Secuestrada

~8~

Narradora

El miedo a levantar la voz está ahí, aunque lo hagamos.
El miedo a ser la siguiente está ahí, cuando caminamos.
El miedo a no volver a ver nuestra foto favorita está ahí, cuando miramos a nuestra familia.

Las personas reaccionan de manera distinta, pero el dolor está ahí. La ansiedad de no saber qué pasará después no pasa desapercibida. El shock que se siente cuando una situación está muy mal, es real. Las reacciones pueden ser al momento o pueden hartar días. La agonía de estar encerrada contra tu voluntad lejos de quienes te protegen es real y dolorosa.
¿Por qué los humanos fallamos tanto? Decimos amar al prójimo, decimos "no te haré daño porque no quiero que nadie me lo haga a mí" mientras juzgamos a otra persona. ¿Cuál es la necesidad de arrebatar en lugar de pedirlo? No se puede tener todo en la vida, pero ¿no es mejor saber la verdad y vivir con la paz de haberlo intentado?
Reiteró ¿por qué fallamos tanto como personas? Esperamos mucho pero damos tan poco.

Arizona Slowt de sólo dieciséis años se encuentra en un lugar que no es su hogar, encerrada contra su voluntad. Un lugar asqueroso, lleno de moho, que se puede derrumbar en cualquier momento, expuesta a enfermarse y no ser atendida. Expuesta al maltrato de una persona enferma.
Ella está en shock, deseando que todo sea un mal sueño, deseando despertar y no volver a salir de casa por miedo a que se vuelva realidad. Defendiéndose de su agresor con palabras porque no tiene la suficiente fuerza para golpearlo e irse, porque no sabe cómo, porque ella está en shock y sigue sin reaccionar en su totalidad.

Aun cuando es torturada de manera física y mental.

¿Qué sucede cuando pierdes el control de tu vida? Cuando apenas lo estabas tomando, cuando apenas estabas aprendiendo sobre lo bueno y lo malo, a valorar cada pequeño detalle... ¿qué sucede? Ser una persona ejemplar, no perfecta y aún no siendo alguien ejemplar ¿con qué derecho pueden quitarte la vida? ¿A caso esos locos son una fuerza mayor?

Zela. La amiga desaparecida de Arizona y Molly. La misma persona la vigiló, la secuestro, la torturo de muchas maneras y luego la vendió a otras personas que día a día abusan de ella. ¿Qué hizo para terminar en un lugar qué no es su casa? Nada, solo ir a la para de autobús y esperar, no vestía de una manera provocativa y aunque así hubiese sido ¿qué derecho tienen los demás al verla con morbo? Siendo ella solo una niña que no sabía diferenciar lo bueno y lo malo.

El shock sigue ahí.

La familia de quienes buscan a sus seres amados lloran desesperados por encontrarlos con vida, salen a marchar, buscan arriba y abajo, si es posible a los lados. Le piden fuerza a todo, sean creyentes o no. La ansiedad de no poder dormir porque "puede pasar algo desapercibido" está ahí, el preguntarse en qué circunstancias estará su ser amado. Las marchas, las campañas, las búsquedas de amontones dejan de ser suficiente cuando no hay resultados.

Se culpan entre ellos mismos, culpan al país, a las autoridades, a los monumentos. Hacen garabatos y son multados, los monumentos siguen ahí ¿saben? Pero las chicas no. Las chicas y chicos no pudieron regresar a su hogar porque alguien decidió quitarle su libertad. Las autoridades, fallan tanto y hay tanta corrupción en donde sea que no sabemos si podemos confiar, incluso en las personas que más confiamos ¿realmente podemos confiar en ellas? Dudamos de todo y de todos, pero es porque tenemos motivos y son válidos, el dolor es válido.

Yo también quiero salir y poder regresar a casa.
Anhelo que todos puedan salir en paz y volver a casa.
Realmente lo deseo.