52 SEMANAS CON UNA MUJER "ROTA" / Nueva versión en proceso

Semana 38

Ella entregaba su ser a quien consideraba su todo, derramando amor en palabras, gestos y miradas. Pero tristemente, esa persona no comprendía su entrega, ni valoraba su esfuerzo y dedicación.

Se cuestionaba una y otra vez qué hacía mal, dudaba de sí misma y de su capacidad para amar. Dejó de amarse a sí misma por alguien ajeno al verdadero significado del amor, perdiéndose en confusión y desesperanza.

Las palabras hirientes de esa persona resonaban en su mente, minando su autoestima y causándole dolor. Se preguntaba si merecía el amor, si era suficiente, si encontraría a alguien que valorara su esencia única.

Un día, algo cambió. Decidió liberarse de las cadenas de esa relación tóxica, como una mariposa emergiendo de su crisálida. Aunque fue difícil, su valentía superó el miedo. Sanó las heridas y descubrió una fuerza interior desconocida.

Aprendió que el amor verdadero nutre y eleva, no humilla ni destruye. Comprendió que comienza desde el amor propio y solo así se puede dar y recibir de forma saludable.

Hoy, brilla con luz propia. Su corazón sanado late con fuerza, su sonrisa irradia alegría y confianza. Ya nadie puede hacerla dudar de su valía.

Es la guardiana de su propio amor, abriendo su corazón solo a quienes merecen su cariño y respeto.

Aprendió que el amor no implica sacrificio y sufrimiento, sino crecimiento y felicidad compartida.

Merece un amor que la llene de alegría y la valore por quien es. Y así, cada día se levanta, consciente de su valor y decidida a vivir una vida plena. Su historia nos recuerda que todos merecemos un amor sano y respetuoso.