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Para Eunwoo había sido más fácil de lo que pensó. Siempre había sido un buen amigo del lindo omega, aunque Jimin siempre lo había tratado como un amigo.

Debía admitir que siempre le había gustado el castaño, pero ahora solo se sentía mal en cualquier sentido llegando donde èl para invitarlo a salir, sabiendo como terminaría todo eso.

Sehun le había dicho que Yeji les ayudaría, diciendo que convencería a Jimin de que aceptara salir con el alfa. Eso y dándole información a Eunwoo sobre los gustos de Jimin para que sus conversaciones y salidas fueran perfectas.

Jimin estaba abierto al amor. Dejo que el guapo alfa entrara a su vida y corazón.

Eunwoo se comportaba de maravilla.

Llevando sus libros, platicando de todo tipo de cosas interesantes, invitándolo a salir cada fin de semana. Demostrándole que era un buen y respetado alfa. No fue difícil que Jimin hasta se convenciera de que Eunwoo podría ser su alfa destinado.

Poco se veía, pero los destinados aun existían. Conocía pocas personas que hubieran encontrado al suyo, pero Jimin pensaba que él tal vez ya lo había hecho.

Había leído sobre cómo te sentías con tu persona especial y a pesar de que a Eunwoo lo conocía desde hace mucho y jamás había sentido nada por él, creyó que solo era su lobo ignorando la señales.

Se entregó a Eunwoo en cuerpo y alma. Parecía estar dándole todo de su ser. Jimin estaba completamente ciego ante todo, estaba enamorado.

El sexo con Eunwoo era bueno, muy bueno. Aquel alfa lo satisfacía mucho, tanto que Jimin parecía estar en celo diariamente desde que había perdido su virginidad con él. Jamás había gastado tanto dinero como lo hacía en condones.

Por obvias razones el alfa no se quejaba, Jimin era un omega hermoso, tanto por fuera como por dentro. La atención que le daba al alfa era linda y agradable. Ambos se sentían cómodos juntos, a pesar de que uno de ellos sabía que todo era una farsa.

Aunque todo fuera muy lindo, Jimin siempre pensaba en algo.

Eunwoo no lo hacía sentir en el cielo, a pesar de ser un buen chico quien lo respetaba y quería, además de que lo satisfacía. Sus besos no lo dejaban bobo, su cercanía no lo hacía estremecer, hacer el amor con él se sentía bien, pero no maravilloso.

 Sus besos no lo dejaban bobo, su cercanía no lo hacía estremecer, hacer el amor con él se sentía bien, pero no maravilloso

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Faltaban solo tres meses para que el año culminara. Los mayores problemas según los padres de Jimin en ese momento, debía ser elegir entre las tres universidades que lo solicitaban.

Pero no era así.

Aquel fin de semana, Eunwoo y Jimin había estado juntos en casa del castaño a falta de la presencia de sus padres.

El omega se había quedado sin condones, pidiéndole al alfa que los llevara. Eunwoo no pensó que su mejor amigo, Sehun, le daría unos condones que el mismo había estaba haciéndoles huecos con una aguja.

Regalo del Cielo [Kookmin] OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora