Semana 41

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El tiempo pasó, y como una respuesta desesperada a su propia supervivencia, esa frágil criatura se vio obligada a forjar una coraza a su alrededor.

Se volvió fría, distante e indiferente, cerrando su corazón a los demás para protegerlo de futuros daños. Esa capa de indiferencia se convirtió en su refugio, en su salvavidas en un mar de incertidumbre.

Sin embargo, en los momentos de silencio, cuando las estrellas iluminaban el oscuro cielo nocturno, esa chica frágil sentía la contradicción latente dentro de su ser. Sabía que la frialdad no era su verdadero ser, sino simplemente una coraza construida para sobrevivir.

A veces, en la quietud de la noche, se preguntaba si esta armadura era la elección correcta. ¿Acaso estaba renunciando a su autenticidad en busca de la

estabilidad? Así, en el rincón más profundo de su ser, esa chica frágil

se prometió a sí misma que algún día se liberaría de las cadenas de la desconfianza. Trabajaría en sanar sus heridas, en fortalecer su espíritu sin perder su esencia.

Descubriría cómo construir puentes hacia los demás, sin temor a las tormentas que la vida pudiera traer.

52 SEMANAS CON UNA MUJER "ROTA" / Nueva versión en proceso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora