Chicos con aroma a MUERTE©[Saga D E A D #0]

{16) Placeres WILLIAMS

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Capitulo con +18. Advierto para si no te gustan este tipo de escenas sin problema puedes ir directo al otro cap, allí al comienzo se resume y no te perderás nada más que los detalles. Si eres de las personitas que prefieren leer los detalles pues… welcome home:

Los Williams eran tres demonios, demonios de la muerte, de la lujuria, del amor, de la locura.

Entonces… ¿Quién era yo?

Me hacía pasar por una tal Sarah Black pero me llamo Poison Pierce y vine a destruirlos. Yo, yo soy uno de los misterios de mi propia historia.

Mis motivos estaban tan ocultos como mi oscuro pasado y solo prestando mucha atención podrás descubrirlo.

Allí estaba yo, besando a Gross en plena fiesta.

Uno de esos besos que te dejan sin aliento, sin vida y más caliente que un día en la playa bajo el sol.

Sus manos paseaban por mis muslos dejando tras de ellas miles de sensaciones, sus manos eran cálidas a diferencia de las de Drug.

Gross era calidez.

Drug era frialdad.

Style era un clima intermedio.

Sentir los labios de ese chico te trasladaba a otro universo, era viajar sin necesidad a pasaporte.

Me separo de él para tomar aire mientras observo fijamente esos ojos grises hermosos y él sin poder detenerse va a por un segundo ataque pero este a mi cuello. Suelto gemidos involuntarios mientras Gross reparte besos y chupetones por mi cuello.

Su mano derecha se dirige a mi entrepierna.

—¡Mierda!—expresa.—Justo hoy no podías venir con vestido.

—Lo siento.—expreso completamente sumisa.

Él me observa sorprendido. Esa respuesta no se la esperaba. Hasta yo me doy cuenta de lo dócil que sonó eso.

—Vayamos a mi habitación.—dice tomándome del brazo y antes de que él me jale me suelto, me acerco a la barra y tomo la botella de Vodka que hay en ella.

Tomo a Gross de la mano y me dejo guiar hasta su habitación.

Subimos al segundo piso atropellando a todos en el camino y al fin llegamos.

Entro detrás de él y doy unos pasos mientras el cierra la puerta con llave, me toma del brazo y me da la vuelta para volver a besarme.

Vamos dando pasos hacia atrás mientras nos besamos como par de adolescentes hormonales y continuamos en ese satisfactorio jugueteo de nuestras lenguas mientras nuestros labios continúan en ese contacto delicioso entre ellos.

Él me empuja en la cama y me quita el short en menos tiempo del que me lo puse.

Sonríe lascivo mientras me baja lentamente la ropa interior y me deja expuesta ante él. Jamás un chico me había mirado así, con ese deseo en sus ojos. Jamás se habían tomado el tiempo de apreciarme como si fuese una obra de arte, siempre llegaban y era mete y saca pero entonces me doy cuenta que Gross no es cualquier chico y eso me pone aun mas.

Abro la botella que permanece en mis manos y la llevo lentamente a sus labios, él se traga el líquido y yo me quito la blusa para luego llevar la botella y vaciarla en mi cuello y pecho.
Él no tarde en volver a lanzarme a la cama mientras le da otro trago a la botella, me brinda pero tomo la botella y repito la acción de vaciarla sobre mi cuerpo.

Lanzo la botella al suelo y se rompe en pedazos.

Gross se acerca a mi cuello y comienza su labor de lamer y succionar cada parte mojada por el líquido.