Naruto caminaba por el barrio rojo hacia su departamento, vio a dos borrachos salir de un bar agarrándose a golpes, simplemente se hizo a un lado hasta que escuchó una risa conocida dentro del bar, tragó pesado, ¿no se suponía debía dormir por su misión?, se asomó por la puerta del lugar aprovechando que la gente del lugar trataban de detener al par de borrachos, se coló por la puerta principal, mientras caminaba su corazón palpitaba con fuerza, un hueco en su estómago se formaba causándole malestar, a lo lejos pudo ver a la chica de hace unas horas, nuevamente sobre las piernas de su novio.
Ambos se besaban con necesidad y deseo, las gemas del Uzumaki parecían dos grandes lagos derramándose con tristeza, se acercó lentamente -te lo digo preciosa, sólo era un amigo, quería un consejo, ya sabes, de shinobis -la chica sonreía divertida -por un momento creí que eras gay -Shisui rio escandaloso -no digas estupideces, nunca me fijaría en un hombre teniendo estos manjares frente a mí -el Uchiha apretó su cintura, la hizo sentir su hombría, la chica mordió sus labios, embarró sus pechos en el fuerte pecho del Uchiha.
Naruto bajó el rostro observando su cuerpo, después sus manos, se veía con frustración, se sentía impotente, no era un hombre, no era una mujer, era un maldito fenómeno, ¿cómo demonios creyó que un hombre como Shisui en verdad lo amaría o se fijaría en él?, su corazón dolía, dolía bastante, su respiración comenzó a acelerarse, sentía que el aire le faltaba.
Una mano se posó en su hombro -vayamos afuera Naruto -el rubio escuchó la voz grave del primo de su novio, asintió con tristeza aún tratando de jalar aire a sus pulmones, cuando salieron del lugar, Naruto comenzó a avanzar hacia un callejón junto al bar, se sostuvo de la pared tratando de controlarse. La mano nívea del Uchiha sobaba su espalda con cuidado, el pequeño tomó su pecho, lo apretó con fuerza, comenzó a derrumbarse, antes de caer al suelo fue sostenido por el mayor -te llevaré al hospital -Naruto aún jalando aire negó de inmediato -no, sólo… déjame en… mi departamento… la abuela se enojará -Itachi no muy seguro lo levantó en brazos, lo observó por un momento -bien-Itachi corrió con el chico en brazos con velocidad, cuando llegaron, el pequeño le indicó que por la terraza. El azabache lo colocó con cuidado en su cama viéndolo respirar con dificultad, de inmediato caminó hacia la nevera, sacó una jarra de agua, pero algo llamó su atención, una foto en la nevera, el rubio en las piernas de su primo mientras este lo besaba con cariño, endureció su ceño, ahora entendía la reacción de Naruto, respiró hondo, sirvió un vaso, caminó al cuarto. El menor comenzaba a tranquilizarse, Itachi entregó el vaso al Uzumaki, lo tomó con velocidad terminando por calmarse, sus ojos se abrieron con vergüenza al identificar lo que acababa de suceder, lágrimas salieron de sus ojos con tristeza, mordió sus labios sintiéndose un idiota.
-Lamento lo que te ha hecho mi primo -el rubio negó con miedo -no, no hizo… -Itachi negó -sé perfecto lo que hizo, acabo de ver la foto en la nevera, eres casi diez años menor que él, no debió jugar contigo de esa manera -el rubio apretó su pantalón naranja con tristeza -yo… yo sólo quería que me amara -el rubio limpiaba sus lágrimas con su chamarra con insistencia, bajo la mirada estoica del Uchiha -le creí esta mañana, dijo que lo perdonara, que no volvería a pasar, le creí por tercera vez, le creí -el rubio hipaba bajo su brazo, el cual cubría su rostro -sólo, sólo se aprovechó de mí, ahora entiendo porque me escondía, se avergonzaba de mí, se avergonzaba porque soy un monstruo, ¿no es así? -
Naruto vio con sus grandes gemas los onix del azabache, este negó con algo de molestia por lo que causó su primo -no Naruto, no eres un monstruo -el rubio negó desesperado -no entiendes, no entiendes, no soy un maldito hombre -Itachi abrió sus onix demasiado -soy… soy un doncel, no soy un hombre, ni una mujer, soy un maldito híbrido, un maldito monstruo -Itachi analizaba sus palabras, ¿un doncel? en algún lugar había escuchado de ellos, pero se suponía estaban extintos -se lo dije antes de iniciar nuestra relación, él lo aceptó contento, creí, creí que era sincero, creí que me amaba, creí que me aceptaba-
Itachi lo veía con cuidado, no sabía qué decir, ni qué hacer para que el rubio saliera de esa crisis -no deberías derramar tus lágrimas por un hombre que no vale la pena, es mi primo y lo quiero, es buena persona, pero debo aceptar que no es un chico de una sola pareja -el pequeño apretó sus pantalones con frustración, asintió más tranquilo -lo lamento, no debí armar toda esta escena -Itachi negó -somos humanos, tenemos derecho a sufrir y llorar también -el rubio sonrió ligero con dolor, asintió -deberías regresar al bar, tu primo debe estar buscándote -el Uchiha respiró hondo, asintió. Una mano lo detuvo -no le digas nada por favor, no quiero que sepa que me lastima -el azabache lo vio con cuidado, asintió con duda, pero era su decisión y debía respetarla, salió del departamento pensando en la situación con detenimiento, su primo había rebasado el límite.
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Un amor distinto al tuyo (Itanaru)
Romance....el mayor veía con cuidado a su rubio... -bebé... déjame explicarte... -el pequeño negó comenzando a derramar lágrimas por sus gemas... -no, no quiero escuchar... no quiero escucharte... -de inmediato el azabache se levantó y lo abrazó con fuerza...