MAKIATO

Capítulo 18

Los malditos cerdos parte 1.

—¿Cuánto por la estúpida y por la niña blanca? —.

—Unos £79,300 millones cada uno — el hombre que me señalo se pone a fuma, me desagrada su aroma y su presencia me da asco.

—Las quiero bien bañadas y arregladas para esta noche, casi se me olvida, un pequeño favor más, quiero que usen esto, igual a la foto, nos retiramos, un bono extra por tener la exclusividad para que nadie le quita su virginidad — me mira con perversión y trato de no verlo, pero su mirada es demasiada pesada.

—Son £500,000 más — saca de su bolsillo un fajo de efectivo y se lo entrega.

—Jajaja, está bien solo porque traes las mejores vírgenes, te puedes quedar con el cambio — se va caminando un tanto alegre.

Se acerca a mi uno de los dos obesos y me intenta besar en la boca... pero no lo hace y se da la vuelta y lo mira el señor que tiene la barba descuida.

—Te pago unos £200,000 en este instante, si haces que unas de las chicas se besen y la otra la mate después del beso — me da nauseas solo de escuchar y luego imaginar ver esa escena ese señor que me trato de besar con su traje blanco está enfermo.

—Sr. Rukoili ya nos tenemos que retirar, la reunión internacional con los demás miembros de The Shadows, se realiza en 30 minutos...— el otro señor lo interrumpe que tiene sobrepesos y poca cabellera.

—Mejor en otra ocasión— saca un reloj de bolsillo, lo mira y lo guarda cierran la puerta nuevamente.

Mierda no quiero perder mi virginidad con esos cerdos, luego nos dejan bajo llave una vez más, las otras chicas se quedarse en el donde mismo lugar, mis amiguis y yo nos fuimos a la misma cama que dormimos juntas es como nuestro punto de reunión, hace unas horas la Itzel rompe el silencio.

—La última vez que llego esos hombres, pago demasiado para que hiciera videos para porno con otras chicas y con varios hombres— Itzel comenta de su anécdota, con la mirada baja y con pavor.

—Eso no es lo peor, luego el subjeto del traje extravagante esta más enfermo, su morbo fue tan grande que me obligo follar con una pistola y luego me nalgueo con una tabla con clavos, cada vez se ponía más loco, no sé cómo hice excitarse demasiado, que me amenazaba si no tenía un orgasmos me iba destrozar con una bala todo mi útero o cortar mi vagina con una navaja, me hizo sufrir como nunca te puedes imaginar, esa noche no dormir, durante meses el miedo me carcomía por ese repugnante atrocidad y otros más que me obligo hacer, aun sigo recordando como hubiera pasado ayer — Bianca lo dice de una manera que su mirada se perdía, hasta se dilato sus pupilas con miedo que empezó a templar. — También mi primera vez me toco cuando apenas sabia contar de 1 al 10, me está apuntando con un arma, me dejaron colgando sin ropa, me dieron varios latigazos hasta quedar la sangrada de la espalda con múltiples cortes de navajas y le fascinada que lloraba, no parada de violarme todo el día, se la pasaron 10 días sin parar y cada vez que sangraba lo vuelve más enloquecido, y me hacía pequeñas heridas y me decía que el ama hacerlo con una virgen, ese asqueroso le quiero romper el cuello, pero no puedo hacer nada —Bianca se frustraba y sus ojos casi llorosos no podría creer que viven así desde años y yo ni lo sabía.

—Esos malditos de mierda, maldita sea no quiero que esos cerdos me follen, eso mierda quiero que traguen sus podría mierda hare que paguen, se me ocurrió una idea para salir — me pongo estresada, pero vuelvo de perder el juicio, mejor me clamo para estar con pensamiento optimista.

—¿Cuál es?, pero como le hacemos me da recuerdos de solo decir... no quiero volver hacer eso otra vez ...— la Bianca entro en un trance, y se pone en silencio y se limita a tartamudeaba, sus manos temblorosas no podría moverlas, opto por esconderse en las sábanas.