Cherry Love [COMPLETA]

CAPITULO 13

CHERRY

Mi bolsa como abrigo aterrizaron en mi cama, al igual que todo el peso de mi cuerpo y sumergiendo mi rostro completo en el colchón.

Aroma a enjuague de ropa inunda mi nariz y aspiro con fuerza por más que me cuesta respirar.

Recordándome justo esta, volteo para clavar mi vista al techo de mi habitación y entrelazando mis manos sobre mi vientre para luego sobre mi pecho, ante ese pinchazo que todavía sigue.

Lo palmeo levemente, seguido a elevar el otro brazo frente mío y con mi índice, apunto hacia adelante como si el rostro de César y su nariz aparecieran imaginariamente.

¿Por qué me resultó, como conocido eso?

¿Será de alguna película?

¿Lo vi en alguien en algún lugar y lo retuve en un rincón de mi cerebro?

Y exhalo pensativa por no tenerlo muy claro.

Vuelvo a rodar sobre mi cama para abrazar mi almohada bajo mío y apoyo mi mejilla.

Ni siquiera encendí la luz cuando entré y como toda iluminación está el brillo nítido de la luna entrando por la ventana abierta, gracias a la totalidad de las cortinas deslizadas por mamá, que me hacen preguntar en cómo le fue también en su primer día de trabajo, ya que, yo llegué muy tarde y ella como papá están durmiendo.

Saco mi móvil de la parte trasera de mi pantalón y no tengo nada nuevo, pero busco el número de mi hermano y releo fugaz sus últimos mensajes que fueron aproximadamente ocho meses atrás.

Raquel me dijo que mi horario prime será pasado el mediodía a partir de mañana y por eso me acomodo sobre el colchón para escribir un mensaje con grandes esperanzas en él.

CESAR

Dejo la taza de café que Pastor pidió, junto a un plato con un sándwich para almorzar.

Su trabajo no queda muy lejos y cuando no lo tienta la cantina con el menú de su edificio, almuerza acá.

Sonrío del otro lado de la barra.

Y se dedica a mirar enamorado a Raquel.

Su primer pasión, ya que lo segundo es el fútbol.