𝙗𝙤𝙪𝙣𝙙 2 | eddie munson

|9: black sabbath|

El cumpleaños de Eddie se acercaba, meses antes había escuchado en la televisión que Black Sabbath estaría de gira por todo el país y afortunadamente darían uno cerca de Hawkins, ella sabía lo mucho que a Eddie le encantaba por lo que decidió ahorrar su mesada, el dinero para su almuerzo e incluso en fin de semana salía cada mañana a cortar el césped de sus vecinos a cambio de unos cuántos dólares. Llevaban dos años juntos, y quería darle una gran sorpresa a su novio.

Eddie jugaba con cualquier cosa que se encontrará en la habitación de la chica mientras ella se vestía con su pijama rosada, faltaban algunos minutos para que dieran las doce de la noche, y poder felicitar a Eddie por su cumpleaños.

Desde el vestidor veía a Eddie acostado en su cama jugando con su gato, acariciaba el pelaje del señor medianoche, su gato. Vió el reloj, faltaban tres minutos para él dia siguiente.

-Voy por un vaso con agua-el chico asintió aún acariciando el gato, el cuál ya se estaba durmiendo.

Corrió a la cocina para tomar un pequeño pastel de chocolate que compró en el supermercado, enterró una pequeña vela decorada en el pastel para luego encenderla, miró el reloj de la sala principal, 12:00 a.m.
Caminó a su habitación con el pastel en ambas manos, con su cadera empujó la puerta y comenzó a cantarle la famosa canción de feliz cumpleaños. El rostro de Eddie no tenía precio, estaba muy emocionado por su detalle, era pastel de chocolate, su favorito.

-Feliz cumpleaños a tí-se sentó a su lado-. Pide un deseo, mi amor.

Eddie sopló la vela apagando el fuego al instante, del pabilo salió un pequeño humo. T/n se acercó a besar sus labios fugazmente.

-Gracias, mi amor-sonrió-. Se ve delicioso.

-Traje un par de cucharas para que lo disfrutemos juntos-besó su frente sacando unas cucharas de su bolsillo.

Eddie tomó está y agarró un trozo de pastel con su cuchara para llevarlo directo a su boca y hacer un chillido de placer por el delicioso sabor del bizcocho. Ella sonrió viéndolo disfrutar el pastel.

-¡Esta buenísimo!-exclamó tomando otro trozo.

-Lo está-sonrió llevando el bizcocho a su boca, era realmente rico.

Terminaron el pastel juntos, Eddie se había acostado en la cama de la chica y está se subió encima de él, sentada en su regazo y posando sus manos en su pecho, de vez en cuando jugaba con su cabello.

-¿Que haremos mañana?-preguntó la chica haciéndole una trenza a su novio.

-¿Vamos a cenar?-ella sonrió ante la propuesta del chico-. ¿Te encanta la idea no es así?

-¡Si!-atacó su cuello con besos para subir estos a su mandíbula y después a su rostro-. Será un día maravilloso.

-Todos los días contigo son maravillosos-sonrió mostrando sus colmillos y ella besó su nariz.

-Lo olvidaba, te tengo una sorpresa-se levantó agresivamente de él-. ¡Cierra los ojos!

-De acuerdo-cubrió sus ojos con sus palmas.

-Yo te digo cuando los abras-avisó y busco entre su cajón de la ropa interior, los boletos del concierto.

Eddie solía explotar los cajones de la chica para ver que encontraba, era algo que hacía regularmente, todos sus cajones eran abiertos para después tomar un objeto y preguntarle a la menor: "Amor, ¿que es esto?" "Cielo, ¿como funciona esto?", era bastante curioso, pero apesar de serlo había un cajón que no abría, el de su ropa interior, ella lo sabía perfectamente por eso sabía que los boletos estarían a salvo ahí.

-¿Ya puedo abrirlos?-preguntó aún con sus ojos cubiertos.

-¡No!-se dirigió a la cama para volver a subir en el chico, colocó los boletos detrás de su espalda-. De acuerdo, ya puedes abrir tus ojos.

El chico quitó sus manos confundido, no había nada diferente en la habitación que pudiera decir que era una gran sorpresa, sin embargo tenía a la chica enfrente con una gran sonrisa.

-¡Que linda sorpresa!-exclamó bromeando para después tomar el rostro de la chica y besarla.

-¡Esa no es la sorpresa!-hizo un puchero para después mostrar los boletos que tenía escondidos-. ¡Sorpresa!

Los ojos del chico no podían ser más grandes, observó el boleto que tenía escrito en letras grandes y muy llamativas "Black Sabbath". Una sonrisa se formó en él, la chica observó la reacción del chico muy alegre, sabía que le encantaría.

-¿¡Es enserio!?-su sonrisa era enorme.

-¡Si, veremos a Black Sabbath en primera fila!-exclamó feliz, ella no era tan fanática de la banda pero asistiría para acompañar a su novio.

-¡Eres la chica más fantástica del mundo!-la tomó de la cintura y se levantó con ella, elevándola para luego llenar su rostro de besos, enredó sus piernas alrededor de su cuerpo-. ¡Te amo muchísimo, mi cielo! ¡Es el mejor regalo del mundo! ¡Nuestra relación es lo mejor que me ha pasado!

Lágrimas de felicidad cayeron de sus ojos, estaba completamente feliz. No podía creer como tenía una chica tan maravillosa de novia, ella sonreía feliz viendo al chico emocionado.

-¡Iré a ver a Black Sabbath con mi hermosa novia!-besó sus labios-. No sabes la suerte que tengo de tenerte.

-Todo para que seas feliz-dejó a la menor en el suelo.

Eddie contaba los días, esperando cada mes, cada semana, día, hora, minutos e incluso segundos. Ambos habían viajado a Virginia en la fuegoneta de Eddie, quien permanecía despierto mientras conducía por las oscuras y solitarias carreteras, su novia dormía a su lado; en ocasiones el castaño tomaba su mano y besaba está, la miraba fugazmente verificando que descansará bien.

La mañana siguiente la pareja estaba lista para disfrutar aquél concierto que Eddie ansiaba demasiado, T/n acomodaba su cabello además de maquillarle un poco sus ojos.

-Perfecto-besó la punta de su nariz-. Te ves guapísimo.

-Gracias. Tu siempre te ves hermosa-posó ambas manos en los costados de su cintura y acarició está.

El contraste de personalidades de ambos era bastante notoria, T/n por su parte era muy femenina y usaba prendas color pastel a diferencia de su novio quien parecía que no conocía otro color que no fuese el negro. Se aproximaron al concierto, Eddie tenía el corazón en su garganta a punto de ser escupido en el momento en que viera a su banda favorita frente a sus ojos.

El estadio estaba relativamente lleno, pero sus lugares en primera fila estaban reservado para ellos, se acomodaron en sus asientos esperando el show. Fueron los 20 minutos más largos de su vida hasta que aparecieron sus artistas preferidos, el chico gritaba emocionado mientras su novia solo le seguía el juego o simplemente lo veía sonriendo.

Ella abrazó el brazo de su novio a lo que él respondió tomándola de la cintura y elevándola teniendo un mejor alcance de sus labios, una escena bastante romántica incluso para los integrantes de Black Sabbath. Eddie la dejó nuevamente en el suelo rodeando su cintura con su brazo. Ozzy Osbourne paró de cantar solo teniendo de fondo el instrumental.

-¡Woah! ¿Cuáles son sus nombres, chicos?-preguntó el vocalista bajando el micrófono a él, las luces de fijaron en ambos, T/n no podía ver por la fuerte luz en sus ojos.

-¡Me llamo Eddie y ella es mi novia, T/n-la apegó más a él, teniendo una emoción indescriptible.

-¡Eddie!-exclamó Ozzy confirmando su nombre, quien parecía un poco borracho o incluso drogado-. ¡Tienes una hermosa chica, Eddie! ¡Son la pareja más adorable que jamás haya visto!

-¡Así es!-Eddie sonrió-. ¡La chica más dulce y hermosa que haya conocido, por ella estamos aquí! ¡Ella me regaló los boletos como regalo de cumpleaños!

-¡Que adorables!-Ozzy sonrió haciendo un gesto de ternura que siguió por el público, resonando un fuerte "Oww"-. ¡Eddie y T/n, está canción es para ustedes!

Una canción totalmente desconocida para ella comenzó a sonar pero Eddie parecía conocerla, la tomó de las manos y la apegó a él para besarla. Ella no comprendía nada pero estaba feliz de compartir la felicidad de su novio.