Shadow Wolf

Capítulo 3

Para ver que....No había nada. Absolutamente nada.

El patio estaba desierto y en el bosque parecía no haber ningún movimiento. Salimos al porche trasero e iluminamos el suelo con la linterna del móvil, para terminar de confirmar que lo sucedido fue real el suelo de este estaba marcado por enormes huellas iguales a las que encontré la otra vez.

Busqué a Abi con la mirada para ver su cara estupefacta ante la escena : el jardín lleno de enormes huellas de animal, la valla trasera abierta de par en par y lo que nos dejó con la sangre helada. La puerta trasera estaba llena de brutales marcas de garras, abollones y con el suelo cubierto de astillas debido a la insistencia del animal por querer entrar.

- Son enormes, no me esperaba que fueran tan grandes. Es decir, esa cosa debe tener el tamaño de un alce por lo menos. - Abi seguía recorriendo el jardín y a la puerta destrozada alternativamente.

- Dímelo a mí que casi me pilla. -

- Vale, mañana por la mañana arreglaremos el jardín para que no cunda el pánico en el vecindario. Después iremos a la tienda a consultar lo sucedido a Edric. -

- ¿ Como le vamos a decir a ese señor lo que ha pasado ? Va a pensar que nos falta un tornillo y además apenas le conocemos Abi. -

- Lo sé, no le contaremos todo solo lo justo para que nos dé lo que necesitamos sin levantar sospechas. - Responde totalmente convencida como si fuera algo evidente.

Dicho esto entramos en casa para cenar e irnos a la cama directamente. Seguía con los nervios a flor de piel por lo que tuve que tomarme unas pastillas para poder dormir un poco. Esta noche ha sido espantosa para mí, aparecía una pesadilla detrás de otra y no conseguía sacar de mi cabeza el pensamiento de lo que habría ocurrido si me hubiera cogido.

Pasa la noche por fin y estoy destrozado. Los ojos me pesan, tengo unas ojeras negras que me hacen ver como un mapache y siento que la cabeza me va a explotar en cualquier momento por el dolor. Veo como Abi baja por las escaleras y se me queda mirando petrificada.

- ¿ Pero qué narices te ha pasado ? Pareces un zombi. -

- Muchas gracias mejor amiga, me anima saber que parezco un cadáver andante. - le respondo con sarcasmo. Por las mañanas no tengo el mejor humor, pero si encima no he dormido bien estoy insoportable.

- Por lo que veo aún con las pastillas no has dormido mucho. -

- El problema han sido las pesadillas, esta situación surrealista me consume. Estoy tan cansado que he tenido que aplazar mi salida con Jayden para que no me vea así - me lamenté apoyando la cabeza en la mesa de la cocina.

- Bien, vamos a arreglar el jardín e iremos ha hablar con Edric. -

Fuimos al jardín trasero comenzando por recoger las astillas, tapamos las marcas de la puerta con una cortina vieja y después removimos la tierra para borrar las huellas. Ahora el césped tenía algunas calvas pero volvería a salir.

Revisé la puerta de la valla para comprobar si estaba muy dañada, pero me sorprendí al notar que la puerta estaba intacta. No tenía ningún golpe, arañazo o rotura, pero el pestillo estaba abierto. Como si esa cosa hubiera abierto el pestillo para poder entrar.

¿ Es posible que un animal sepa abrir una puerta ?

Ya era todo muy raro asique decidí no darle más importancia. Cerré la valla y nos marchamos. Hoy es viernes por lo que a pesar de todo tenía que ir al centro, no podía permitirme empezar a faltar en tan poco tiempo.

Abi me dejó en el centro médico y me dijo que terminaría lo más pronto posible. Se le veía bastante preocupada. Asentí dirigiéndome a la entrada principal.