Capítulo 15 - La habitación de Sally

8 1 0
                                    

Ya había llegado el mes de octubre cuando el trancazo de Riley se pasó por completo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ya había llegado el mes de octubre cuando el trancazo de Riley se pasó por completo. No había pañuelos al alcance de su mano, ni medicación en cada bolsillo de las chaquetas, mochila o su mesa. Se había librado de los efectos secundarios de ser un pobre novato en las garras de la fraternidad más macabra que había tenido el placer de conocer.

Había superado su primer examen con una nota decente, y todo pudiendo compaginar una vida social digna y una investigación. Quizá esa última parte estuviese algo más atascada, pero no la abandonaba.

Jodie Carpenter, la mejor amiga de Sally, seguía de intercambio en Australia, luchando contra las criaturas más monstruosas de la Tierra, y seguiría allí hasta marzo. La habitación de Sally seguía siendo un lugar inaccesible para ellos, porque la llave no daba señales de vida.

Una tarde, Riley hizo de tripas corazón y empezó a buscar pistas, una vez más, en las redes sociales de Sally. Sus contactos, mensajes públicos... pero no había nada que no hubiese visto antes. Sería brutal poder ver mensajes privados, pero para eso necesitarían sus contraseñas.

Quizá estuviesen, pero en su maldita habitación.

Había días en los que Riley se sentía más animado y convencido de que tenía que seguir adelante, pero había otros días, como aquel, en el que su humor se torcía. Y Matthew debió de notarlo, porque llamó su atención, golpeando la mesa con los dedos cerca de él.

—¿Qué? —Riley se sorprendió.

—Te has quedado ensimismado.

Riley sacudió la cabeza.

Sí, había vuelto a hacerlo. Tenía el plato de albóndigas casi sin tocar, mientras que Matthew estaba dando cuenta ya a su postre.

—¿Te preocupa el examen de matemáticas? —le preguntó, pelando su plátano.

—No, es... Bueno, un poco, pero no es eso.

—Supongo que tendrás muchas cosas en la cabeza, Riley. —No tenía un tono propio de una reprimenda, pero él sintió que lo era—. Pero no te desvíes de los estudios. Después de todo, estás en la universidad para sacarte una carrera y labrarte un futuro.

Sí que era una reprimenda. Riley bajó la mirada a su plato y siguió comiendo. Tragó antes de contestar.

—Lo sé, pero no es fácil tener la mente ocupada en tantas cosas importantes.

—Bueno. Somos jóvenes y podemos con esto y más, pero eso será ahora. Más adelante no tendremos la misma capacidad para estudiar y trabajar a la vez, o ir a teatro e investigar una desaparición. Así que no descuides las clases.

Riley suspiró.

—No lo haré... —Había usado el mismo tono que usaba con su madre cuando se ponía pesada con algún tema. A veces Matthew era demasiado adulto para su gusto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 26, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Magnum DeltaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora