MI MALDITO EX

Capítulo #1

Editado*** (todos los capítulos que tengan ***están editados)
🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
Hola, hola, hola, chicos, esta es la primera historia que me atrevo a publicar, y estoy renerviosa, sinceramente espero que les guste y que con sus comentarios me ayuden a mejorar como escritora 😁
No sé con qué frecuencia subiré los capitúlos dado que estudio medicina y en ocasiones carezco de tiempo libre, pero voy a hacer todo lo posible por regalarles al menos uno a la semana.
Si les gusta, xfis, estén atentos. 🥰
🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹

Estoy muy orgulloso de ti - le dijo Jorge a Alina mientras la miraba fijamente a los ojos, ella descubrió en él esa mirada de hombre enamorado - estoy orgulloso de la mujer en la que te has convertido, pero sobre todo estoy muy enamorado de ti, quiero cuidarte cuando no estés bien, quiero apoyarte cuando estés cansada, ver la tele contigo, compartir el silencio, pasar mi vida a tu lado, quiero casarme contigo - mientras decía esto sacó un delicado anillo con un diamante solitario - entonces, la pregunta es, quieres casarte conmigo?

Alina miró a su alrededor, todo era tan perfecto como una escena de película, las velas, el vino, las rosas, la cena, la temperatura, hasta las estrellas parecían haberse puesto de acuerdo, miró al hombre que tenía al frente, tan arreglado, organizado, meticuloso, siempre dispuesto a complacerla, y como fugitiva, una lágrima corrió por su mejilla, eso era precisamente lo que necesitaba en su vida, así que contrario a todos sus sentimientos y muy atenta a su racionalidad, dijo - si, si quiero.
Esa noche, luego de cenar, fueron a su apartamento e hicieron el amor con delicadeza, Jorge la besó despacio, la acarició entera e hicieron el amor dulcemente, despertaron juntos, tomaron un café, comieron unas tostadas y entre risas tranquilas y una agradable charla, llegaron al trabajo.
Cada uno fue a sus departamentos y ella llamó a sus amigas para quedar a la hora del almuerzo y darles la noticia.
Por suerte la mañana en la consulta transcurrió tranquila, y para las 12:00, ya había terminado con los pacientes programados para esa sesión.

*****
- No me lo puedo creer!!! - dijo Dalila - es tan tierno, si no amara mucho a mi esposo te robaba a Jorge, es que ese hombre es maravilloso - Alina sonrió y dijo
- si, es cierto, lo amo mucho
- El autoconvencimiento es una buena estrategia, pero no funciona - dijo Martha sarcástica.
- oh, por favor deja de tratarnos como a tus pacientes - le dijo Dalila - Jorge es lo máximo, que prefieres, que siguiera sola extrañando al otro imbécil.
- hey chicas por favor, no discutan, no arruinen esto.
- lo siento, es que no puedo ver como arruinarás tu vida de esa manera y quedarme callada.
- Martha, Jorge es muy bueno, se esforzará por hacerme feliz - dijo Alina conciliadora.
- Feliz!!! - dijo Martha un poco exaltada - tu definitivamente hace tres años  no sabes lo que es la felicidad, pareces un robot, solo haces, lo correcto, lo que está bien, lo socialmente establecido. Dime desde cuando no sales a bailar hasta que te duelen los pies, o no te bronceas hasta que tu piel arda, o yo no se que carajos o haces algo que no sea trabajar y poner una sonrisa de plástico en los eventos sociales??? Si eso es lo que quieres para el resto de tu vida, pues entonces cásate con Jorge.
Alina la miró enfadada, no contestó para evitar más líos, se paró y anunció que se marcharía.
- Eso, sigue así, en ese estado de mutismo emocional, te vas a morir sin volver a probar un buen polvo!!! - le gritó Martha mientras Alina salía. El resto de los comensales la miraron como si estuviera loca y Dalila solo le dijo
- te pasaste, así no la ayudas - sin embargo, la psicóloga sonrió más para si, que para su amiga y dijo - oh cariño, claro que si, tengo un plan, tu tranquila y déjame los nervios a mi.

*****
Alina estaba tan furiosa con Martha que pidió a su secretaria que cancelara los turnos del horario de la tarde y los reprogramara. Martha no tenía derecho de decirle esas cosas, había sido muy hiriente, quería gritarle, pero eso no era bueno, afectaría su aura, y después se vería obligada a una intensa sesión de yoga y odiaba esa mierda, era difícil controlar su respiración, sus emociones, su cuerpo, todo junto, sin embargo, quería demostrarle a Martha que no tenía razón, así que entró a un bar y pidió un par de chupitos de tequila, se tomó una selfie y la subió al grupo "Brujas🌹🖤" que tenía con sus amigas.
- no se si recuerdes que eso es para beber, y no un accesorio para tirarse fotos - le contestó Martha al instante. En honor a los viejos tiempos le pidió al cantinero que la grabara y se los tomó los dos al mismo tiempo, subió el video y le envió la ubicación a sus brujas.
- se ha vuelto más predecible de lo que pensaba, dijo Martha a Dalila que aún estaba junto a ella - vamos para allá.
En apenas 10 minutos ya las chicas estaban en el bar, Alina, que tenía 2 años sin saber lo que era una gota de alcohol en su organismo, se había tomado un chupito más y se sentía más activa y dejaba guiar sus caderas suavemente al ritmo de la música.
Cerca de ella, a causa de una causualidad cósmica, unos ojos conocidos la observaban bailar sin que ella lo notora.
- te felicito que bien actúas...
- Dime que no necesitabas esto y te mato!!!- le gritó Martha para que escuchara. Alina soltó una carcajada y llegó hasta la barra,
- otro tequila? - preguntó el cantinero
- oh Dios nooo - dijo risueña - si me tomo otro caigo en coma
- bueno, en ese caso, un caballero que acaba de salir me pidió que le sirviera una sangría fantasía, dice que es su trago favorito - ella miró a su alrededor, y además de sus amigas no encontró a ningún otro conocido, sonrió con nostalgia y se bebió el trago a sorbos de recuerdos.

- Dios mío, es las 10 de la noche y mi esposo ni siquiera sabe dónde estoy!!! - exclamó Dalila - iré a llamarlo - y mientras se dirigía hacia el baño, chocó con alguien y al levantar los ojos...- Santo cielo que haces aquí?!?!? - las palabras salieron de su boca sin siquiera pensarlo,
- te prometo que no me acercaré a ella - primera mentira de vuelta al país, pensó  Alex - de hecho, ya me iba, lo que menos quiero es toparme con ella - tres en menos de un minuto, le susurró su subconciente, " vaya, ahora si te superaste." Dalila lo miró con cautela, pero no logró establecer una conclusión; así que,
#1 Debía evitar que su amiga se enterara que el imbécil, había vuelto.
#2 Debía sacarla urgente de allí.
#3 Debía mantenerla alejada de él a toda  costa.
Se olvidó de llamar a su esposo y salió a toda mecha hacia donde había dejado a sus amigas, Martha, toda feliz observando a Alina deshinibida total, parecía la chica de tres años atrás, estaba en una rueda de casino y pasaba de brazo en brazo, sonreía verdaderamente, espontánea. En ese instante un recuerdo pasó por la cabeza de las chicas: Alina sin saber bailar salsa, y Alex enseñándole, reían como 2 locos y ella se perdía en una vuelta tras otra, estaban en un pasillo de la escuela, llamando la atención con sus ocurrencias, mientras todos miraban y ellos eran felices.

A Dalila en ese instante casi le dieron ganas de llevar a Alex hasta la pista, ojalá todo no hubiese acabado tan mal, esos dos juntos eran imparables, pensó ella.
Alina sintió nostalgia, y la sonrisa se le llenó de dolor y melancolía, cuando Martha, notó el cambio de la microexpresión facial de su amiga, supo que su plan iría perfecto.

Rin, rin, rin- suena tu teléfono - le dijo Martha a Dalila, entre la música y el embobe que tenía no lo había notado, su esposo la llamaba, cuando fue a contestar se acabó el timbre y entró un mensaje:
     Amor necesito que llegues ya a casa,    tengo a Raulito con fiebre, lo voy a llevar al hospital.

Ella se olvidó de todo lo demás, le comentó a Martha lo que ocurría y se marchó.
- Reyna del baile, la fiesta acabó por hoy - dijo Martha a Alina, le explicó brevemente lo que ocurría y salieron del local.
- oh Dios mio, todo me da vueltas, no creo que vuelva a beber en largo tiempo.
- Dame un segundo - le dijo Martha sin prestarle mucha atención en ese momento, y atendiendo el móvil, volvió a entrar al bar, y se encontró con Alex.
- Dalila me ha visto - soltó de golpe
- qué?!?!- le gritó Martha a su mejor amigo - para empezar, tu no deberías estar aquí, cuando te dije que estaba aquí y que vendríamos el objetivo no era que te aparecieras - le dijo molesta.  El teléfono de Martha vibró con mensaje de Alina,
" Por favor apúrate, siento que me voy a desmayar y no puedo llegar a casa en este estado de etilismo"
Alex, al ver quien era el remitente, no pudo contener la tentación de leer,
- te acompañaré hasta la salida - le dijo a su amiga. Cuando llegaron, Alina estaba semi - inconsciente sentada en el contén de la acera - Dios, pero porqué la dejaste beber tanto!!! - La regañó Alex, ella, a pesar de todas las malas respuestas que se le ocurrieron escogió morderse la lengua y decir
- llévanos a casa, busca la forma de cargarla sin que te vea la cara y ayúdame a meterla en mi auto.
- No creo que sea necesario - respondió - si seguimos aquí se dormirá en el contén, vamos.
Se acercaron despacio a ella y Martha, tras tocarla en el hombro le dijo:
- Alina, un amigo nos llevará a casa, te va a cargar para meterte en el auto - ella solo asintió y Alex la levantó como si fuera una niña pequeña, ella mantuvo los ojos cerrados, y se acurrucó sobre su pecho.
- hueles como alguien que extraño - murmuró.
A Alex esas palabras le produjeron un calorcito en el pecho, que ya casi había olvidado.