Ana Hows es una chica de 17 años que vive en la ciudad de New York junto con su madre después que su padre las abandonó justo antes de que ella naciera, Zack Donnet el hijo de la amiga de Sofía( la mama de Ana) llegará y se quedará como inquilino va...
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Mis brazos abrazaban el cuerpo de Zack con fuerza, había una mancha grande de sangre en su estómago.
El cuerpo de Oliver yacía en el suelo, no se movía pero el no era quien me preocupaba. Todos sus hombres ya estaban muerto, solo quedaba un rubio y a este le pusieron una bolsa negra en la cabeza para meterlo en una de las camionetas que estaban ya frente a nosotros.
Tres hombres corrieron hacia mi y alzaron cuidadosamente el cuerpo de Zack para llevarlo hasta una de las camionetas donde yo igual entre.
- ¿No creo que podamos ir al hospital, verdad?- pregunte dejando caer las lágrimas por mi megilla, los hombres de Zack miraron entre sí y el que estaba conduciendo me miro.
- Sabemos donde llevarlo, señorita- afirmó encendiendo la camioneta.
- ¿Y Dimitry?- pregunte sobando la cabeza de Zack.
- Lo hirieron, lo llevaremos a el también- dijo conduciendo a más velocidad.
No tardamos ni 20 minutos cuando la camioneta aparcó en frente de una casa de campo, no me detuve a mirar mucho, salí de la camioneta y le di espacio para que sacaran a Zack y los seguí hasta dentro de la casa. Entramos en la primera habitación que vimos y me fije que había un hombre vestido con una bata blanca esperando.
Tumbaron a Zack en la cama y no pude aguantar el llanto que me salió, estaba ahí tumbado lleno de sangre, inconsciente. Esa imagen era desgarradora.
- Debe salir, señorita- dijo el doctor cuando los hombres de Zack salieron de la habitación- cualquier cosa no dudaré en informarle.
Yo lo mire unos segundo y luego asentí dejándolos en la habitación. Caminé hasta la sala y me encontré a Yenny y a Rosita sentadas en los muebles cafés
- ¿Como está?- preguntó su madre poniéndose de pie.
- El doctor ya lo está atendiendo, espero que no pase a peor- dije soltando un sollozo, Yenny vino hasta mi, abrazándome- No estoy lista para perder a otra persona, no quiero que se valla.
- Tranquila, Zack es fuerte y estoy segura de que estará bien.
Me seque las lágrimas y me senté al lado de ellas, por Dios debería de ser yo la que la consuele a ella no ella a mi.
Observó la casa, es acogedora, pequeña para ir de vacaciones con tu familia, no tiene nada de estrabagante, todo es color caoba y derivado al café, todo aquí dentro es cómodo.
Me paro y camino a la salida, los árboles se ven hermosos todo es verde, acogedor. Camino por todo el frente de esta, no tiene una decoración afuera solo la casa, no tiene jardín ni nada.
Veo a los dos hombres que nos trajeron y camino hacia ellos.
