VI. Incidente

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Narrador Omnisciente

Rhaena: ¿Tu madre se ha vinculado con un huevo de dragón?- pregunta asombrada

Ronin: ¡Si, y en algunos viajes me permite montar a Kalessin con ella!- dice con una sonrisa

Baela: Pero... se supone que solo los Targaryen podemos hacerlo...- hace una mueca, pero el pequeño se encoge de hombros

Ronin: Algunos dicen que mi madre fue un regalo de los dioses para la Princesa Rhaenyra, después de perder a su madre y que la Reina Alicent se casara con el Rey Viserys, habría quedado sola de no ser por ella- repite las palabras que la misma heredera al trono le había dicho una vez que su madre no pudo ir a darle las buenas noches y en su lugar fue la peliblanca

Se encontraban hablando en voz baja en un pasillo, pues las gemelas no lograban conciliar el sueño y Ronin no podía irse a dormir sin haber visto por última vez a su madre, era algo que, debido a un suceso ocurrido hace tiempo, necesitaba hacer para descansar tranquilamente.

De repente, se escucha un fuerte gruñido de dragón que las féminas reconocen, por lo que apresuradas y con una vela en mano, corren hacia una ventana que no deja apreciar mucho el exterior, pero notan claramente como alguien bajaba del lomo de Vhagar.

Un jinete de dragón se había unido a Vhagar, y no era Rhaena...

Baela: Jace*, ¡Jace*, despierta!- lo sacude, haciendo que Jacaerys se despierte- se robaron a Vhagar- le informa preocupada

Jacaerys: ¿Qué?- pregunta extrañado mientras se levanta con rapidez, despertando a su hermano para que también los acompañe

Rápidamente, los cinco jóvenes van al túnel del castillo que conduce a la playa, interceptando al misterioso ladrón que le robó la oportunidad a Rhaena de reclamar a la dragona de su madre.

Baela : Es él- exclama mientras señala a quien se acercaba

Ronin: Aemond...- murmura asombrado

Aemond: Sí, soy yo- confirma sin expresión en dirección a la peliblanca que habló, ignorando que Ronin ya había dicho quién era

Baela: Vhagar es el dragón de mi madre- señala con furia

Aemond: Tu madre murió, Vhagar tiene a un nuevo jinete- responde sin interés

Rhaena: ¡Yo tenía que reclamarla!- dice enojada

Aemond: Entonces debiste hacerlo...- dice ahora lleno de la confianza ilimitada de dominar no solo a cualquier dragón, sino al más grande de Westeros- tus primos te encontrarán un cerdo para volar, te quedaría bien- añade con una sarcástica sonrisa, sin poder olvidar la cruel broma que le hicieron

Ante sus palabras, Rhaena se abalanza sobre Aemond, pero él la tira fácilmente a un lado, lo que hace que Baela, después de escuchar el total desprecio del chico por su difunta madre y luego burlarse de la falta de un dragón de su hermana, añadiendo que en ese momento también arrojó a la misma al suelo, interviene para darle un puñetazo en la cara.

Para su mala suerte, el golpe tuvo poco efecto en él, ya que se recupera rápidamente y le devuelve el golpe en represalia, logrando que ella caiga al suelo.

Ronin: ¡Chicos, no!- pide temiendo que llegue a peor

Aemond: Vuélveme a golpear y te devorará mi dragón- le advierte a Baela, haciendo que la misma se encoja de miedo en el suelo

Esto hace que Jacaerys, al sentir la necesidad de proteger a Baela, intervenga golpeando a Aemond en la cara, lo que empeora aún más la situación. Continua intentando volver a golpear al de cabello blanco, pero este esquiva sus ataques y termina pateándolo al suelo.

The Golden Rose | HOTDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora