el que sale nuestro hijo.
Gracias papá.
Jimin sonrió lanzándome una mirada triunfante, cuando estuvo seguro de que estaba mirándolo, tomó una cucharada de yogurt y comenzó a lamerla sugestivamente. No podía apartar la mirada de su lengua limpiando el metal. Recordando su lengua lamer mis labios y mi polla, Jimin sabía lo que estaba haciendo con su expresión descarada.
Me levanté de la mesa, cuando me percaté de mi erección.
—He terminado, tengo que llamar a Sunha.—me disculpe y huí de las provocaciones de mi hermano.
Me encerré en mi habitación y minutos después Jimin se coló cerrando la puerta.
¡Maldita sea con su persistencia!
—¿Qué haces aquí, Jimin?—me quejé.
—¿Estás bien con que Taehyung venga con nosotros?—preguntó fingiendo inocencia.
—Puedes traer a quien quieras.—respondí con indiferencia.
—Kookie, si me lo pides...—dijo en tono infantil.
—No, esta vez no funcionará.—interrumpí.—Sé lo que estás tratando de hacer. Te paseas por toda la maldita casa con esas cosas que deberían de estar prohibidas. Te diviertes provocándome, pero no va a funcionar, Park Jimin.—bufé molesto.
Jimin comenzó a reír y eso me hizo enfurecer más.
—Bueno, por tu reacción, creo que si está funcionando...puedes resistirte todo lo que quieras, Jungkook. Pero es obvio que me deseas, tanto como yo a ti y te haces el difícil porque crees que es lo correcto.—Jimin puso una mano en su cintura y sabía que estaba molesto también.—Vamos a ir adelante con este teatro de llevar a nuestras parejas, pero no te quejes después, no puedes tenerlo todo. Si te decides, podemos pasarla bien tú y yo, solos en ese viaje.
—Tienes que parar, Jimin.—Murmuré con tono de súplica.—Eres mi hermano.
—Voy a parar sólo cuando esté seguro de que tú ya no me deseas, pero no lo estás haciendo bien, Jungkook y no, no soy tu hermano. Soy un chico que está enamorado del tipo con el que creció y he aguantado tus desprecios porque sé que tienes una estúpida lucha moral en tu cabeza que no te deja aceptar que tú también estás enamorado de mi.
—¿Qué crees que dirán nuestros padres si se enteran?—murmuré.
—No lo sé. Es algo que podemos resolver después.
—¡Ja! Se supone que tú eres el mayor, Jimin.—gruñí.—Si tan solo te comportaras consciente por primera vez en tu vida y no como un niño caprichoso.
—¿Le llamas capricho a estar enamorado de ti?—frunció el ceño.
—¡No, Jimin! Toda la maldita vida has sido impulsivo e inmaduro. Crece de una vez por todas, no siempre se puede tener que lo que deseas.
—¿Y crees que esa es una buena forma de vivir? ¿Eso te hace feliz? Contéstame Jungkook.
—Es lo correcto, Jimin.—pase una mano por mi cara desesperado.
¿Por qué estoy tratando de lidiar con este necio?
Desde que éramos niños se sale con la suya. Su mamá se encargó todo el tiempo de malcriarlo y consentirlo para justificar su ausencia y su divorcio.
—No es lo correcto, Jungkook. Estas cosas pasan y uno no puede controlarlas. ¿Por qué te empeñas en fingir? Seguir saliendo con Sunha no te va ayudar a sacarme de tus pensamientos...lo he intentado con Tae y cada vez que me besa pienso en ti.
—¡Es suficiente, Jimin! Por favor, sal de mi habitación.—Murmuré.
—Nos estás jodiendo, Jungkook.—gruñó.—Piensa bien lo de ese maldito viaje, piensa si vas a soportar verme con Taehyung porque espero que puedas tener todo bajo control si me ves con él.—Jimin se marchó finalmente de mi habitación.
Bueno, eso de controlar la situación, estaba seguro de que podía hacerlo. No tenía idea de cómo, pero si Jimin llevaba a su novio, mi novia también estaría y era lo mejor. Ambos teníamos que continuar con nuestra vida, si lo de Jimin es un capricho se le pasará pronto.
ESTÁS LEYENDO
Mi hermosa tentación
FanfictionEl amor de tu vida, vive en tu propia casa y es tu "hermano". ¿Hermano? Esas cosas no están bien. Jungkook siempre ha hecho lo correcto. Es un buen estudiante, hijo y hermano que se enamora de su hermanastro. Ese chico de piel bonita y labios regord...