Hoy es el día de mi fiesta.
Es martes pero da igual, faltar un día a la escuela no hace daño. Me había quedado en casa para preparar todo.
Todo lo que se podría romper quedó guardado, acomode los muebles estratégicamente para que haya más espacio, mis padres no estarían en casa con la única condición de que Jesse estuviera supervisando, por supuesto no me negué, no tenía problema con que mi hermano estuviera en la fiesta.
Diana me había dicho que saliendo de la escuela iría a su casa para alistarse y venir a mi casa para ayudarme, pero no creo necesitar su ayuda, no tenía que hacer mucho.
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Oí que tocaron la puerta y cuando abrí era Diana con un vestido azul que se le veía espectacular, era sencillo pero se veía bastante bien.
-Pasa.
Entramos y cerré la puerta.
-No es necesaria la ayuda Di, creo que ya está todo listo para la fiesta.
-Por supuesto que no Joy, falta que tú estés lista.
-Claro, solo me baño y busco algo que ponerme.
-Tu vete a bañar, yo buscaré en tu closet.
-Claro. - Reí y subí las escaleras a mi habitación tomando mi toalla para darme un baño rápido.
Al salir envuelta en la toalla ví a Diana sentada en mi cama con un conjunto de ropa a su lado, imaginé que eso es lo que había escogido para que yo usará en la fiesta.
-Tenemos que ir de compras Joy, tarde bastante en encontrar algo perfecto para hoy.
-Cuando tu pagues todo, por supuesto que te acompañó.
-Quisieras, ahora vistete, te estaré esperando abajo.
Salió de mi habitación sin decir una palabra más y me acerque a la ropa que tenía frente a mi. Eran unos pantalones rojos ajustados, junto a una playera negra lisa y unos zapatos con plataforma discretas, parecía algo sencillo pero en realidad se veía muy bien. Al terminar de cambiarme me mire al espejo y me veía bastante bien, había secado mi pelo y lo había planchado dejandolo liso y lindo, me puse un poco de labial y había quedado lista, no suelo ser egocéntrica pero realmente me veía atractiva.
Baje al primer piso y encontré a Diana conversando con su novio, Brad.
-Por fin bajas, ven conmigo.
Diana se paró y tomo mi mano jalandome hasta la cocina donde en la encimera ví un par de botellas de alcohol de diferentes marcas, la mire incrédula.
-¿Es en serio Diana? Te había dicho que no tomaría nada de alcohol.
-¿Crees que a las fiestas la gente va a rezar? Por Dios Joy, no seas aguafiestas, los invitados no vendrán con pastelitos, será más alcohol.
-Entiendo, pero yo jamás he bebido y no estoy segura de hacerlo.
-Es tu fiesta vamos, solo un poco, tenemos que celebrar que ya eres un año más vieja.
Reí negando y suspiré.
-Esta bien, pero solo un poco.
-¡Esa es la actitud!
*****
La noche había caído y los invitados fueron llegando así hasta llegar a tener mi casa llena de personas, yo no había invitado a tantos pero accedí a qué Diana invitará a otras personas, por que no imaginé que pasaría esto, por suerte las habitaciones estaban cerradas, no quería un par de calientes hormonales encima de mi cama.
