Todo De Ti...[Sky x Selever]

Sky

Hace 8 años.

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-Madre, padre... -Se encontraba un chico nervioso, por el resultado y reacción que tendría aquella declaración. -Creo que soy gay. -Finalmente dejo salir de aquella boca.

-Oh, hijo... -Titubeó una mujer, que igual estaba algo nerviosa por dicha declaración.

-Felicidades hermanito... -Habló una niña rubia, se encontraba en una silla mientras cenaba Spaghetti su comida preferida. -Que seas feliz. -Sonrió, lo cual hizo que su hermano igual lo hiciera.

-Hijo... -Se acercó el padre. Un hombre de cuerpo ancho, lo suficientemente fuerte, por qué si lo hacías enojar de seguro te morirás al día siguiente. -Felicidades muchacho... No todo en la vida debe ser lo mismo, y lo estás demostrando... Puesto a qué tú eras muy callado en esta familia. -Decidio voltear a ver a su mujer e hija. -Te entiendo correctamente. -Sin más optó por abrazar a su hijo, fue un abrazo sincero y con aceptación que con gusto fue correspondido por el más bajo.

-Gracias... Padre... -Se separó del abrazo y miró por detrás de él, su madre se encontraba ahí, aún en shock por el momento.

-Hijo, digo... Lo mismo que tu padre... -Le dió una sonrisa, bastante falsa, pero que nadie notó aquella falsedad. -E-estoy feliz por ti... -Dijo, a duras penas y con el ligero tono de tartamudeo.

-Gracias madre... -Sonrió para ella, estaba feliz de que su familia lo aceptara tal como es...

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-¿Hermanito? -Susurraba una pequeña niña, ahora estaba entrando al cuarto de su hermano.

-¿Que pasa cielo? -Preguntó el mayor, le gustaba decirle así a su pequeña hermana. Se sentó en su cama y espero a que la otra fuera hasta sus brazos.

-¡Quiero dormir contigo! -Fue finalmente hasta él para abrazarlo. Afuera llovía fuertemente y hay que admitir que a la más chica le daban miedo aquellos truenos fuertes.

-Mhh... Pues claro. ¿Por qué no? -Volvió a acostarse, y a darle espacio para su hermana preferida... Bueno pues, era la única. -De nada.

-¡Gracias! -Se recostó y rápido concilió el sueño, ella quería demasiado a su hermano, por eso tenía ese sentimiento de protección. Puesto a qué él era el mayor y su único hermano.

-Descansa...

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Pasó un mes desde todo aquello de la declaración del hijo mayor, todo se encontraba tranquilo...

Excepto para la madre.

A ella no solo le había sorprendido la declaración del hijo, si no que también sintió asco hacia él.

La familia por parte de la madre eran del "evangelio", y le enseñaron a temprana edad lo que estaba bien y que no.

Y lo más MAL que había en el mundo para ello eran los Homosexuales, las Lesbianas y los otros que seguían luego en la lista.

La madre, cuando aún era pequeña escuchó con atención a su padres y obedeció correctamente.

Finalmente, luego de años sabía que su familia había quedado deshonrada desde que su hijo se declaró "gay" frente a ellos.

-¡Hijo! -Llamó a su hijo mayor, dispuesta a tomar la decisión correcta. Pues ella no quería problemas. -¿Puedes venir aquí un momento, cariño?

-¿Que ocurre ma'? -Apareció el chico.

-Mira... -La madre se puso derepente firme, finalmente dispuesta. -Lo siento, pero no puedo aceptarte tal y como eres... Siento que...

-¿Mamá? -Preguntó el chico, un poco desorientado.