ғʀᴇᴇ

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—Es humana, es imposible, hola linda— le dijo —¿Quien es la otra chica— me miró.

—Su amiga, también humana trato de evitar que la trajeramos aquí.

—Ya veo, es atrevida y arriesgada— me sonrió de una manera tan elegante si eso era posible —nos espera un largo viaje mejor, ya vámonos— me hizo señas de que me acercara lo cual hice con miedo —ambas vendrán, tu amiga servirá de compañía.

—Por favor que no nos llevé— Elena le suplico a rose.

—Solo me encargo un pendiente.

—He esperado tanto tiempo este día Elijah en serio lo lamento.

—Tu disculpa no es necesaria.

—Sí, si lo es, tú me confiaste a Katherina y yo te falle.

—Si tú eres culpable y Rose te ayudo porque era leal, eso lo honró dónde estaba tu lealtad.

—Suplico que me perdones.

—Ya lo tienes— seguido de eso le arrancó la cabeza, la cual cayó por un lugar de la habitación, Rose comenzó a llorar y Elena se quedó inmóvil mientras yo buscaba algo para atacar al vampiro y tratar de escapar.

—Tú.

—No Rose ya eres libre- se nos acercó y logré notar un pedazo de madera detrás de él —vamos.

—Pero y la piedra de luna— dijo Elena poniéndome detrás de ella.

—¿Qué sabes de la piedra de luna?

—Que la necesitas y sabemos dónde está

—Y ahora.

—Yo te llevo a ella.

—Dime donde está.

—No lo voy a hacer así, deja a mi amiga libre y te diré.

—¿Estás negociando conmigo?— miró a rose.

—No me había dicho Nada— hablo aún con la voz, algo ronca por el llanto, Elijah me tomo de los hombros y me acerco a él para mirarlo a los ojos.

—Que hacen con esta verbena— dijo al arrancarme mi pulsera y después el collar de Elena.

—No— dije cuando él me sujeto de la cabeza para mirarlo.

—Dime dónde está la piedra de luna.

—En la tumba debajo de las ruinas de la iglesia.

—¿Y que hace ahí?

—Está con Katherine.

—Interesante— me soltó y me puso de nuevo junto a Elena —¿Qué fue eso?

—No lo sé.

—¿Quién más está en la casa?

—No lo sé— nos tomó a Elena y a mí de un brazo a cada una y nos dirigió a las escaleras arriba.

Cuando nos acercamos lo suficientemente tome el pedazo de matera que había visto y ni Elijah o Elena lo notaron excepto por Rose quien me dio a entender que me ayudaría a escapar al llegar arriba notamos que alguien a velocidad vampirica salo a nuestro lado, eso sirvió para distraer al original y le clave el pedazo de madera en el hombro para que nos soltara y Elena y yo corrimos junto a Rose aunque Elijah no se quejó en absoluto por la madera cosa que era extraña.

—No sé quién sea.

—Arriba— escuchamos la voz de Stefan y Elijah subió.

—Abajo— esta vez la voz de damon quién le disparó con una bala de madera en la mano, la cual saco sin más lo que logró hacer que Stefan tomara a Elena y Rose se ocultara y Damon me ocultara junto a él.

—Shhh— dijo Damon acorralándome contra la pared y poniendo un dedo en mi boca mientras me miraba, dándome a entender que cualquier ruido o murmullo él lo escucharía y volveríamos a estar en riesgo.

—¡Disculpen! A quien corresponda están equivocados si creen que pueden vencerme no pueden vencerme oyeron eso lo repito no pueden vencerme quiero a la chica a la cuenta de tres o rodarán cabezas ya han entendido.

—Me iré contigo, solo no lastimes a mis amigos, ellos me querían ayudar— hablo Elena y yo salí detrás de ella con el miedo por dentro pero mostraba seguridad.

—No sin antes saber que quieres con ella— hablé firme y el original se acercó a nosotras a velocidad vampirica.

—¿Qué creíste que ibas a hacerme?— me dijo refiriéndose a la madera que había clavado en su hombro, en eso Elena le lanzo una granada de verbena, ye tomo de los brazos para hacernos hacia atrás.

El original se quedó mientras su piel se quemaba, pero después se regeneró eso no era normal lo que significaba que no era un vampiro normal era más fuerte Stefan lo atacó disparándole varias balas de madera y cuando noto que no le hizo nada se lanzó hacia el bajo las escaleras para que después damon lo logrará matar Elena y yo comenzamos a bajar las escaleras y al ver la mirada de damon hacia Elena entendí que él estaba realmente enamorado de ella, pero su mirada se volvió triste al ver que Elena no se dirigía al sí no a Stefan, pero aun así no tardó en ocultar su tristeza para hacer una seña de que me acercara a él.

—¿Estás bien?— habló al tenerme en sus brazos.

—Si tranquilo, estamos bien.

—No te volveré a pedir que hagas de niñera— besó mi cabeza— en serio ya no más.

—Es divertido, en realidad ya sabes podríamos estar viendo películas en casa o jugar juegos de mesa, pero ya sabes que mejor que lo rutinario en mistyc falls como ser secuestrada.

—Si ya entendí para la próxima, la cuidadora será la rubia— sonrió.

—Bien tórtolos vámonos— dije mirándolos.

INSATIABLE DEMON/Klaus Mikaelson/TVD¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora