El angel y un cafe

Parte 5

Che les sacó la lengua a ambos y se levantó para poder empezar a limpiar la cafetería. Entre los 3 empezaron a alzar y limpiar todo, así acabaron a las 11:30. Cuando iban saliendo Che le preguntó a Am.

-¿Cómo te irás a casa?

-Vendrá Off por mi ¿Y tu?

-Yo lo llevaré a casa- contestó Kim.

-De acuerdo, me avisas cuando llegues a casa - dijo Am- Cierto no tienes teléfono...mmm en cuanto lo repongas escríbeme por favor.

-Claro Am. Te veo mañana- dijo Che.

-No, te veo hasta el lunes. Y no esta a discusión debes de descansar- dijo Am, abrazo rápido a Che y se fue en cuanto vio que el auto de Off había llegado.

-Vamos a casa- le dijo Kim a Che y caminaron al auto. Kim le abrió la puerta del copiloto a Che y después subió al asiento del conductor.

En el trayecto del coche estuvieron en un silencio cómodo, hasta que llegaron a casa y vieron las luces encendidas. En la entrada ya los estaban esperando Porsche, Kinn y Khun. Kim bajó del coche y fue a abrirle la puerta a Che para que pudiera bajar.

-Gracias- dijo Che apenado.

-¿Cómo te fue ?- preguntó Porsche mientras lo abrazaba.

-Bastante bien y ¿ a ti?

-Bien. Vamos te llevaré a tu nuevo cuarto- dijo Porsche.

Empezaron a caminar y Che se dio cuenta que atrás de ellos venía Kinn, Kim y Khun.

-Debes de fijarte bien como llegar. La casa es enorme- dijo Porsche abriendo una puerta que daba a un pasillo con más puertas- Aquí duerme la familia principal. El cuarto de Kinn y mío está del lado derecho y es la segunda puerta.

-Mi cuarto está al lado del tuyo- le dijo Khun a Che.

-Y este es tu cuarto- dijo Porsche abriendo la puerta.

En cuanto Che entró se sorprendió de lo amplio que se veía al cuarto. Las paredes eran de color hueso. Tenía una ventana enorme que se veía toda la ciudad. Una cama del doble de su cama y había varias bolsas encima de ella. Un tocador que abarcaba un gran espacio y tenía un gran espejo con pequeños focos alrededor.

-Y ven- Porsche tomó la mano de Che y abrió una puerta en el cuarto.

-Este es el baño y en esta puerta hay algo más- dijo Porsche mientras abría otra puerta que estaba del otro lado de la habitación.

En cuanto la puerta estuvo abierta Che quedó boquiabierto. Era una pequeña oficina, pero la habían adecuado para que pudiera dibujar. Tenía un escritorio con varios cuadernos de dibujo nuevos, también había un caballete con varios cartones, pinturas, acuarelas y lápices de todos los tamaños y colores.

-Pe...pero...¿Cómo?- dijo Che conmovido.

-Todos te queríamos dar un regalo de bienvenida- dijo Kinn- sé que no es fácil el cambio, pero estamos felices de tenerte aquí.

Che no aguanto la emoción y abrazo a todos.

-Gracias de verdad muchas gracias- dijo e hizo una inclinación profunda.

-En la cama hay más cosas- le dijo Porsche.

Che se acercó a la cama y vio todas las bolsas y cajas que había. La caja de un celular y un laptop último modelo fue lo primero que llamó su atención. Volteo a ver a su hermano con los ojos abiertos porque sabía que eso era muy costoso.

-Nada, son cosas que necesitabas para la escuela y para que nos podamos poner en contacto contigo. El celular ya está programado y tiene los teléfonos de todos los de la casa. Es el mismo número que tenías - dijo Porsche- Sigue viendo que hay mas cosas.