Algo Cambió

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Perséfone estaba cansada, su fiesta de cumpleaños acabó y se sentía mal de comer mucho pastel.

Se levantó con pereza de la silla, yendo a su cuarto, sentándose en su cama, estando pensativa.

Ahora que lo había pensado mejor, no fue una excelente idea pedir ese deseo.

Aunque también se sentía rara.

¿Por que? Bueno, es que no ha dejado de pensar en ese deseo desde que lo pidió.

Había algo que no se sentía normal, era una especie de sensación que no la dejaba en paz.

Ya harta de pensar tanto en el deseo, mejor se preparó para irse a descansar, en la mañana estaría con su madre, haciendo cosas importantes y para ello, debía estar descansada.

Cuando ya estaba lista para ir a dormir, fijó su vista en su ventana. El cielo estaba precioso, estaba iluminado y lleno de estrellas por montón, la luna se veía magnífica, todo ese paisaje era conmovedor y mágico.

Era como especie de presente, que se le está dando a ella (y así era).

Artemisa se había lucido con ese hermoso cielo (siendo ayudada un poco por Selene).

Se quedó embelesada un rato, aunque ella no notó un pequeño detalle.

Resulta que pasó una brillante estrella fugaz cerca de allí, era una gran coincidencia que hubiera una en ese preciso instante, pero Perséfone, no notó eso y siendo sincera, a ella no le importaría perderse de verla.

Perséfone, aprovecho antes de que se le olvidase, abrir un obsequio que le envío su esposo.

Hermes se lo dió en la mañana, diciendo que su esposo quería que lo abriera cuando estuviese sola y en un espacio tranquilo.

Era momento de abrir esa caja, se moría por saber que era.

En su mente, había miles de posibilidades, pero no se pudo contener, abrió esa caja con emoción y vió con devoción su regalo.

Muy hermoso e sofisticado, era una corona nueva con rubíes y con un precioso color plateado, la diosa sintió alegría, estaba increíble.

También había nota, allí dentro:

"Mi amada Perséfone, espero te gustará mi obsequio, se que no debería dártelo fuera del Inframundo pero luego pensé en que sería un bonito detalle para ti, espero que te guste y aunque no esté contigo en esta fecha especial, quiero decirte que te amo y no puedo esperar a volver a verte pronto junto a mí"

Psdt: Cerbero te extraña mucho, anhela tu presencia y que te le pases bien.

-Hades

La diosa se sonrió a si misma, le gustaba que su esposo fuera considerado con ella. Lo extrañaba mucho.

Apesar de que pasa 6 meses allí, siente como si fuese poco tiempo, juega estar ahí, con su amado Cerbero, reinando allí junto a su esposo y le gusta estar en el Inframundo, como si fuese su hogar.

Amaba a su madre pero a veces, le gustaría que dejase de ser tan obstinada y fuera, más comprensiva y amable con Hades.

Deméter tenía un serio problema de ira, con él y aún no soportaba la idea de que su hija se fuese. Incluso las veces en que ella le dijo, que por favor se llevasen bien, los dos seguían siendo tercos y se odiarían por siempre.

No podría hacer nada para que su relación fuese buena, valió la pena intentarlo.

Tantos pensamientos, hicieron que la diosa tuviera mucho sueño por lo que lentamente, iba cerrando los ojos, lo último que vió fue a la ventana de su cierto, viendo al cielo por última vez en ese día, cuando notó al rápido moviéndose por el cielo.

-Pero, ¿Que fue eso?

Se extraño por eso, pero no le tomó tanta importancia y se tranquilamente se durmió.

A la mañana siguiente, todo parecía estar regular, la diosa se levantó y se fue a buscar a su madre, quien no estaba en la cocina.

Era extraño, normalmente se encuentra en la casa, tal vez cocinando, hablando con alguna ninfa o viendo las cosechas.

Fue afuera a ver qué tal y también no estaba allá fuera.

Retornó al lugar, busco por todas partes pero no había nadie.

Eso no era normal, no pasaba nunca, Deméter siempre separaba a que ella se levantase para ponerse a hacer cosas de provecho.

Ella pensó que era una casualidad, así que se sentó un rato a esperar, la llegada de su madre y de su hermana, que no aparecía tampoco.

Si es que ellas volvían...

Si es que ellas volvían

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𝕰𝖑 𝕯𝖊𝖘𝖊𝖔 𝖉𝖊 𝕮𝖚𝖒𝖕𝖑𝖊𝖆𝖓̃𝖔𝖘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora