Conforme el tiempo pasaba, Seonghwa se creó un falso concepto de felicidad: trabajo, amigos y un gato; según él no necesitaba nada más. Los chismosos que tenía por amigos: Yunho y Mingi se encargaron de mostrarle que, por más que trate de evadirlo;...
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{. Ω .}
Cuando Seonghwa, Yunho y Yeosang llegaron al hospital ya había un lloroso Mingi dando vueltas en la entrada.
—¡¡Yuyu!!—el grito desgarrador del casi papá casi rompe los tímpanos del par de papás.
—Min-Minky...—dijo el más alto con una voz casi inaudible pero con una muy leve sonrisa.
En los alrededores habían varias personas con batas blancas y uniformes quirúrgicos, todas estas personas eran compañeros de trabajo de Yunho.
Sin duda esperaban que el doctor Jeong volviera luego de tener a su hijo, pero no esperaban que justo fueran ellos quienes lo trajeran al mundo.
En cuestión de segundos Yunho ya no estaba con ellos al igual que Mingi, quien estaba gritando de desesperación al ver que se separó 2 cm del otro.
Al verlos desaparecer el mayor empezó a ponerse ansioso. Esto fue notado por el rubio, quien lo llevó hasta los asientos.
—¿Que pasa?—cuestionó el menor.
—Es... Yuyu... ¿Y se algo sale mal?—el rostro anteriormente aturdido del mayor se volvió a uno lloroso de puros nervios—Yeo... ¿Por qué tengo miedo?—
—Yunho es tu amigo, es bastante normal, aparte estás olvidando que él es ginecólogo—ahora mismo Yeosang estaba tratando de consolar a Seonghwa de cualquier forma, pero parecía imposible, a este paso el pelinegro terminaría llorando de desesperación.
—¡¡Yuyu es mi amigo desde que éramos bebés...!!—lloriqueó el mayor.
—¿Entonces así es?—el rostro del rubio se iluminó—Dime, ¿Cómo les contaron que se conocieron?—
—Mi papá... Él dijo que una vez fue... a buscarme a la guardería...—se pasó una mano por el rostro—Yo-Yo estaba con Yu...—
—¿Ah si?¿Se hicieron amigos tan rápido?—
—¡No! Desde niño Yunho era muy llorón y me molestaba—dijo—Mi papá dijo que un día me harté y le avante mi biberón para que se callara—por supuesto que el pelinegro empezó a sentir algo de verguenza.
Ya había llorado 2 veces enfrente de Yeosang, ¿Por qué ahora quería ocultarse en un hoyo muy profundo para que el rubio no lo viera llorando?
Tragó saliva antes de continuar con su historia —Según mi papá seguí aventandole mi mamila durante... ¿Un mes? Hasta que un día se la compartí realmente...—el rostro de Seonghwa ya no estaba en un tono rojizo por el anterior llanto, si no por la vergüenza.
