Relatos y pensamientos de un mortal

Ruleta.

¿Creías que lo sabías todo? ¿Que eras un “primus inter pares”? ¿Que poseías el conocimiento absoluto de la vida, y era imposible contradecirte? ¿Que siempre tendrías razón, sin posibilidad de negación?

Mentira.

Yo hace poco me hallaba en dicha situación. Creí que conocía todo... Y no es así. De hecho, me queda mucho por aprender.

Una premisa que sí es cierta y que yo sostenía es que las personas son estadística y probabilidad. Por ejemplo, dada una situación concreta, ¿cuántas personas reaccionaron de una determinada manera? ¿Que probabilidades había de que actuasen así? Esa es la teoría, en la práctica, un resultado desafortunado en la ruleta de la vida (probabilidad) puede joderte vivo.

Y el caso es que, aunque por medio de estadística, puedas estimar patrones de conducta de una persona en comparación con otras, siempre está la probabilidad de que se salga de esos patrones. Rompa tus esquemas. Juegue a la ruleta rusa contigo, mientras estás de espaldas.

Nunca, absolutamente nunca; te fies de nadie, absolutamente nadie. Si quieres hacer algo, hazlo por tí mismo. Tira sabiamente la ruleta de la fortuna y procura ser tú quien tengas la bala en la ruleta rusa.