Un amor distinto al tuyo (Itanaru)

Capítulo 7

Itachi desapareció del lugar, corrió con velocidad hacia la casa de su primo, vio a Shisui entrar con molestia a su hogar, decidió seguirlo un poco. Shisui rascaba su cabeza con desesperación -¿deja de torturarme bebé? ¿dónde demonios estás? -el menor entró con cuidado -tengo un recado de tu "amigo" -Itachi servía un vaso de agua mientras observaba a su primo quien lo vio con sorpresa -¿viste a Naruto? -el menor asintió tomando un vaso de agua -dijo que te pudras y que dejes de buscarlo, eres molesto, sólo textualizo, ¿creí que eran amigos únicamente? -Shisui lo vio con terror, pero disimuló, se dejó caer en su sofá pensando en qué decir -debes estar muy divertido al verme sufrir, aprendí mi lección, ¿bien? ya no buscaré nenas, esta nena que me dejó en verdad me duele. Naruto es mi amigo, eso es otro tema, sólo está molesto por una mala broma que le hice, no pienses mal -

Itachi negó con desaprobación -veamos ¿cuánto te dura la abstinencia? -Shisui lo vio mal -en verdad quiero cambiar -el menor levantó una ceja -¿por tu amigo o por tu novia?- el mayor lo vio con terror, nuevamente disimuló -demonios, hablo de la nena, Naruto no tiene nada que ver, simplemente es un amigo -Itachi terminó su agua, lo observó un momento -bien, es tu problema, después nos vemos -Shisui dejó caer su cabeza hacia atrás en el sillón con cansancio y frustración.

…..

El rubio limpiaba su equipo ninja con cuidado sentado tras un árbol en los límites del campo de entrenamiento siete, se puso rígido al sentir el chakra de Shisui cerca del lugar, guardó sus cosas con cuidado preparándose para huir -Narutoooo -el azabache estaba seguro que ahí se encontraba, vio salir a su equipo hace unos minutos, no podía evitarlo con facilidad -sé que estás aquí, hablemos por favor -el Uzumaki bajó el rostro con su ceño marcado, no podía huir para siempre, llevaba diez días evitándolo, creó un grupo de clones aprovechando el sello para poder huir del imbécil si se ponía pesado, usaba su apariencia anterior con un henge, apretó el ceño cabreado al verlo -¿qué demonios quieres idiota? -Shisui sonrió con arrogancia, corrió hacia donde escuchó su voz, el clon explotó casi en su rostro -demonios bebé, hablemos, te extraño demasiado, me has dado una lección, te juro que esta vez no te fallaré, pero vuelve conmigo -Naruto veía el suelo con molestia, apretó sus puños con coraje -no quiero escucharte, no quiero tenerte cerca, ¿qué no entiendes?, no te quiero ya, déjame en paz-

Shisui negó con terror -tú me amas, no puedes olvidarme así de fácil, tenemos historia bebé, sal de ahí y escúchame -otro clon explotó al verlo tan cerca. El rubio veía con coraje el suelo, sus gemas se volvían rojas a momentos -esa puta historia que se te olvidó cuando tenías un par de pechos frente a tus ojos, vete al carajo Shisui, conocí a alguien más -el azabache endureció su ceño -lo admito, fui un imbécil egoísta ¿contento?, ahora admite que es mentira que conociste a alguien más, no puedes cambiarme, tú me amas -el Uzumaki chiteó, sintió que alguien lo observaba, con cuidado levantó el rostro, vio a Itachi observarlo con cuidado, sus onix lo veían con seriedad, se encontraba en cuclillas sobre un árbol, Naruto levantó su dedo, lo colocó en sus labios mostrando una sonrisa divertida y pícara -ya me entregué a él, pierdes tu tiempo, lárgate con tus amigas y a mí déjame en paz, te repito, aléjate de mí loco-

Shisui buscaba al rubio por el lugar, no podía ubicarlo, sabía que usaba un sello para evitarlo, era inútil buscarlo con el sharingan,  volteó los ojos con molestia al no encontrarlo -sé que es mentira, no me rendiré bebé, cuando regreses conmigo, todo será diferente, hablaremos con Tsunade-sama y tía Mikoto, te lo prometo -el Uchiha mayor corrió lejos del lugar con fastidio. Naruto bajó su rostro con dudas, ¿y si en verdad había cambiado? pero recordó que ni siquiera un te quiero le había dicho en todo ese tiempo "tú me amas bebé" apretó sus puños con coraje al recordar sus palabras, ¿tan malditamente seguro lo cree? -¿qué harás? -el pequeño acomodó su coleta con calma viéndose sensual, sus piernas se veían largas y torneadas, sacudió sus ropas, levantó su rostro con sus grandes gemas azules para observar al azabache que lo veía con intensidad -seguir con mi vida, no regresaré con un bastardo que presume de mi amor, ni siquiera un te quiero puede decirme, gracias por no delatarme guapo -el pequeño sonrió coqueto, corrió lejos del lugar moviéndose coqueto -Itachi sonrió de lado con diversión, negó para seguir a su cretino primo que lo tenía preocupado, entendía al rubio y respetaba su decisión, Shisui en verdad lo había lastimado.