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― una vez tuve un amor y fue tan genial. tan divino que me hacía sentir bien, vivo y feliz, pero rozaba entre lo poético y lo patético por que él jamás me amó o estuvo conmigo. ― masculló ran con una suave sonrisa plasmada en su rostro. ― era yo enamorado de un niño que en una ocasión me rechazó sin pensarlo y hoy en día sigue siendo igual de indiferente a mi corazón.
el saber como estaba nahoya sentado en el asiento de copiloto de ran mientras estaban parqueados en dónde supuso que era una de su tantas casas a las afueras de la ciudad era algo que ni él mismo sabía cómo y cuándo pasó. solamente supo que ran estaba en su despacho con otro ramo de bonitas flores esperándolo para su dichosa cita, jodida cita. ¿cómo lo olvidó?, debió haberse quedado en su casa aunque probablemente ya supiera dónde vivía y todo. acosador de mierda.
― no le gustabas, no podías hacer más. ― suspiró nahoya mirando por la ventana la bonita luna de esa noche. ― a veces deseamos lo que no podemos tener y tenemos lo que no deseamos.
― se escuchó triste eso, naho. ― murmuró el mayor arrugando su nariz a la par que sacaba de la guantera del coche una pequeña cajita de terciopelo rojo. ― ¿acaso te dañaron el corazón?
un quejido resonó por su parte mientras relamía sus labios. estaban muy cerca y eso a nahoya le causaba cierta incomodidad. ¿por qué le contaría su vida a alguien como ran haitani? ¿qué ganaría con eso? ¿su lastima o que siguiera acosándolo? probablemente los dos. era caótico como todo estaba saliéndose de sus manos pero si lo veía de otra forma.. ¿acaso haría diferencia? ¿ran dejaría de insistir en que quería que nahoya fuera su supuesto esposo?
― hubo un tiempo que estuve enamorado de muto yasuhiro. ― murmuró llevando a su mejilla la palma de su mano dónde recostó allí su mentón sin apartar la mirada de la luna.― pero yo no le gustaba, jamás le gusté y jamás le gustaría. ¿cómo alguien como yasuhiro que estaba tan involucrado en el mundo del sicariato iba a fijarse en un estudiante de derecho? ¿cómo un estudiante de derechos con las mejores notas sería novio de posiblemente uno de los sicarios más buscados del país?, era absurdo y ridículo. capricho de mi omega y sus ganas de amarlo.
la mandíbula de ran se contrajo y sintió su corazón ser apretado con fuerza ante la información. ¿nahoya había estado enamorado de alguien como muto yasuhiro? ¿aquél lindo abogado que se aferraba a las leyes y lo que estaba bien había caído rendido ante un sicario y posterior narco? aunque se hiciera el de la vista gorda con los socios que compartía en su trabajo siempre miró a muto como alguien que podía ser una piedra en su zapato si no complacía sus deseos o exigencias, para su bien o su mal nunca tuvo problemas con él y poco después él fue capturado por la DEA para ser extraditado a los estados unidos como la rata que era. allá moriría de viejo.
la muerte de sanzu haruchiyo siempre fue atribuida a él ya que se rumoreaba que ellos eran pareja y incluso que el pelirosa estaba en cinta de él. ¿cómo alguien tan bondadoso y bueno podría enamorarse de una bestia peligrosa?, incluso el mismo ran sabía y reconocía a regañadientes y voz baja que nahoya no merecía que nadie lo involucrase en el mundo de las drogas y asesinatos pero allí estaban ellos dos; ran enamorado de él y nahoya odiándolo.
