•| We Are Jaune |• © Taegyu •

ːꜤ☁️.ི 39: El cuento de las estrellas

Un sábado por la mañana tanto Taehyun como Beomgyu veían con aburrimiento un programa cualquiera en la televisión, habían terminado uno de los tantos dramas que veían y se sentían incompletos en cuanto al entretenimiento, ver la vida de un hombre de la política no les interesaba.

Beomgyu llevó sus ojos al marco de pollito que estaba en el mueble de la televisión; sus alas estaban hechas con la silueta de la mano de Junnie, tenía grandes ojos disparejos y un pequeño pico, en el centro había una foto de los tres, al lado también estaba el cascarón de un huevo pintado de azul con una pajita de jugo pegado, era un bonito cascarón buzo.

Un suspiro cargado de nostalgia salió de sus labios al recordar que tan solo dos semanas atrás Junnie había dejado el jardín, su pequeño se estaba volviendo un niño grande y aún no era capaz de asimilarlo, en unos meses probablemente estaría levantándose a mitad de la noche para hacer un cartel, pero confiaba en que Junnie sería responsable.

Riendo ante su pensamiento, recostó su cabeza en el hombro del rubio, recibiendo pequeñas caricias en su cabello.

ㅡ Estaba pensando en pintarme el cabello, pero no sé qué color podría usar.

Taehyun observó el rostro del menor, mismo que lo veía con atención en busca de una respuesta.

ㅡ Te ves bien como abuelo.

ㅡ ¡Oye! Entonces tú sigues siendo un elote ㅡ El mayor negó divertido, pensando nuevamente. ㅡ ¿No has pensado también en reemplazar el rubio?

ㅡ Lo hice, pero tampoco tengo nada en mente, podría volver al castaño y tú igual.

ㅡ ¿Cómo en la universidad? Oh Dios, eso me trae recuerdos, pasamos un mal momento en medio de nuestras carreras.

ㅡ No eres tú, soy yo ㅡ Dijo el rubio con un tono de voz más suave, tratando de imitar al pelinegro ㅡ Bueno, si eres tú.

Beomgyu soltó una carcajada al escucharlo ya que recordaba ese día más que bien. En medio de sus carreras hubo un momento en el que decidieron separarse, el estrés, la presión y otros factores estaban complicando su relación, Beomgyu había dado algunas excusas cuando un perdido Taehyun le pedía explicaciones, aunque al final volvieron siendo un poco más maduros con un mejor enfoque en su futuro.

Ahora solo recordaban aquello como un momento del que podían reírse.

Escucharon el sonido de una puerta abrirse, unos pasos lentos se dirigieron a la sala y de pronto en el sillón estaba Junnie, con su pijama completo de pato abrazando su conejito rosa, su cabello apuntando a diferentes lados. Junnie abría y cerraba sus ojos lentamente con sus labios abultados.

ㅡ Buenos días papitos, ya despeté.

ㅡ Buenos días Junnie ¿dormiste bien? ㅡ El castaño asintió ㅡ ¿Y tus sueños?

ㅡ ¡Ah! Soñé que había un dinobausario en mi habitación, me llevaba al cielo y podía tocar las estellas con mis manos ¡Después estaba Idon Man y me daba helado! Me dio hambre y me despeté.

ㅡ Que interesante sueño, pero será mejor que vayamos a desayunar ¿me ayudas?

A Junnie le brillaron los ojos e inmediatamente se puso de pie, alzando sus brazos para que lo cargara, Taehyun sin negarse lo tomó en brazos con algo de dificultad. El peso de Junnie había aumentado bastante; ahora tenía una pancita a la que le dibujaba un rostro, mejillas regordetas que aplastaba para imitar un pato, mismas que Beomgyu amaba acariciar y besar, lo único que aún seguía en proceso era su altura, según Seok Jin estaba por debajo de su altura para su edad.

Aunque estaba la posibilidad de que no llegara a ser tan alto, también era preocupante debido a su estado inicial.

Beomgyu los observó perderse en la cocina, regresó su atención a la pantalla para cambiar y poner música, pero se detuvo cuando un anuncio en particular llamó su atención.