Joyas, ropa elegante, comida exótica, halagos, admiración, atención, personas a su disposición; Hyunjin amaba ser un príncipe. La ética, moral, responsabilidad y todo lo demás que conllevaba ser príncipe, era lo que menos le preocupaba. Sabía comportarse, nunca tuvo problemas con escándalos ni rumores a pesar de ser alguien a quién le gustaba salir del castillo cada vez que podía.
Cuando recibió la noticia de la futura boda con el príncipe de Windhall, no protestó, tampoco se opuso aunque sabía que su estilo de vida cambiaría de gran manera con el hecho de mudarse a otro castillo. Casarse era el menor de sus problemas, estarían unidos únicamente por beneficios, no por algún tipo de sentimiento, por lo tanto, podría seguir disfrutando de su juventud de la misma manera, siendo sigiloso y cuidadoso, no quería ni pensar en los problemas que obtendría si alguien se daba cuenta de lo que hacía. Sería su fin.
Sin dejar de verse a sí mismo en el espejo, arregló una vez más su cabello tras su oreja, dejando al descubierto un poco más de su rostro. Suspiró sonoramente, pensando en lo largo y aburrido que sería el viaje hasta Windhall, y agradecía enormemente que sus padres se quedarían en el castillo, odiaba sentirse vigilado y controlado por ellos, serían unas vacaciones temporales para él.
—Hyunjin, ¿estás listo?
El castaño vio a su guardia a través del espejo y enarcó una ceja.
—Príncipe Hyunjin, no sólo Hyunjin—corrigió, manteniendo una expresión neutra—Es más, llámame por mi apellido.
El contrario rió sin dejar de verlo, aclaró su garganta y se puso serio.
—Príncipe Hwang, ¿está listo?
Hyunjin elevó el mentón, manteniendo una expresión de superioridad, pero en cuestión de segundos, una sonrisa se asomó en sus labios, empezando a reír.
—Idiota irrespetuoso—murmuró, girándose hacia él para mirarlo de frente—Estoy listo, ¿sabes cuánto tiempo vamos a quedarnos antes de la boda?
—Unos meses, tus padres creen que debes convivir con el príncipe Jisung para que las personas estén satisfechas con su relación.
Hyunjin bufó, cruzándose de brazos.
—Que estupidez—negó con la cabeza—Solo un idiota creería que este matrimonio es real, podría asegurar que las personas ya saben que todo se trata de negocios.
—Puede ser—asintió el mayor—Pero, ¿qué más da? Si te casas no significa que vayas a dejar de lado tu estilo de vida.
—Exactamente—sonrió, regresando su vista hacia el espejo—No estoy listo para estar solo con una persona, es muy aburrido.
—¿Pretendes conquistar pueblerinos y sirvientes en Windhall también?
—Sin dudas—asintió con una sonrisa—Por eso irás conmigo también, solo tú sabes como cubrirme.
—Merezco un aumento—suspiró, agarrando las maletas del príncipe—Nos vamos en diez minutos, te espero abajo.
—Gracias, Chan—le dijo, terminando de acomodar su cabello hasta sentirse satisfecho.
—Nada de gracias, me tienes como tu sirviente personal...
Hyunjin rió por lo bajo al escuchar sus quejas mientras salía de la habitación.
Claramente, no estaba listo para nada de lo que estaba planeado, quería convencerse de que podría manejarlo sin problemas hasta convertirse en rey, pero para ser honesto, a veces se sentía agobiado y un poco preocupado porque tan pronto se hiciera oficial el matrimonio, su vida empezaría a cambiar inevitablemente, especialmente porque tendría que vivir en un pueblo que no era el suyo, rodeado de gente que no conoce y de lugares desconocidos. Quería mantenerse positivo, sabía que Jisung era un chico atractivo, por lo que no se sentía tan disgustado, además de que estaba más que acostumbrado a escaparse sin ser atrapado; pero el solo pensamiento de que un día tendría que dejar todo eso por llenarse de más obligaciones le causaba frustración, porque si bien amaba el poder que tenía por su posición de príncipe, una pequeña parte de él muy en el fondo deseaba ser libre.

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✧꙳𝙱𝚕𝚞𝚎 𝚛𝚘𝚜𝚎𝚜꙳✧ 「𝙼𝙸𝙽𝚂𝚄𝙽𝙶」
أدب الهواةEn el bosque de Windhall, Minho, el monstruo más temido del pueblo, vive con dolor y rencor en su corazón bajo una injusta maldición que solo le permite salir por las noches. Jisung, el único príncipe heredero de Windhall, solo quería saber quién h...