𝐓𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘-𝐎𝐍𝐄 -𝘗𝘢𝘴𝘴𝘪𝘰𝘯-

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1972

—¡Feliz cumpleaños!, ¡Feliz cumpleaños Nicky y Liney!, ¡Feliz cumpleaños!— cantaban Elvis y Tessa al unísono mientras llevaban el gran pastel hasta la mesa principal.

Los niños esperaban ansiosos la llegada del pastel, mientras aplaudían sonrientes.

La mujer rubia apoyó el pastel sobre la mesa, mientras la flama de las velas revoloteaba ligeramente.

Ambos niños soplaron las velas al mismo tiempo, mientras pedían sus respectivos deseos.

—Ahora, papá les dará un regalo a cada uno, ya que su madre ya les ha preparado este bello pastel —mencionó Elvis mientras observaba a su esposa con una sonrisa.

Nicky y Liney se observaron curiosamente el uno al otro, esperando los obsequios de su padre.

Diana y Peter se colocaron rápidamente a un lado de sus hermanos, para poder tener una buena vista.

—El primero es para tí, Linnis— dijo el azabache entregándole una pequeña caja con un moño de lazo rojo bermellón entrelazado a su hija mayor.

La pelinegra lo tomó con cuidado, y con una sonrisa desató el moño y abrió la caja, dejando ver a un delicado collar dorado con un dije pequeño de un brillante corazón rosa. Sin que su padre se lo dijiese, Liney pudo darse cuenta de cuan valioso era aquel collar.

—Cuídalo mucho, cariño. Es de oro y zafiro rosa, una piedra única— comentó el ojiazul.

—Eso haré. Muchas gracias, papi, es hermoso— respondió la niña mientras abrazaba a su padre.

—Y esto es para tí, Nick-Nick— dijo entregándole otra pequeña caja a su hijo.

Nicky tomó aquella caja, la cual estaba entrelazada con un moño de lazo azul marino, y en cuanto la abrió, pudo ver lo que parecía ser un costoso reloj de malla metálica negra, el bisel y las coronas tenían una fina línea redondeada de oro, mientras el resto estaba recubierto de plata. El dial era de cerámica y las manecillas de oro rosa.

El niño dejó escapar un ligero suspiro de su boca, sorprendido por aquel preciado regalo.

—Tú también cuídalo mucho, muchacho— mencionó divertido mientras movía ligeramente el cabello de su hijo.

El rubio sonrió enseñando sus perfectos dientes y abrazó a su padre con fuerza mientras le agradecía.

—Lo que hubiese dado por recibir esa clase de regalos a mis once años...— murmuró Tessa.

—Pero puedes recibirlos para tus treinta y ocho— mencionó Elvis divertido mientras le guiñaba el ojo a su esposa.

La rubia sonrió ligeramente y besó la mejilla del azabache.

—¿Y cortaremos el pastel o no?— preguntó Diana expectante.

Tessa soltó una ligera risa.

—Si, Di. Eso haremos ahora— respondió su madre.

...

Elvis y Tessa estaban teniendo una cena en Graceland, con Ivonne y Jerry para arreglar algunos asuntos de trabajo.

El postre ya había sido servido hacía varios minutos, solo que ahora estaban hablando tranquilamente.

La rubia escuchaba atentamente una anécdota que su amiga estaba contando, cuando repentinamente sintió como una cálida mano bajaba desde su muslo hasta su rodilla, provocándole ligeras cosquillas.

Observó al "culpable" de aquella acción a su lado, pero Elvis solo sonrió de lado sin observala directamente al darse cuenta de la mirada de su esposa posada en él.

𝐊𝐈𝐒𝐒𝐄𝐒, 𝐃𝐈𝐀𝐌𝐎𝐍𝐃𝐒 𝐀𝐍𝐃 𝐏𝐀𝐒𝐒𝐈𝐎𝐍 • Elvis (2022)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora