Lee Ari tenía un único objetivo en la mira: conquistar al chico que le gusta a través de mensajes y obtener finalmente el romance escolar que tanto había deseado.
Para su desgracia, eso se verá interrumpido al descubrir que ha escrito al número equ...
Luego de que Ari saliera del baño, pasamos directamente a sentarnos cerca de una de las mesas de los bocadillos, atrayéndola hasta el sofá para no tener que estar poniéndonos de pie para poder obtener nuestras botanas.
Junto a nosotros se encontraban Minjun y Jungkook, mientras que, a unos pocos metros de distancia, algunas de mis compañeras de clase disfrutaban de la fiesta; sin embargo, se me hacía extraño el hecho de que cada cuantos segundos voltearan sus miradas hacia nosotros y rieran.
Me obligué a tragar duro cuando una de ellas se acercó y se sentó sobre el reposabrazos del sofá, haciendo que tuviera que quitar mi brazo de dicho lugar y tener que colocarlo sobre mi propio cuerpo. ¿Acaso no conocía lo que es el espacio personal? Las alas de su disfraz de hada chocaban contra mi frente.
— Yoonie Oppa~ — Un escalofrío recorrió mi espalda cuando fui capaz de reconocer esa voz. — ¿Por qué no me has saludado?~ — El canturreo de su voz me provocaba jaqueca. — Llevo un rato observándote y no percibí intenciones de acercarte, así que decidí acercarme yo a ti.
Kim Yuwon, mi odiosa compañera de clase que sigue insistiendo en salir conmigo a pesar de que la he rechazado desde décimo grado. Lo único que admiro de ella, es su gran persistencia; aún sabiendo que nunca tendrá posibilidad alguna de estar conmigo, sigue molestado como mosquito en tu oído a altas horas de la madrugada.
— Yuwon... — Saludé, intentando no sé tan grosero con ella. — ¿Podrías alejarte un poco? Algunos mil kilómetros, por lo menos.
En lugar de lograr que se fuera, lo único que hizo fue reír.
— Eres tan gracioso, oppa.
— Yo no encuentro el chiste por ninguna parte. — La voz de Ari hizo presencia, arrastrando consigo un tono hostil. — ¿Podrías decirme cuál es el motivo de tu risa?
— ¿Quién es ella? — Preguntó Yuwon con interés.
El silencio se hizo presente entre nosotros sin haber dado aviso alguno, trayendo consigo a su fiel amigo llamado incomodidad.
¿Cómo debería presentarla? Mis sentimientos son notorios, pero aún no se los he aclaro de frente. No quería hacerla sentir incómoda al presentarla como una amiga sabiendo que somos más que eso, pero tampoco podía decir que es mi novia si no hemos llegado a esa parte de nuestra historia.
— Es mi mejor amiga.
— Soy más que eso. — Añadió mi acompañante de inmediato. — Soy Ari, no es un gusto.
Estaba por hacer un comentario para molestar a Ari y de paso librarme de la cercanía de Yuwon, cuando fui interrumpido por la voz grave de uno de mis amigos.
— ¡Lee Ari! — Taehyung se detuvo frente a nosotros. — ¡Es un milagro que te haya encontrado!
— ¿Qué pasa, Tae? — Preguntó ella contagiándose de la expresión de espanto perteneciente al chico. — ¿Por qué corriste hasta aquí?
— ¡Una de tus amigas está a punto de pelearse con Nari de onceavo dos!
— ¡¿Quién?! — Preguntó alarmada.
— Se trata de Bora.
— Tenemos que detenerlas. — Ari giró me otorgó una mirada a la vez que se ponía sobre sus pies, obligándome a copiar su acción. — Yoongi, si escuchas gritos es porque no pude contener mi furia. Ven conmigo.
Sin esperar un segundo más, corrió detrás de Tae hasta el lugar del conflicto. Intenté caminar detrás de ella, pero mi acción fue interrumpida cuando Yuwon apresó mi muñeca con su mano.
— Si ella es tu mejor amiga... — Hizo una afirmación disfrazada de pregunta. — ¿Eso significa que tengo el camino libre?
— Claro, puedes pasar. — Me hice a un lado para que continuara con su camino, sin embargo, me desconcerté un poco al ver una sonrisa triunfadora plasmada en su rostro. — Te dije que podías pasar, tienes espacio suficiente para hacerlo y aun así me pides que me mueva. — Volví a hablar, esta vez un tanto irritado por su cercanía. — Date prisa, tengo que irme.
Los puntos en mi cabeza empezaron a conectarse en el momento en el la vi acercase con rapidez a mí, aferrando sus manos a mi cuello a la vez que estampaba sus labios contra los míos de la manera más asquerosa posible.
¡Eres un imbécil, Min Yoongi! ¡¿Cómo no pudiste entender el significado oculto de sus palabras?!
Y luego me quejo porque Ari no capta mis mensajes subliminales del amor...
No pude reaccionar sino hasta después de unos segundos. La sujeté por los hombros, obligándola así a separarse de mí, pero ella decidió aferrarse más a mi cuello. Cuando finalmente logré liberarme, limpié mis labios con una servilleta y corrí al baño en busca de enjuague bocal para desinfectar mi boca.
Llevaba aproximadamente dos minutos encerrado en el baño cuando una distinguida notificación llegó a mi celular, entré de inmediato a la app de mensajería para poder leer a Ari.
''Cuando llegué al patio, ya se habían calmado''
''¿Sabías que la casa de Minjun tiene un ventanal que permite la vista del patio trasero hacia la sala y viceversa?''
''Yo lo acabo de descubrir hace unos minutos''
A esos mensajes les seguía una fotografía, la cual planteaba una situación completamente errónea a lo que realmente había sucedido. Fue tomada en el momento justo en el que Yuwon aferró más su agarre en mi nuca a la vez que yo intentaba separarla por los hombros, haciendo que parecía que nos estábamos besando con una intensidad sobrehumana.
''No podía creerlo, así que tomé una foto para confirmar que era cierto''
''Por lo menos ahora tendré algo para chantajearte y molestarte, jaja''
''Mi amiga aún se encuentra un tanto conmocionada, la acompañaré a su casa''
''¡Buenas noches! Gracias por traerme''
''Fue una linda noche. (en lo que cabe)''
En ese momento no supe cómo actuar y me arrepentí de haberle enviado un emoji como primera respuesta en lugar de intentar aclararlo todo.
Empecé a hacerle una infinidad de llamadas cuando finalmente supe como reaccionar, incluso fui a buscarla a su casa durante todo el fin de semana, pero ella parecía seguir en la casa de su amiga.
Debía encontrar una manera de hacerle entender que solo existía lugar para ella en mi corazón y mi vida.
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