Los siguientes tres días para Nymeria se basaron en evitar cualquier lugar en el que Aemond y Theon podían llegar a encontrarse, se le hacía incómodo quedarse a solas con ellos juntos, más de una vez había pensado que prefería pasar tiempo con su padre a tener que escuchar las conversaciones que esos dos mantenían. Su relación con May no había mejorado, Nymeria había decidido tratarla como a una sirvienta más.
Caminaba por el jardín trasero sola, aprovechando el pequeño momento sin obligaciones que tenía, se relajaba oliendo un par de flores cuando oyó unos pasos acercarse a lo lejos, no quisó dar la vuelta para ver de quien se trataba:
-Jamás había visto una flor como esta.
-Si te centras solo en la capital de los siete reinos, te perderás la belleza que las demás ciudades tienen para ofrecer.
-Haz tenido días ocupados.
-O tal vez solo evite seguir escuchando las conversaciones incómodas que tienes con Theon cuando yo estoy cerca.
-No sé a lo que te refieres.
-Aemod, sé que eres más inteligente de lo que creo, obviamente sabes a lo que me refiero.
-¿Qué es lo que te incomoda?
-No me incomoda que me halagues, me incomoda la forma indirecta en la que lo dicen, como si creyeran que no me doy cuenta de que están hablando sobre mí.
-¿No te incomoda que crea y defienda que eres una mujer que vale mucho y tendría que ser reconocida por tu perseverancia y talento en vez de solo tu belleza, algo en lo que Theon difiere notablemente?
-Yo no dije eso...
-Yo solo defiendo mi postura con respecto a tí, Theon hace lo mismo, si él estuviera dispuesto a debatir o platicar acerca de esto de una forma más madura, no te verías en la posición de escuchar como directamente indirecta toda nuestra conversación es sobre ti.
-¿Y porque no le has planteado a Theon que quieres conversar sobre mí de una forma madura?
-¿Qué crees que opine tu abuelo si llega a sus oídos que estoy hablando de tí y halagando la clase de persona y de mujer que eres cuando estoy comprometido con tu hermana?
-Es un buen punto. -Ambos se observaron en silencio durante unos segundos, ella le sonrió, él luego de asegurarse de que nadie los estuviera viendo, tomó la mano de Nymeria y beso sus nudillos delicadamente mirando directo a sus ojos, ella se veía reflejada en él con una sonrisa y unas rosadas mejillas.
-Princesa. -Ambos voltearon a verlo, Aemond aún sostenía la mano de Nymeria cerca de su rostro, veía con desinterés a John-: El rey implora su presencia en la enfermería, es urgente.
-¿Está bien? -Aemond le dió un ligero apretón a la mano que aún sostenía, ella no quería pensar que el final se estaba avecinando, se negaba a creerlo.
-Si pero solicita su presencia de inmediato, es un asunto familiar. -Dijo las últimas dos palabras mirando a Aemond, remarcando la última palabra, se notaba el disgusto que existía entre ambos.
-Estaré por aquí por si necesitas mi ayuda.
Nymeria asintió levemente con su cabeza, algo más tranquila porque su abuelo no era quien se encontraba siendo revisado por los doctores entonces comenzó a preguntarse si se trataba de alguno de sus hermanos:
-No le diré a Aerys lo que estabas haciendo.
-¿Y qué es exactamente lo que estaba haciendo?
-Somos muchos los que sabemos lo que ocurre entre Aemond y tu.
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Nymeria Targaryen
FanfictionSe dice que cuando un Targaryen esta por nacer los Dioses arrojan una moneda para decidir su fortuna, la tarde que Nymeria nació no fue la excepción, su destino había sido forjado para la corona o eso era algo que a ella le gustaba creer. Su histori...