La nube de tierra finalmente se había disipado, y no quedó ningún rastro de a dónde se dirigieron Erza y Wendy; Gildarts dio dos pasos al frente antes de detenerse y ver al frente, teniendo una sola cosa en la cabeza: Extrañeza.
-¡Viejo! -lo llamó una voz en la lejanía. El castaño volteó sobre su hombro y descubrió que se trataba de Gray-. ¿Qué diablos pasó? Estaba algo lejos cuando escuché demasiado ruido, y luego vi la nube de tierra.
-Erza escapó -contestó Gildarts. Gray amplió los ojos, aunque no estaba muy sorprendido del todo-. Y Wendy le ayudó a hacerlo.
-¿Qué?
-Lo que oíste -luego Gildarts regresó la mirada al frente, ignorando cualquier clase de reacción por parte de Gray-. Aunque debo admitir que hicieron lo correcto; Erza estaba agotada, y Wendy aún es inexperta. No hubieran podido ganarme aunque lo... -
-¡Esto no se trata de ti, anciano! -exclamó Gray con el rostro enrojecido de coraje-. ¡¿Porqué carajos las dejaste escapar?!
-...no lo sé -respondió Gildarts, vacilando.
-¿"No lo..."? ¡¿Es una maldita broma?!
-Relájate, Gray.
-¡¿Cómo demonios quieres que me relaje después de saber que dejaste huir a la responsable de que el gremio se esté desmoronando!?
-El gremio no se está desmoronando por culpa de Erza -aclaró Gildarts al ver frente a frente a Gray, finalmente.
-¿De qué estás hablando? -cuestionó Gray al dar un paso al frente-. Ella empezó todo esto. Toda la culpa... -
-No, Gray -lo interrumpió Gildarts al negar con la cabeza-. Lo que pasó con Erza fue sólo la chispa que encendió el fuego de la rebelión en el gremio.
-¿"Rebelión"? -preguntó Gray-. ¿No crees que estás exagerando un poco?
-Si el gremio fuera lo suficientemente fuerte y sólido como debería de ser, todos estos problemas no habrían ocurrido. El gremio ya no es lo que era.
-Claro que sí -replicó Gray-. Haciendo a un lado el problema con Natsu y Erza, el gremio sigue siendo el mismo de siempre. Aún confío en ellos.
-Yo no -declaró Gildarts con voz firme y sin vacilar, fue tanta su seguridad al decirlo que incluso Gray sintió un escalofrío en sus antebrazos-. Ya no confío en nadie.
-¿lo dices en serio?
-Sí.
Gray agachó la cabeza, reflexionando en lo que había dicho Gildarts. ¿Será a caso cierto? ¿Ya no había nadie en quién confiar dentro del gremio? En el momento de su pelea contra Erza ahí, sólo unas pocas personas se plantaron en su contra: Wendy, Gajeel, Mystogan, y Elfman. Puede que sólo con ellos tendría sus dudas, por el hecho de ayudar y defender a Erza, ¿Pero lo demás? No estaba del todo seguro.
Gray levantó la mirada hacia Gildarts y notó que en él algo se había esfumado. Algo se perdió del todo.-¿Y ahora qué hacemos? -quiso saber.
Gildarts dio media vuelta e inspiró hondo.
ESTÁS LEYENDO
La Última Flama Carmesí
FanficLa vida puede cambiar radicalmente por una simple acción, o un pensamiento; siempre estuvo ahí para Erza Scarlett, justo frente a ella. Y con el paso del tiempo, se magnificará hasta darle un giro de 180 grados en los eventos futuros. Un tercer viaj...