𝗟𝗮 𝗘𝗱𝗮𝗱 ; Steve Harrington

Capitulo Quince

-No te apures Harrington, yo la llevaré

Era impresionante la forma en que Billy estaba manteniendo la Calma, normalmente el sería quien empezara con los golpes.

Miras confundida a Steve, ¿Que carajos estaba haciendo aquí? Se estaba pasando de la maldita raya.

Te bajas del auto y le das un golpe en el mejilla a Steve, estabas cansada de que se portará cómo si le interesaras, lo único que hacía era confundirte.

No ibas hacer una más de su lista.

Steve te mira enojado y te toma del brazo, subiendote al auto, intentas liberarte pero el era más fuerte.

Billy se acerca a Steve y ves como le empieza a decir algo, pero no escuchas lo suficiente.

De un momento a otro el cabello rizado soltó el primer puñetazo, toda la paz que había estado manteniendo se había acabado.

Sales del auto, no ibas a meterte en su pelea, era obvio que no podrías separarlos.

-¡Se ven ridículos haciendo esto!- Gritas tan fuerte que era posible que tus cuerdas vocales ya no funcionaran más.

Tomas el brazo de Steve, arrastras lo llevas al auto, te subes en este y ves como Steve hace lo mismo.

Le das un último vistazo a Billy y este te guiña un ojo, a pesar de los golpes se seguía viendo tan bien...

Llegan a casa y sales directo al baño, buscando el botiquín de emergencia.

Regresas y ves a Steve sentado en el sofá, tomas un lugar a su lado y empiezas a curar sus heridas, no merecía que lo hicieras pero... Era Steve Harrington

Tomas su rostro volteandolo hacia ti, pasas tus dedos por sus heridas, tratando de no ser tan dura.

De un momento a otro sientes la mano del mayor acariciar tu rostro.

Lo apartas rápidamente y sigues con lo tuyo

-Listo...- Sonríes

-Gracias- Sonrie viéndote a los ojos

-Perdon por lo de antes, yo de verdad necesitaba hacerlo- Ries bajo

Steve niega con la cabeza y ríe mientras se tocaba la mejilla dónde le habías golpeado.

-Bueno, creo que me lo merezco

Ambos sueltan una pequeña risa mientras sus miradas se conectaban.

-Perdon... -Suelta mientras tomaba tu mano- Se que fui un completo idiota, que me porte como un maldito cobarde, lo sé. Te pido por favor que me perdones...

-Steve...

-Quiero que seamos muy bueno Amigos y que no haya ninguna incomodidad entre nosotros.

"Crack" escucharon eso, fue mi corazón rompiéndose...Sonríes triste y apartas tu mano de la de él.

-Claro, desde hoy ya todo quedó en el pasado...

Te levantas y empiezas a subir las escaleras directo a tu cuarto.

Era triste la manera en la que todo estaba terminando, esa pasa cuando te gusta alguien mayor ¿No?

[NARRA STEVE]

La veo subir a su habitación, me sentía tan devastado, quería correr y decirle que nada de esto era verdad, que yo si quiero estar con ella, pero se merece algo mejor, algo mucho mejor.

Verla con Hargrove o con cualquier otro chico hace que quiera morir, los impulsos de tomarla y besarla hasta quedarnos sin aire son demasiado.

La quiero para mi, quiero tenerla conmigo cada día, cada noche..

Niego con la cabeza, apartando esas ideas y me dirijo hacia su habitación.

Pego mi oído a la puerta y escucho sus sollozos, y sus malos intentos de esconderlos.

Me sentía tan mal por hacerla llorar, pero sería mejor así, yo solo soy un error de su adolescencia, un recuerdo.

Si no fuera por la maldita Edad nada de esto estaría pasando, no me gustaba nadie más que ella.

Pero necesitaba protegerla de mi mismo, ni siquiera la chica con la que ella me miro era real, todo fue una maldita actuación para poder alejarla de mi..

Aunque me costará todo, valía la pena verla ser feliz, con alguien más, aunque doliera como los mil demonios de solo imaginarlo.

Baje nuevamente las escaleras, nesecitaba salir para poder despejar mi mente...