Lee Ari tenía un único objetivo en la mira: conquistar al chico que le gusta a través de mensajes y obtener finalmente el romance escolar que tanto había deseado.
Para su desgracia, eso se verá interrumpido al descubrir que ha escrito al número equ...
Sonrío gustosamente mientras recibo el cambio de los helados por parte de la cajera, Yoongi me mira con una sonrisa apretada y gira los ojos cuando tomo su mano y lo obligo a guardar el dinero que había sacado de su billetera.
Me trajo un obsequio cuando por mi mente ni siquiera pasó la idea de comprarle algo, así que me negué rotundamente a que él fuera quien pagara los helados.
— Minjun acaba de enviar un mensaje. — Anuncia Yoongi mientras señala su celular. El fantasma de un mohín se posa sobre mis labios al recordar que él sí tiene su número. — Dice que acaba de llegar.
Asiento como respuesta y tomamos rumbo hacia la mesa que hace unos minutos habíamos abandonado. En la misma nos esperaba la pareja de la que hace poco nos habíamos despedido, sumando la presencia de dos chicos que se encontraban muy alejados el uno del otro, indispuestos a dirigirse la más mínima mirada.
— ¡Ari! — Exclama Minjun y yo le devuelvo el saludo. — ¡Qué sorpresa encontrarte aquí!
— Es mi pareja. — Explica Yoongi para su duda.
— ¡Pensé que tu cita sería Minji Noona! — Susurra este, pero de igual manera todos podemos escucharlo. — Así que al final no me equivoqué de chica...
—¿Podrían guardar silencio? — Pregunta con fastidio la cita de Minji, cuyo nombre ya olvidé, así que le diré pío. — Podemos escuchar todo lo que dicen. Mejor presenten al niño de mirada perdida.
Todos ponemos la mirada en él y este se sonroja de inmediato, provocando que yo sonría por lo tierno que se ve.
— ¡Mucho gusto! — Se presenta el chico. — ¡Mi nombre es Jeon Jungkook!
— Y es mi precioso novio. — Añade Minjun con orgullo.
— ¡No lo somos! — Se queja Jungkook. — ¡Aún no hemos regresado! Acepté venir contigo porque insististe mucho.
— Pero estaremos juntos de nuevo en lo que menos pienses.
— ¿Por qué sales con un puberto de primaria? — Pregunta pío asqueado.
— ¡No soy un puberto! — Responde Jungkook. — ¡Estoy en la misma preparatoria que ustedes! Voy en décimo...
Creo una película mental con mis memorias hasta que logro unir algunas escenas que hacen que los puntos empiecen a conectarse.
— ¡Cierto! — Exclamo con asombro al recordarlo. — Te he visto en la cafetería en algunas ocasiones.
— ¡Sí, yo también te recuerdo! — Me dedica una sonrisa que rápidamente reprime. — Me querías dejar sin novio.
— Prometo que no tenía ni la más mínima idea de la situación.
— Y lo más seguro es que el tonto de Minjun no estaba ni enterado de tus sentimientos. — Me da la razón. — Comprendo, a veces no es fácil lidiar con él.
— Escuché mi nombre. — El antes mencionado se acerca a nosotros. — ¿De qué sentimientos hablan?
— Escuchaste mal. — Respondemos al unísono.
— ¿Vemos una película? — Propone Minji, quien intenta alejarse de la cercanía de su cita. — ¡Vi buenas opciones en la cartelera!
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