Zān IV

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Laena había muerto y Zachary tomo de inmediato a Valkyrria y viajo a Driftmark, siendo el primero en llegar, incluso antes que Daemon con Rhaena y Baela.
Rhaenys lo recibió con lágrimas en los ojos, el pelo desordenado y ropas poco presentables, pero Zachary no estaba para ver el poder de "La Reina que no fue", estaba para ayudarla, al igual que a Corlys.

Rhaenys y Zachary se fundieron en un abrazo repleto de cariño y tristeza, ambos soltaron lágrimas y Zachary se sintió de nuevo un niño como cuando Rhea murió y la mujer lo acepto en su casa. Se sintió como cuando ella paso muchas noches consolandolo por la muerte de su madre.

Tristemente sus lugares se intercambiaron, pues quien necesitaba más consuelo era la mujer está vez, por lo que le ofrecía todo el apoyo que podía con la fuerza del abrazo.

Los barcos comenzaron a llegar al día siguiente, para sorpresa de Zachary, Aemond venía sobre Iperyon, parece que a último momento le permitió que se montará y el joven príncipe se negó a ir en barco y no en su dragón. Viserys ordenó que Maraxes, Rhea y Kadiryan los acompañarán también, el rubio agradeció eso, necesitaba el apoyo de sus hijos para mantener la compostura en el funeral de la mujer que considero su hermana de otra madre.

Algunas otras familias reales fueron a presentar sus respetos por Laena, Zachary permaneció junto a Rhaenys o Viserys, según quién viera que lo necesitara más, aunque el Rey siempre que lo necesitaba era para que le quite una copa a él o a Aegon, aunque el hombre no se lo pidiera, el se encargaba de hacerlo.

A pesar de ir de un lugar a otro, se las ingenió para evitar todo contacto con Daemon, quien a veces aparecía detrás suyo y el se iba antes de que sus labios se movieran.
Zachary se acercó a Viserys y está vez le escondió la copa, evitando que la tomara.

- Ya estamos mayores para que deba pedir que me la entregué, ¿No creé?- Probablemente para otro, eso era una inmensa falta de respeto al Rey.

- Ya estoy lo suficientemente mayor para saber cuando debo dejar de tomar vino.- Aseguro pero hasta Alicent, quien miraba la escena con una sonrisa, le llegó el olor a alcohol que llevaba en la boca.- Aegon ya va por su tercer copa, asegúrate de que no beba la cuarta que está yendo a buscar.- Viserys sonrió como si de un niño se tratara, Zachary suspiro y se volteó, entonces Viserys se llevó la copa a los labios, pero el menor se volteó rápidamente y se la quitó de la mano.- Zachary Targaryen!- Le reclamó mientras el menor vertía el líquido en su boca.

- Aegon dijo.- Se excusó huyendo.

- Maldito niño.- Insultó Viserys sonriendo, compartiendo la sonrisa con Alicent, Zachary era el hijo que ambos hubieran deseado tener, amaban a sus tres hijos, pero Zachary era perfecto para ser el heredero Targaryen, lamentablemente era hijo de Daemon.

- Oye!- Se quejo Aegon al ver como su primo tomaba la última copa de la bandeja.

- La necesitaba más que tu primo.- Le aseguro, devolviendo la copa vacia a la bandeja que la chica sostenía, que no dejaba de mirar a Zachary y que claramente el rubio no estaba respondiendo.- Hazme un favor... Deja de tomar o yo mismo te voy a sumergir en el agua para que se te vaya el olor a alcohol.- Aegon supo que era una amenaza real, pero lo único que tenía que hacer era evitar ser visto por Zachary.

El rubio se acercó al borde y suspiro, dejando caer una lágrima, pero prestando atención a lo que escuchaba.

- Yo no lo quiero.- Dijo la vocecita de Lucerys, llamando su atención.

- Por qué no lo harías?- Le pregunto Lord Corlys, ¿A qué se refería?.- Serías uno de los hombres más poderosos que existe.- El ojiazul supuso que hablaba del castillo y de ser la cabeza de la serpiente.

D Y N A S T Y (Lucerys Velaryon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora