II. Junto al mar

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Narrador Omnisciente

Una tarde, en una de las tantas entradas a los jardines, Adelya esperaba sentada a todos los príncipes, de pie a su lado, Aurora y Darcy, sus damas de compañía, miraban a su alrededor la naturaleza y hablaban entre ellas, mientras que a su otro lado pero sentada, Helaena miraba con curiosidad el vientre de la castaña y lo acariciaba suavemente.

Helaena: Chispas en el cielo y mar empapado en sangre, una flor se marchita y el aguilucho es llevado- suelta en voz baja

La embarazada toma de la bolsa en la que Helaena tenía su colección de insectos un cuaderno de cuero y una pluma junto a su tintero, dándoselos a Aurora para que escriba la frase dicha por la peliblanca en una de las páginas.

La Tyrell era una fiel creyente de que, si bien los Targaryen son conocidos por su habilidad para controlar a los dragones, algunos de ellos también nacen con la habilidad de mirar hacia el futuro y tener visiones de eventos que aún no han sucedido. A estos Targaryen con la capacidad de profetizar el futuro, a través de llamados "sueños de dragón", se los conocen como "Soñadores".

Adelya suponía que Helaena era una de esos Soñadores, pero nadie le prestaba la suficiente atención a la peliblanca como para siquiera pensarlo, por lo que la mayor anotaba las frases que la menor decía en un cuaderno que compartían, dispuesta a descubrir por su cuenta si eran profecías.

Adelya: ¿Qué creen que sea?- les pregunta

-Niña- responden las tres sin dudarlo

Adelya: En ese caso, ya tengo un nombre planeado- dice con una sonrisa, viendo como a lo lejos los príncipes caminaban en su dirección, siendo escoltados por Sir Harwin y Sir Criston

Criston: Princesa Helaena, Lady Adelya- saluda, siendo imitado por Harwin

Adelya: Buenos días, espero no haberles interrumpido ninguna labor importante con mi pedido de traer a los príncipes- dice intentando levantarse por su cuenta, pero al notar que se tambaleaba, Harwin es el primero en ayudarla, ofreciéndole su brazo como soporte, siendo Aurora la segunda en ayudarla, colocando sus brazos en su espalda para que logre mantenerse firme

Harwin: Sabe que ningún pedido suyo es molestia- la tranquiliza

Aegon: ¿Para qué nos has mandado a llamar?- le pregunta con una pequeña sonrisa amable

La castaña la acaricia la mejilla con una pequeña sonrisa y baja su mano para presionar suavemente su hombro antes de ser abrazada por Lucerys de una pierna. Mientras ella dirigía su atención al pequeño, el peliblanco mayor mira burlonamente a Aemond y Jacaerys, sacándoles la lengua juguetonamente al ser él quien recibió afecto de la Tyrell.

Parece que los de sangre Targaryen tienen cierta debilidad por Adelya, sea en el ámbito que sea...

Adelya: Quiero que hablemos en privado, ¿creen que sea posible?- le pregunta a todos los niños y estos asienten, algunos teniendo muecas que intentan disimular en sus rostros- Sir Harwin, Sir Criston, quédense aquí... Darcy, tú ve a cuidar a Ronin- les ordena

Criston: ¿Está segura mi Lady?- pregunta con una mueca por dejar a los hijos de su Reina solos

Adelya: Por supuesto, no estaré sola, tengo a todos estos caballeros, a esta guerrera y a esta bella dama que me cuidarán- los menores sonríen tras sus palabras y Aurora suelta una ligera risa mientras inclina la cabeza

Harwin: Tengo un mal presentimiento de esto- murmura al estar lo suficientemente cerca de la castaña para hablarle

Adelya: Dada la casualidad de que ocurra algo, me podrá decir "se lo dije"- se encoge de hombros

The Golden Rose | HOTDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora