la voz del mar/ Namgi Bts

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HOLI, NO SE OLVIDEN DE DAR APOYO. espero disfruten de los dos caps seguidos. los quiero :)

- ¿Qué hace aquí? Está empapado- preguntó Namjoon au con una mano en la llave.

- Te quiero pedir un disculpa- la lluvia nos mojaba a ambos.

-  ¿Por que?

- Porque no quiero escapar- tome una pausa y me quite el pelo mojado de la cara- Tu eres un chico muy amable, atento, y lindo. Te interesas en mi como nadie lo había hecho antes y no quiero herirte por ser un cobarde.

- No eres un cobarde- ambos estaban a un paso de distancia.

- Si lo soy, porque Justo ahora hay algo que me pide correr en otra dirección, pero yo no quiero hacerlo, porque te quiero- los ojos del menor se cristalizaron.

- ¿Te quedaras conmigo?- la formalidad ya estaba siendo dejada de lado.

- Siempre- sus almas se unieron en un gran beso, tan profundo que la lluvia y los truenos dejaron de sonar para ambos.

  Terminaron en un cálido abrazo pegando lo más que pudieron su cuerpo, hasta que la repentina toz del menor los alertó del peligroso frío que hacía.

- ¿Estas bien?- preguntó el pelimenta alejando su cabeza del hombro de Namjoon.

- Me siento algo mal- Su piel se había vuelto pálida, marcando sus ojeras repentinamente.

- Entremos- Yoongi termino de abrir la puerta y ayudó al castaño a entrar al lugar hasta llegar al ascensor, donde lo pudo apoyar contra una de las paredes del cubículo mientras le daba calor abrazandolo.

- Te contagiaras- susurró Namjoon alertando por la cercanía.

- No importa- llegaron al piso correcto y recorrieron con algo de dificultad el pasillo hasta la puerta correspondiente.

  El pelimenta dejó a Nam descansando en el sillón mientras cerraba la puerta y acomodaba las mochilas en el perchero.

Aunque aquella no fuera su casa se tomo la tarea de recorrerla de punta a punta en busca de mantas, paños húmedos y medicamentos para aliviar la fiebre que tenía el menor.

  Nam estaba destruido físicamente, cualquier movimiento le causaba un dolir insufrible. El pobre con una mano sobre sus ojos trataba de anular la luz que pasaba atreves de la cortina, que por mas leve que sea a causa del clima nublado, hacia que su cabeza latiera.

Todo se mantuvo relativamente calmado, era un tanto incomodo, pero no era el momento indicado para pensar en eso.

  Ahora Yoongi debía meter todas sus neuronas dentro de la hoya en la que pretendía hacer una sopa. Según su abuela eso era lo mejor para un resfriado y el menor no tenia ni un solo sobres instantáneo de sopa que todo coreano debería almacenar en su despensa, así que debía tomar una ruta mas... hogareña.

- Nam ¿Donde están los vegetales?- pregunto desde la cocina, con la puerta de la nevera abierta y su cabeza sumergida en ella.

- Sobre la nevera- su voz fue casi un hilo de aire rasposo saliendo de su garganta, lo suficientemente claro para entenderse como una palabra.

- Claro- desde la posición de medio agacharse, miro hacia arriba y se encontró con lo que había estado buscando hace 10 minutos- Estaba justo frente a mi- susurro casi burlándose de él mismo.

Tomó todas las verduras que aparentaban ir bien juntas, un par de especias, utensilios, delantal, guantes descartables y por ultimo ató su pelo en un pequeño mechón de pelo que por su corta longitud -y las decoloraciones- quedo en un perfecto angulo de 90 grados.

- ¡¿LISTOS COCINEROS?!- Definitivamente se había metido en el papel de concursante de Mastercheff.

- Si- respondió Namjoon, vagamente, levantando el brazo libre que no cubría su cien.

- Esta será mi mejor preparación.

彡

- Por favor dime que esta rica- rogaba Yoongi, viendo al menor desde abajo, sentado sobre sus mentirillas en el suelo junto al sofa.

  El contrario estaba sentado, apoyado contra el respaldo con las piernas cruzadas sobre la mesa ratona, completamente cubierto por una manta.

- A mi parecer...- sorbio un poco mas y acomodó el paño mojado en su frente.

Por alguna razón el pelimenta estaba sudando frio como si realmente estuviera en un certamen de cocina.

- Es lo suficientemente bueno como para que compita con la comida de mi abuela- gran alago.

- Gracias Dios por esto- Yoongi cayo rendido hacia atras, dramatizando lo mas que pudo la escena.

- De todas formas nunca le ganaría a sus platos- agrego rompiendo su pequeña ficción.

- ¡Oye!- con rapidez se incorporó para ver al castaño- No juegues con mis sentimientos- se puso una mano en el corazón, apretando dramáticamente la tela del delantal y quitando una falsa lagrima de su mejilla con la otra.

La risa de Namjoon fue tan dulce y melodiosa, que causó una nostalgia inexplicable en Yoongi, nunca querría dejar de escucharla, ni tampoco dejar de ver los tiernos hoyuelos que se formaban en en su cachetes cuando sonreía. Sea cual sea su razón para mentir lo perdonaría.

  El momento de explicar lo sucedido por parte de Namjoon había llegado, su lado de la historia era muy diferente a comparación del que tenía Yoongi hasta el momento.

- Bien, pues, te diría que te sientes junto a mi pero no quiero contagiarte- refutó a su propia petición.

- Para este punto ya debes haberlo hecho- con tranquilidad se levanto del piso, corrió los cojines que interrumpían el paso y se acomodo bien cerca del menor, casi acurrucándose en él.

- Entonces, mi pasado...

como andan mi gente, disculpen lo de la semana pasada, realmente quería subir el capitulo pero entre el mundial (recordatorio de que ARGENTINA CAMPEON PAPA), las reuniones de fin de año y las presentaciones o shows de fin de año no tuve tanto tiempo para escribir. el viernes sale el otro cap, espero les guste y quieran seguir leyendo. besos.